El vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, anunciará nuevas sanciones contra Venezuela y pedirá que se postergue el «simulacro» de las presidenciales del 20 de mayo, en las que Nicolás Maduro busca la reelección.
Un asesor del vicepresidente en condición de anonimato, dijo a la AFP, que Pence hará el anuncio durante su intervención en una sesión protocolar del Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA), que se llevará a cabo este lunes en en el Salón de las Américas de su sede principal en Washington.
Las nuevas medidas estarán vinculadas al tráfico de drogas, expresó, sin precisar si también se dirigirán a la industria petrolera de Venezuela, el país con las mayores reservas de crudo del mundo. Asimismo, señaló que esperan que la delegación venezolana se retire durante el discurso del vicepresidente.
Alyssa Farah, secretaria de prensa de Pence, dijo al anunciar la visita del vicepresidente norteamericano a la OEA días atrás, que se buscará «responsabilizar a los actores no democráticos de la región por sus acciones».
«En su discurso, el vicepresidente reafirmará nuestro compromiso de aumentar la prosperidad económica y la cooperación de seguridad conjunta con nuestros amigos y aliados en el hemisferio occidental, así como también de responsabilizar a los actores no democráticos de la región por sus acciones», indicó.
El gobierno de Donald Trump es un fuerte crítico de la Venezuela dirigida por Maduro, a la que considera una «dictadura».
En los últimos meses, Washington ha aplicado numerosas sanciones económicas contra Maduro y funcionarios o exfuncionarios venezolanos, además de prohibir a entidades estadounidenses negociar deuda del estado venezolano o de su petrolera Pdvsa, y comerciar con el petro, la criptomoneda lanzada por Caracas.
En la reciente Cumbre de las Américas en Lima, en la que representó al presidente Donald Trump, Pence dijo que Washington quiere impulsar «más sanciones» para aislar a Caracas.
La OEA ha estado dividida entre los miembros que quieren castigar a Venezuela por lo que consideran retrocesos democráticos, y los aliados de Maduro que apoyan a su gobierno.
Venezuela anunció en abril de 2017 su retirada de la OEA, a la que acusa de interferencia en sus asuntos internos. El proceso de salida tomará dos años.