La oposición demócrata en el Congreso norteamericano solicitó hoy formalmente que el Servicio de Impuestos Internos (IRS, la AFIP estadounidense) entregue seis años de declaraciones de impuestos personales y comerciales del presidente Donald Trump , con lo que dio comienzo a lo que seguramente será una larga batalla legal con el Ejecutivo.
El representante Richard E. Neal, demócrata de Massachusetts, entregó personalmente una carta de dos páginas en la que exponía su pedido a Charles P. Rettig, el comisionado del IRS.
«El presidente Trump es el primer presidente en casi medio siglo en romper un precedente y negarse a presentar voluntariamente sus declaraciones de impuestos», dijo el representante Dan Kildee, demócrata de Michigan. «El presidente es la única persona que puede promulgar leyes y el público merece saber si los intereses financieros personales del presidente afectan su toma de decisiones públicas», recordó.
En respuesta a las preguntas de los reporteros en la Oficina Oval, Trump ya anticipó que rechazará la solicitud.
«Hasta el momento en que no esté bajo una auditoría, no me sentiré inclinado a hacerlo», dijo.
La mayoría de los presidentes desde Richard Nixon presentaron voluntariamente sus declaraciones de impuestos en los últimos 40 años, lo cual no es requerido por la ley. Trump rompió con ese precedente y se negó a dar a conocer esas declaraciones que revisten carácter privado.