El cantautor español Joaquín Sabina expresó su abierto rechazo a la llamada “revolución cubana”, a la que apoyó en su juventud, pero que actualmente reconoció como una dictadura.

Para el compositor, el fracaso de la revolución ha sido uno de los más grandes del siglo XX, y no escondió su decepción por aquello en lo que se tornó el movimiento encabezado por Fidel Castro en la década de los 60.

Durante una entrevista para el diario español El Mundo, el intérprete de Contigo afirmó sentirse muy “cabreado” por lo que resultaron los movimientos revolucionarios del siglo pasado, de los que en un inicio se reconoció simpatizante.

“Muy cabreado. Y cabreado también con el demoledor fracaso de todas las revoluciones del siglo XX. Fui amigo de la revolución cubana y de Fidel Castro. Pero ya no lo soy, ya no puedo serlo”, declaró.

El cantante explicó que ahora está de parte del pueblo cubano, de aquellos que exigen un cambio de sistema y que tienen prohibida la entrada a su país natal por pensar diferente.

Asimismo, expresó que cambiar de opinión y reconocer las fallas del sistema que apoyó en un primer momento es algo necesario para todos los que fueron simpatizantes de la izquierda, pues hay una responsabilidad social en reconocer los errores públicamente y corregir sus posturas.

“Ahora estoy del lado de los que se manifiestan y de los que se exilian de la Isla. Los que hemos sido de izquierdas tenemos la responsabilidad de decir la verdad ante algunos desastres de la izquierda”, declaró.

El poeta de 73 años se había confesado un ferviente admirador del comunismo implantado a la fuerza en Cuba por la familia Castro, y de todos los principios que predicaba en un inicio, que eventualmente no cumplió.

Durante varios viajes a La Habana, Sabina se reunió en persona con el difunto dictador, y reverenció a la cúpula militar de la Isla. No obstante, en los últimos tiempos ha sido consciente del caos socioeconómico de Cuba, y la imposición del unipartidismo, contra lo que se ha pronunciado.

Recientemente, el andaluz mantuvo una conversación con la poeta cubana Katerine Bisquet Rodríguez, integrante del opositor Movimiento San Isidro (MSI) y que fue exiliada forzosamente de la Isla por el régimen.

La joven activista y desterrada asistió a una ceremonia en España para recibir el premio Ciudad de Alcalá, por su labor contra la dictadura cubana.