Servicios de alimentación y salud suelen ser de fácil acceso en todos los estados para extranjeros.
Según la Agencia de la Naciones Unidas para la Migración y el Reporte Mundial de Migración, América del Norte fue la tercera región en el planeta con mayor número de flujo extranjeros en 2020, registrando 58.7 millones de personas.
Este registro que se actualiza cada cinco años se verá fuertemente alterado para 2025, luego de las elevadas cifras de centroamericanos que se han trasladado hasta la frontera sur de Estados Unidos, buscando mejores oportunidades para su vida.
A raíz de ello, los estados que más números de ingresos irregulares reportan han endurecido sus políticas migratorias, limitando algunos accesos para indocumentados, como ha sucedido en Florida y Texas, dos estados gobernados por republicanos que están mayoritariamente en contra de las legislaciones del gobierno de Joe Biden.
Aún así, vale mencionar que varias ciudades ofrecen cientos de oportunidades para los trabajadores extranjeros, cuenten o no con la documentación estadounidense.
De estos servicios, que pasan por la salud, educación, alimentación, transporte o vivienda, muchos suelen ser gratuitos, como una gran oportunidad para una mejor calidad de vida.
Salud
En referencia al sistema de salud, la legislación estadounidense prohíbe al personal médico cuestionar sobre la situación migratoria de un paciente y tampoco permite que los profesionales en la salud compartan su estatus.
En cuanto a las clínicas y hospitales gratuitos, cada estado y cada condado tiene habilitado un enorme número de centros de atención médica gratuitos o de bajo costo, que ascienden a más de 3.000 en todo el país.
Aunque la mayoría de beneficios se encuentran restringidos para aquellos que no cuenten con documentación, la ley obliga a los centros médicos a atender todas las emergencias, especialmente en casos de gravedad en los que corra peligro una vida.
Las mujeres en estado de embarazo que no cuenten con documentos también pueden acceder a controles prenatales y asistencia de parto, pues aunque su estatus de ilegal no le permite gozar de todos los beneficios del sistema de salud, el bebé sí goza con los servicios de atención médica.
Por otro lado, los ciudadanos que cuenten con documentación legal y gocen de la ciudadanía, pueden optar por acceder a los programas de salud nacional Medicare, Medicaid, el Seguro Médico para Niños o el Mercado de Seguros Médicos.
Educación
En cuanto a los sistemas educativos, la ley indica que todo niño tiene derecho a una educación publica gratuita, sin importar su estatus migratorio, razón por la que los menores pueden acceder los distintos colegios de estados y condados en Estados Unidos.
Además, una de las facilidades de inscripción para los estudiantes es la presentación de un registro de nacimiento, ya sea local o extranjero. Asimismo los estados exigen una prueba de residencia en el distrito para el que optan la inscripción y una prueba de edad para evaluar el grado al que puede acceder el aspirante.
Como otro beneficio para los indocumentados que aspiren a la educación en Estados Unidos, la Ley de Privacidad y la Ley sobre los Derechos Educativos de la Familia le exigen que los archivos migratorios de un estudiante no sean entregados a los agentes federales, salvo que el centro educativo cuente con el consentimiento de los padres.
Solo Alabama, Georgia y Carolina del Sur no permiten a indocumentados la su inscripción en escuelas públicas. En otros servicios, los indocumentados también pueden acceder a las bibliotecas públicas como otra alternativa de aprendizaje.
Trabajo
En referencia al acceso de sistemas laborales, hay varios programas que permiten a los migrantes acceder a trabajos en servicios postales o cuidado de niños y personas de la tercera edad.
Asimismo, algunas empresas manufactureras y fábricas permiten a los inmigrantes acceder a puestos laborales en los que la remuneración no supera el sueldo mínimo, aunque en muchas oportunidades tanto empleador como trabajador se exponen a multas por parte del estado.
En referencia a los requisitos, muchas veces con la hoja de vida del trabajador y la experiencia en un empleo similar suelen ser suficientes para acceder a un empleo en Estados Unidos.
Los jóvenes entre los 16 y 24 años pueden optar a capacitaciones de competencias laborales, con los que mejoran sus capacidades de cara a la búsqueda de un empleo.
Vivienda
Este proceso mayoritariamente suele ser complejo e implica un largo lapso temporal en el que los migrantes reciban la aprobación por parte de un condado o estado.
En la primera alternativa están las pensiones o centros comunitarios, donde no se exigen un monto sumamente alto para vivir o donde sencillamente no existe un precio de alquiler.
La segunda alternativa es optar a una hipoteca, que va ligada a los servicios económicos, laborales y educativos a los que pueden acceder migrantes, en donde las entidades financieras puden facilitar préstamos máximos de 100.000 dólares.
Aún así, acceder a estos beneficios suele ser en la mayoría de los casos muy complicados y pueden tardar años. Estos procesos algunas veces se facilitan si algún solicitante cuenta con documentación estadounidense.
Otros servicios
En otros servicios para los que pueden optar los migrantes están los programas de asistencia alimentaria, alimentación para mayores de 60 años, asesoría nutricional y alimentación en escuelas durante el verano.
También existen descuentos en servicios de internet o préstamos a corto plazo para suplir necesidades básicas, además de optar para programas de vivienda, aunque estos priman a aquellos ciudadanos que cuentan con un estatus legal.