+ Cardi B confiesa que drogaba y robaba a sus clientes cuando era stripper
+ «Nunca he pretendido ser perfecta ni he fingido provenir de un entorno idílico con un pasado inmaculado».
Hace unos días salió a la luz un antiguo vídeo que Cardi B había compartido hace tres años en las redes sociales para sincerarse acerca de los extremos a los que se había visto obligada a llegar en su adolescencia y la primera parte de sus veintitantos para sobrevivir en la escena nocturna neoyorquina, en la que trabajaba como stripper.
Sus declaraciones más impactantes hacían referencia a las artimañas que utilizaba para aumentar sus ingresos aprovechándose de los clientes que trataban de mantener relaciones sexuales con ella, a los que invitaba a un hotel con el pretexto de buscar algo de intimidad solo para drogarles y robarles mientras se encontraban inconscientes.
Ahora la artista ha decidido salir al paso de esa grabación para aclarar, primero, que no justifica bajo ningún concepto ese tipo de comportamiento y por eso jamás ha hecho referencia a sus delitos en las letras de sus canciones como sí hacen algunos de sus compañeros de profesión, y segundo, que si en algún momento cruzó la línea de lo legal o lo moralmente reprochable, fue solo porque tenía ante sí opciones muy limitadas.
«Estoy viendo en las redes sociales un directo de Instagram que hice hace tres años, en el que habla de cosas que había tenido que hacer en el pasado, buenas o malas, que en aquel momento pensaba que eran la única opción a mi alcance para conseguir una vida mejor», arranca el comunicado que ha publicado la artista, madre de una niña de nueve meses juntos a su marido Offset, en su cuenta de Instagram.
«Nunca he pretendido ser perfecta ni he fingido provenir de un entorno idílico con un pasado inmaculado. Siempre digo la verdad y afronto mis actos. Formo parte de una cultura del hip-hop en la que puedes hablar de tus orígenes, de los errores que has cometido para llegar hasta donde te encuentras. Hay raperos que glorifican sus crímenes, los asesinatos, la violencia, las drogas y los robos. Crímenes que creyeron que debían cometer para sobrevivir. Yo nunca lo he hecho, nunca he incluido las cosas que hice como parte de esa vida en mi música porque no me siento orgullosa de ellas y siento la responsabilidad de no glorificarlas», ha añadido Cardi al mismo tiempo que insiste en que se siente muy afortunada de haber logrado salir de un mundo de la que otras mujeres no han podido escapar.
Para concluir, la intérprete ha hecho referencia a cómo drogaba supuestamente a los menos precavidos -unas afirmaciones que podrían volverse muy rápidamente en su contra en el marco de movimientos como #MeToo que han cambiado la escena de la industria musical y cinematográfica,- para matizar que nunca se aprovechó de nadie que no estuviera en plena posesión de sus facultades.
«Los hombres de los que hablaba en ese directo eran hombres con los que había salido o con los que mantenía algún tipo de relación, que estaban conscientes, sabían lo que estaba sucediendo y no se opusieron a ello. Tengo un pasado y no lo puedo cambiar», ha resumido.