Las oficinas del sheriff y los departamentos de policía en jurisdicciones que dan «refugio» a inmigrantes indocumentados (ciudades santuario) tendrán una nueva posibilidad de trabajar con las autoridades federales para detenerlos y deportarlos.
El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) ha anunciado este lunes en Florida un nuevo programa que permitiría a los policías locales arrestar y detener temporalmente a inmigrantes en nombre de la agencia, incluso si las políticas locales establecidas les impiden hacerlo.
Así, los oficiales designados podrán mantener retenidos a inmigrantes indocumentados durante 48 horas si así se lo solicita ICE, aunque no pese sobre ellos orden de detención.
Una vez superado el periodo de 48 horas y si ICE no se hace cargo de su custodia, el reo debe ser puesto en libertad, a menos que exista un Acuerdo de Servicio Intergubernamental, según explica la agencia federal en su comunicado.
El personal seleccionado de la oficina del alguacil «será entrenado y aprobado por ICE para realizar ciertas funciones limitadas de un oficial de inmigración», dentro de la cárcel local o en las instalaciones correccionales, según un memorando del acuerdo firmado por la agencia.
La Unión Estadounidense por las Libertades Civiles (ACLU, por sus siglas en inglés) condenó el plan de inmediato y lo calificó como “el último plan de ICE para reclutar a la policía local en su abusiva agenda de deportación».
La directora de campañas y políticas de inmigración de ACLU, Lorella Praeli, criticó que este programa busca «subvertir la voluntad de las comunidades locales que han aprobado ordenanzas para evitar exactamente este tipo de cooperación entre la policía y el ICE».
Por su parte, el director interino de ICE, Matthew Albence apunta en un comunicado que «las políticas que limitan la cooperación con ICE socavan la seguridad pública, impiden que la agencia ejecute su misión de mandato federal y aumentan los riesgos para los oficiales obligados a realizar arrestos a gran escala en lugares no seguros».
El primer alguacil en firmar este nuevo acuerdo con ICE fue el jefe de policía del condado de Pinellas (Florida). Pero hay otros interesados. ICE asegura que WSO surge de la petición de la Asociación Nacional de Alguaciles de un programa de alcance limitado que les permita honrar a los pedidos de ICE a pesar de las instrucciones de sus gobiernos locales.
El director ejecutivo de esta asociación, Jonathan Thompson, aseguró que este programa les brinda «apoyo legal» y permitirá «reducir la responsabilidad del alguacil».
El anuncio se hizo en un acto de firma al que asistió Jeanette Núñez, vicegobernadora de Florida, estado que está a punto de promulgar una de las leyes más restrictivas en materia migratoria del país y que prohíbe la creación de jurisdicciones «santuario» que impidan la colaboración con ICE.
Las ciudades santuario se han convertido en uno de los principales obstáculos de la Administración del presidente Donald Trump para poner en práctica sus políticas migratorias, que tienen por objetivo acelerar y aumentar el número de indocumentados que son deportados.
El presidente Trump anunció el domingo que nombrará al ex jefe de la Patrulla Fronteriza, Mark Morgan, quien dirigió la división durante los últimos meses de la administración de Obama, como el nuevo jefe de ICE.