El líder chavista volvió a mencionar el concepto que lanzó el pasado fin de semana, antes de que cuadrillas rompieran la cuarentena del coronavirus para salir a pintar amenazas a opositores en sus casas. Ahora dijo que la ira “puede llegar hasta el último rincón”
La respuesta de Nicolás Maduro al anuncio del presidente Donald Trump, de enviar buques de la Armada hacia Venezuela para reforzar sus operaciones antinarcóticos en el Caribe, fue que “la furia bolivariana está lista y preparada”. Se encargó de hablar de las cifras del coronavirus en los Estados Unidos y advirtió que “la furia bolivariana puede llegar hasta el último rincón”.
Lo único que hasta ahora se sabe de la Furia Bolivariana es una serie de grafitis con amenazas en la vivienda de varios diputados de la Asamblea Nacional y dirigentes políticos regionales, que aparecieron en la mañana del 29 de marzo en diferentes estados del país.
En los últimos días, los Estados Unidos han ido endureciendo su posición contra el gobierno de Nicolás Maduro, primero fue cuando el 26 de marzo publicó la lista de los funcionarios que calificó como narcoterroristas, ofreciendo millones de dólares contra algunos de ellos. Cinco días después, el 31 de marzo, el Departamento de Estado presentó la propuesta de un gobierno interino y dio los pasos que llevan al levantamiento de las sanciones.
Ayer Trump aseguró: “No vamos a permitir que los carteles de droga utilicen la pandemia para amenazar las vidas de americanos” y anunció el envío de buques al Caribe.
“En conjunto con las 22 naciones aliadas, US Southern Command adelantará vigilancia en incautaciones de cargamentos de droga y dará apoyo en la erradicación”, dijo mientras el jefe del Pentágono, Mark Esper, quien también aseguró que “el régimen ilegítimo de Maduro se beneficia del tráfico de drogas”.
Aunque la noche anterior, luego de conocerse la propuesta del Departamento de Estado (“Marco para la transición democrática de Venezuela”), Maduro convocó de emergencia al Consejo de Estado y lo declaró en sesión permanente, con la excusa del virus chino y “para la defensa de la institucionalidad, democracia y soberanía”, lo extraño es que ante la amenaza de aviones y barcos para el Caribe, se dedicó a llamar al programa de Diosdado Cabello, como el que necesita un comodín.
El Consejo de Estado está contemplado en el artículo 251 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, dándole el carácter de órgano superior de consulta del Gobierno y de la Administración Pública Nacional. Y le asigna “recomendar políticas de interés nacional” en asuntos a los que el presidente de la República considere de especial trascendencia.
Tal y como lo describe el artículo 252, el Consejo de Estado lo presidió la vicepresidente Delcy Rodríguez. “Estará conformado, además, por cinco personas designadas por el Presidente”, que serán un representante designado por la Asamblea Nacional, otro por el Tribunal Supremo de Justicia y un Gobernador designado por el conjunto de mandatarios estadales.
En este caso, Maduro presentó a Luis Eduardo Parra Rivero, diputado electo en las filas del partido Primero Justicia, como presidente de la Asamblea Nacional, en lugar de Juan Guaidó, quien legalmente fue escogido por mayoría de los diputados opositores. Estuvo también el presidente del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), Maikel José Moreno Pérez; y el gobernador de Miranda, Héctor Vicente Rodríguez Castro.
Como invitados especiales estuvieron los ministros de Defensa, GJ Vladimir Padrino López; el de Salud, Carlos Humberto Alvarado González; y el infaltable de Comunicación, Jorge Jesús Rodríguez Gómez.
En conversación con Diosdado Cabello, en el programa Con el Mazo Dando, dando evidencia de haber limado sus asperezas en momentos tan críticos, Maduro dijo, en tono de burla, que cuando oyó a Trump pensó que venía contra Venezuela “con toda su campaña, con toda su falsaria y manipulación. Y le da la palabra al secretario de Defensa, jefe del Pentágono, un tipo ahí con un peinadito para un lado, un fluxecito gris, que empieza a hablar una perorata y plum Venezuela; que van a mover unos barcos para proteger el Caribe, etcétera. Termina la intervención del tipo y dicen: preguntas”.
Asegura Maduro que el propósito es desviar la atención del virus y que los periodistas no hicieron ni una sola pregunta sobre Venezuela. “Buscan crear una escalada de declaraciones contra Venezuela, pero no lo han logrado ni lo van a lograr. Nosotros nos mantenemos controlando la pandemia y Estados Unidos en una crisis humanitaria. Es una manipulación horrorosa, miserable, de Donald Trump”.
“Si ellos quieren vigilar el tráfico de drogas, de cocaína, que produce Colombia, no la produce Venezuela; si ellos quieren parar la cocaína de Colombia, tienen que actuar por el Pacífico, porque si se van por el Caribe están dejando libre por donde se va la droga”.
A Trump lo llamó “extorsionador profesional de Nueva York” y aseguró: “Nosotros estamos nervios de acero, estamos absolutamente serenos y listos para combatir en el terreno que nos toque para defender el honor, la paz, la soberanía y la independencia de nuestro país”.
Advirtió que la furia bolivariana está lista y preparada. «No se equivoquen con Venezuela; lo digo suavecito, Diosdado, tú sabes lo que estoy diciendo, La furia bolivariana puede llegar hasta el último rincón”.
La respuesta inmediata, por parte del Gobierno, a las dos acciones, las dio el canciller Jorge Alberto Arreaza Montserrat. Rechazando el gobierno de transición, dijo que no “aceptará jamás tutelaje alguno, de ningún gobierno extranjero”. Y, en cuanto a la operación en el Caribe, expresó que “Venezuela repudia las infamias proferidas por el gabinete de seguridad de Trump contra el Gobierno Bolivariano. Sin embargo, saluda que al fin EEUU tome acciones para controlar sus vulnerables y descuidadas fronteras de la droga proveniente del narcotráfico colombiano”.