Un policía de Chicago aparece enfrente de una casa en la cuadra 4100 de W. 77th Place en Chicago, el miércoles 15 de mayo del 2019, donde Marlen Ochoa-Uriostegui, que tenía nueve meses de embarazo, fue hallada tras haber sido estrangulada, según la policía y familiares de la víctima. Tras matarla, le sacaron el bebé cortándole el vientre, según las autoridades.
Una mujer con nueve meses de embarazo fue a una casa de Chicago porque en Facebook le ofrecieron ropa de bebé gratis, pero en vez de eso fue estrangulada y luego le sacaron el bebé cortándole el vientre, dijeron la policía y familiares.
El bebé estaba en condición grave y los médicos dudan que sobreviva. Tres personas fueron detenidas por homicidio y otros cargos a ser presentados el jueves por la tarde, dijo el portavoz de la policía Anthony Guglielmi.
El cadáver de Marlen Ochoa-López, de 19 años, fue hallado el miércoles detrás de la casa, más de tres semanas después de su desaparición. Se le vio por última saliendo de la secundaria a la que iba el 23 de abril, el mismo día que se llamó a los paramédicos a la casa ubicada a varios kilómetros de allí, en el Southwest Side, por un recién nacido con problemas para respirar.
«Creemos que la asesinaron, y creemos que el bebé fue removido a la fuerza después de que la mataron», dijo Guglielmi, quien calificó el crimen como «un horrible acto de violencia».
Una mujer llamó al número de emergencia 911 y reportó que su bebé recién nacido estaba en peligro, informó Larry Merritt, vocero del Departamento de Bomberos de Chicago. Cuando llegaron los paramédicos “el bebé no respiraba, estaba azul”, agregó Merritt. Los paramédicos intentaron resucitarlo de camino al hospital.
La familia de Ochoa-López, quien estaba casada y tenía un hijo de 3 años, dijo que una mujer la invitó por Facebook a su casa y le ofreció una carriola y ropa de bebé.
«Ella estaba regalando ropa, supuestamente con el pretexto de que a sus hijas le habían regalado ropa y ellas tenían toda esta ropa para niño», dijo Cecelia García, portavoz de la familia.
Su familia la había estado buscando desde que desapareció hace más de tres semanas, organizando operativos, dando conferencias de prensa y presionando a la policía para que informara sobre las novedades del caso.
Un avance en la investigación llegó cuando la mujer que dijo que había dado a luz al bebé organizó una campaña de financiamiento en línea, dijo otra vocera de la familia Ochoa-López. La campaña que el bebé estaba a punto de morir y necesitaban dinero para el funeral, dijo Sara Walker.
La policía realizó pruebas de ADN para determinar que Ochoa-López y su esposo, Yiovanni López, en realidad eran los padres de ese bebé, dijo Walker.
López ha estado visitando a su hijo en el hospital.
La policía identificó a la esposa de López como Marlen Ochoa-Uriostegui, pero dijo después que ella utilizaba el apellido de su esposo.