El famoso astrólogo puertorriqueño Walter Mercado (1932-2019) fue durante décadas una luz para los latinos en Estados Unidos, una vida irrepetible que queda retratada en el documental Mucho Mucho Amor que se estrena mañana en la plataforma Netflix.
El trío latino de creadores de Mucho Mucho Amor relató este martes a Efe cómo se dieron los pasos para crear este documental, un homenaje a este puertorriqueño cuyos programas, durante décadas, eran esperados en los hogares de millones de hispanos con la esperanza de un mensaje de un mejor futuro para sus vidas, que no eran fáciles en Estados Unidos, su país de acogida.
«Nuestras abuelas nos mandaban callar a las 5.45 de la tarde», dijo el productor y guionista basado en Los Ángeles Alex Fumero, uno de los tres latinos que han unido esfuerzos para hacer posible Mucho Mucho Amor.
«No entendíamos el porqué de hacernos callar», rememoró Fumero, que como muchos otros conoció desde su infancia la figura de Walter Mercado, a quien define como «alguien diferente».
«Walter Mercado era diferente y eso lo reflejaba en su estética impactante», aseguró Kareem Tabsch, otro de los creadores de Mucho Mucho Amor.
«Walter Mercado nos recuerda a nuestras abuelas. Simbolizó la conexión con la cultura latina», subrayó Tabsch, de madre cubana.
DIO ESPERANZAS A LA VIDA DE LOS LATINOS
«Dio esperanza en sus vidas a muchos latimos de Estados Unidos», añadió Tabsch, para quien Mercado, simplemente, ya con sus extravagantes vestimentas, capas y peinados, mostraba claramente valentía.
Ese estilo inconfundible queda reflejado en un proyecto fílmico en el que aparecen reconocidas figuras del mundo latino de los Estados Unidos como el dramaturgo y actor de origen puertorriqueño Lin-Manuel Miranda, el periodista mexicano Jorge Ramos, Cristina Saralegui, Howard Stern o Raúl de Molina.
Mucho Mucho Amor, en el que se muestra a Mercado durante su carrera como bailarín y actor, terminó de grabarse el día antes de su muerte, a sus 87 años, el 2 de noviembre de 2019.
«Walter Mercado, sin duda, inyectó la esperanza en las salas de los hogares de los latinos de Estados Unidos», completó Fumero.
Cristina Costantini, la tercera creadora de «Mucho Mucho Amor», destaca la extravagante imagen que creó el astrólogo, envuelto en largas capas de colores, colgantes y peinados más típicos de una mujer madura que de un hombre.
«Pensó mucho en su imagen. Necesitaba de joyería y adornos para que la gente le prestara atención», subrayó Constantini.
CULMINAR EL TRABAJO LLEVÓ 2 AÑOS
No obstante, los autores del documental, que tardaron casi 2 años en culminar el trabajo, aclaran que fuera de los focos de las cámaras Walter Mercado era una persona reservada y culta, aunque con ese matiz llamativo, «una forma de autoestima», según Tabsch.
Una personalidad muy particular que le permitió, además, durante décadas triunfar en el mercado hispano de Estados Unidos y Latinoamérica.
El documental se estrenó oficialmente el 24 de enero pasado en el festival Sundance en Park City (Utah, EUA) y mañana en la plataforma de Netflix.
Los autores de Mucho Mucho Amor subrayan que el paso por Netflix es un escalón muy importante que permitirá que el documental llegue a todo el público, fuera del ámbito latino donde Walter Mercado era, sin duda, una referencia.
«Netflix es una plataforma que llega a todas las comunidades, global, y eso es muy importante para su difusión», aseguró por su parte Fumero.
Tabsch dijo que a pesar de ser un latino, un puertorriqueño, Mercado tuvo la idea de trascender ese mercado para llegar a todo el público estadounidense, un paso que nunca llegó a dar.
«Walter Mercado hablaba inglés pero tenía algún problema con su acento», recuerda Costantini sobre la barrera que supuso la lengua para llegar a más público, aunque recuerda que, incluso, algunos estadounidenses, sin entender una palabra de español, llegaban a seguir alguno de sus programas impactados por la imagen del puertorriqueño.
Respecto al tema de la sexualidad de Walter Mercado, Fumero recuerda que aunque en innumerables ocasiones le preguntaron al respecto siempre respondía que las nuevas generaciones estaban obsesionadas con el sexo.
«Nos decía que tenía relaciones con estrellas y planetas», contó Fumero, quien matiza que Mercado no se identificaba como heterosexual, sin más.
«El legado que deja es que lo importante es el amor al prójimo y a los demás», apuntó Tabsch.