Como era de esperarse, la cantante protagonizó algunos de los momentos más destacados del evento que fueron registrados por las redes sociales y la transmisión oficial del partido
El Super Bowl LVIII llegó a su fin y como era de esperarse, la novia de Travis Kelce se llevó todos los reflectores a pesar de que no tuvo mucho tiempo en la transmisión. No obstante, las redes oficiales de la NFL se encargó de recopilar los momentos más destacados de la cantante a lo largo del partido más importante del fútbol americano.
Taylor llegó muy temprano al Allegiant Stadium de Las Vegas a pesar de que dos días antes se encontraba en otro continente debido a su compromiso con su gira The Eras Tour. Después de un viaje de 12 horas desde Tokio, Japón, Swift llegó a Los Ángeles un día antes del evento para estar bien descansada, y dos horas antes del juego, ya estaba siendo captada en los pasillos del recinto junto a Ice Spice, Blake Lively (esposa de Ryan Reynolds) y Brittany Mahomes.
Taylor apareció con un conjunto color negro conformado por una blusa y pantalón con aberturas adornadas con brillos en los muslos. Ya durante el juego, la cantante vivió una montaña rusa de emociones.
La primera mitad del juego, Kansas City tuvo un desempeño muy por debajo de lo esperado, lo que hizo que Taylor no disfrutara mucho de lo que pasaba en el campo. Las cámaras aprovecharon para mostrar su disgusto y a su vez los usuarios de redes no tardaron en hacer memes del momento.
Aún así, Taylor pudo disfrutar de la fiesta que vivió con sus amigas en los palcos, donde además se le sumó Lana del Rey.
El enfrentamiento entre los Chiefs y los San Francisco 49′s tuvo pocos puntos gracias a sus férreas defensivas hizo que Taylor tuviera tiempo para explicarle el juego a una Ice Spice que estaba ahí sólo para divertirse un rato con una de sus mejores amigas dentro de la industria musical.
Pero sin lugar a dudas, el momento que hizo explotar las redes fue cuando Taylor fue captada por las cámaras tomando un largo trago a su bebida mientras Travis Kelce y compañía eran vencidos por una diferencia de 3 puntos.
Al parecer, Taylor estaba en su propio juego con Blake Lively para no aburrirse, en el que si la pantalla las captaba, tomarían sus tragos hasta el fondo, algo que la estrella pop hizo en menor tiempo que su amiga, azotando incluso el vaso contra la barra.
Después de un medio tiempo a cargo de Usher que muchos consideraron que no estuvo a la altura de presentaciones anteriores, los equipos regresaron al emparrillado y los puntos comenzaron a caer. Para el tercer cuarto, Kansas City logró su primer touchdown en una conexión de Mahomes con Marquez Valdes-Scandling, lo que hizo que el palco de Taylor Swift y compañía se estremeciera entre gritos y saltos.
El juego dio un giro alucinante cuando los equipos definieron el juego en tiempo extra, y tras un gol de campo de San Francisco que puso a temblar a todos los seguidores de Kansas City, el equipo pudo sobreponerse y anotar un touchdown que Mahomes lanzó a Mecole Hardman, dándole la victoria a los Jefes con un muy cerrado resultado de 25 a 22, convirtiéndose en los primeros bicampeones de la NFL en más de 20 años.
Obviamente, la euforia en los palcos de Swift no se contuvo, y la familia y amigos de Taylor y Travis abrazaron a la cantante prácticamente asfixiándola con su amor. Pero la imagen más esperada llegó minutos más tarde, cuando la pareja se encontró después del juego en el campo y sellaron con un romántico beso y un emotivo abrazo su celebración.
Así, la historia del romance de Travis y Taylor tuvo un desenlace de película en el partido más importante de la NFL.