Los senadores republicanos Susan Collins (Maine) y Mitt Romney (Utah) son dos de los republicanos que alzan la mano, para respaldar que John Bolton sea llamado a rendir testimonio para el proceso de juicio político al presidente Donald Trump.
“No puedo decirles qué papel jugaría el testimonio de John Bolton finalmente en una decisión final, pero es relevante”, dijo Romney a los periodistas. “Y, por lo tanto, me gustaría escucharlo”.
Collins reaccionó también al adelanto del libro de Bolton que obtuvo The New York Times, donde expone que el presidente Trump pidió detener la ayuda militar de $400 millones de dólares a Ucrania a cambio de investigar al exvicepresidente Joe Biden y a su hijo Hunter.
“Los informes sobre el libro de John Bolton fortalecen el caso de los testigos y han provocado una serie de conversaciones entre mis colegas”, reconoció Collins.
No queda claro cuántos republicanos se sumarían, pero si los 47 senadores demócratas votan para que se llame a más testigos, al menos cuatro de sus opositores tendrían que unirse a ellos para aprobar una moción, algo que es todavía posible.
“Desde el principio he dicho que, para ser justos con ambas partes, la decisión de llamar o no a testigos se tomará luego de que tanto los gerentes de la Cámara como los abogados del presidente hayan tenido la oportunidad de presentar sus casos”, dijo Collins en un comunicado. “Siempre dije que probablemente votaría para llamar a testigos, tal como lo hizo en el juicio de (Bill) Clinton de 1999″.
El presidente Trump aseguró que los demócratas “nunca” llamaron a Bolton, a pesar de que el exasesor de Seguridad Nacional estuvo en la lista del Comité de Inteligencia, presidida por Adam Schiff, desde las primeras indagatorias.
El líder de la minoría en el Senado, Charles Schumer (Nueva York) presiona para llamar a Bolton y a Mike Mulvaney, jefe interio de Gabinete.
“El libro del señor Bolton es una prueba más de que un gran número de personas estaban ‘informadas’ sobre este esquema, como dijo el embajador (Gordon) Sondland. Y ahora están todos ocultándose”, acusó Schumer. “Parece que no solo hay más evidencia de que el presidente retuvo la ayuda para lograr una investigación y obtener una beneficio político, sino que parece haber un enorme encubrimiento entre varias personas clave en la Casa Blanca que lo sabían y dijeron nada al respecto, mucho menos trataron de evitarlo”.
En una entrevista con Mary Louise Kelly de NPR, el senador independiente Angus King (Maine) estimó que entre 5 y 10 republicanos se sumen a la moción de los demócratas.
“Creo que habrá más de cuatro (senadores). Mi predicción audaz será cinco o diez”, afirmó. “Me sorprendería si hay un fuerte impulso para decir: ‘No, no vamos a permitir a John Bolton’”.
Bolton dejó la Casa Blanca en septiembre, cuyo despido fue anunciado por el propio mandatario, tras el escándalo desatado por la reunión que el mandatario tendría con líderes talibanes.
“Le pedí su renuncia a John, la cual me fue entregada esta mañana”, dijo el mandatario en Twitter. “Agradezco mucho a John por su servicio. Nombraré a un nuevo asesor de Seguridad Nacional la siguiente semana”.
El mandatario republicano dijo que había estado en desacuerdo con varias decisiones del asesor, quien fue colaborador en las administraciones de Ronald Reagan y George H.W. Bush.