Sé el arquitecto de tu propio destino. Antes de empezar un nuevo plan, siéntate como los arquitectos a trazar un plano. Como si estuvieras diseñando una casa, piensa que debes darle espacio a todas las personas y requerimientos de tu vida. Las casas se planean para acomodarlos. Dale a cada una el espacio que necesita.

Aprende a sacar ideas geniales de la necesidad. Un inventor trataba de crear algo novedoso y necesario a la vez. Pasó días enteros sin que le ocurriera nada y estaba a punto de darse por vencido cuando le preguntó a su asistente cual sería el invento más útil en ese momento «es obvio,» dijo el asistente «una máquina de generar ideas.»

Saca los recuerdos más antiguos que tengas ya que ahí hay algo útil para ti. Un viejo campesino se paseaba por el pueblo llevando un traje nuevo cada día. Le preguntaron de dónde tenía tanto dinero para cambiar su guardarropa a diario y respondió «no son trajes nuevos, es la ropa que me heredó mi abuelo. Ustedes son los que deberían renovar sus modas.»

Encuentra sabiduría en las cosas más inverosímiles. Es un hecho conocido que grandes artistas y filósofos hablan con niños para obtener inspiración ya que sólo la plática errática y llena fantasías de un niño les puede dar la visión extraordinaria y novedosa de este mundo. ¿Dónde más podrías obtener ese tipo de ideas?

Ocupa el lugar más importante con la naturalidad que te caracteriza. Un príncipe se sentó al trono por primera vez y dijo era incómodo. Los carpinteros reales hicieron otro y el príncipe lo declaró incómodo de nuevo. Así fue con cada trono que le trajeron hasta que un sabio declaró «no es la silla, sino la responsabilidad de sentarse en ella.»

Sientes que vas hacia atrás como los cangrejos, pero no es así. Observa a algún cangrejo la próxima vez que vayas a la playa y verás que el cangrejo se mueve peculiarmente pero siempre avanza. El cangrejo tiene ese particular modo de trasladarse para librar las dificultades de caminar en la arena y desconcertar a los depredadores que lo buscan.

Conéctate a la energía de los demás. Así como la luz eléctrica necesita de un contacto para darnos luz, necesitas estar conectado al resto de la humanidad para tener una perspectiva que te diga como solucionar tus problemas. Habla con los demás. Siente su energía. Aliméntalos y alimenta tu espíritu.

Ese recuerdo que no puedes sacarte de la cabeza está tratando de decirte algo. Hay en los rincones de tu memoria un recuerdo que se repite y se repite en tu mente. Puede ser una pieza de música o una escena o tal vez una palabra que no resulta muy clara. ¿Qué es este recuerdo?

Aprende a mezclar las cosas para obtener nuevos resultados. Dice una leyenda que el café fue descubierto por un pastor que probó por primera vez los frutos de esta planta y que decidió preparar una fuerte bebida de color oscuro al hervirlos con agua, pero que su invención no tuvo éxito hasta que se encontró con otro campesino quien fue el que concibió mezclar el cafe con leche de sus vacas.

No veas la distancia como algo malo, sino como algo que le dará una nueva perspectiva del amor. Un marinero temía salir de viaje porque pensaba que su amada lo olvidaría en el tiempo que tardaría en llegar. Así tuvo que salir y al regresar y ver que su amada lo recordaba aún con la misma intensidad, su amor creció mil veces al ver la dedicación de ella.

Aléjate de los estruendos, sean de sonido como de emociones. Un dicho famoso habla de que las personas con mal gusto musical tienen «oído de artillero,» ya que implica que el tronido del cañón les quitó la capacidad de diferenciar entre la armonía y la disonancia. El exceso de emociones intensas y desagradables puede hacer que pierdas la capacidad de mantener la calma.

Aprende a disfrutar lo dulce que tengan los momentos amargos. Las zarzamoras son consideradas entre las frutas más deliciosas y codiciadas del mundo. Estas pequeñas frutas son de un sabor principalmente ácido, pero tienen un cierto gusto dulce al final. Su sabor agrio inicial hace que lo dulce sepa mucho más dulce que en cualquier otra fruta.