Después de un día de pesca junto a su esposo, Lou Huerta no imaginó que una pequeña picadura significaría ser operada cinco veces de su pies tras infectarse. Médicos explican que la bacteria habita en aguas calientes, ostiones y jaibas. De no tratarse a tiempo, puede ser mortal.
Lou Brigitte Huerta, de 35 años, nunca imaginó que un día de pesca terminaría casi con la amputación de su pie por una fascitis necrosante o mejor conocida como la bacteria ‘come carne’.
“Te está dañando todo por dentro, necesitamos abrir para sacar todo” esto fue lo que le dijeron los médicos a esta madre de cuatro hijos cuando llegó al hospital. La operación fue desde los dedos del pie hasta la rodilla.
Lou explicó cómo la bacteria entró a su cuerpo: “en la foto se ve como si me hubiera picado una araña, es un piquetito pequeño” dijo.
Este fue un incidente mínimo pero con consecuencias que casi le cuestan la vida. “Agarré la jaiba con las tenazas pero cayó en mi pie. Una de las esquineras de la concha me picó y le dije a mi esposo que me dolía bastante”.
Gracias a la atención médica rápida y a que no padece enfermedades adyacentes, Lou pudo sobrevivir.
De la misma manera que Lou Brigitte se aferró a la vida, ahora confía en su recuperación para salir adelante aunque sabe que será un largo proceso. “Los tendones de los dedos quedaron expuestos y conforme se regenere la piel se va cubriendo”.
Tanto el departamento de salud del condado Galveston como el de Harris, indicaron que no tienen información del caso de Lou Huerta. Durante este 2021, en la isla solo se han registrado dos casos de infección de la bacteria ‘come carne’. Uno de ellos ocurrió en Crystal Beach, mientras que el otro pudo ser relacionado a comida.
En el 2020 solo hubo un caso de infección que también fue relacionado a la comida. Galveston no reportó ninguna muerte por esta causa.
¿Cómo prevenir la bacteria?
Unas 80,000 personas son infectadas con este tipo de bacterias en EEUU, según cifras de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC). De los contagiados, 100 mueren a causa de estos vibrios, como también se le conoce.
Un paciente no solo puede infectarse por tener contacto con la bacteria, sino que también puede ser consumida y ocasionar diarrea, náuseas, vómitos, fiebre y escalofríos.
Para evitar sufrir de esta enfermedad, los CDC recomiendan cocinar muy bien mariscos y ostras antes de consumirlos, lavarse las manos luego de manipularlos. Evite bañarse en las playas cuando tenga una herida. Si nota alguna infección en una herida después de bañarse en la playa, llame a su médico y hágale saber que tuvo contacto con agua salada.