James Comey, el ex jefe del FBI, fue una de las primeras cabezas en rodar en la administración de Donald Trump. El 9 de mayo del año pasado, el entonces flamante presidente removió al director del Buró desatando un terremoto. Comey conducía una investigación reservada sobre la alegada colusión (cooperación) del comité de campaña del presidente con funcionarios rusos para afectar la elección presidencial. Ahora le llegó la hora de la venganza.
En una reciente entrevista con un medio local, el ex jefe del FBI comparó a Trump con un «jefe mafioso» (mob boss) y aprovechó para publicitar la edición de un libro explosivo.
«Sr. Presidente, el pueblo de Estados Unidos escuchará mi historia muy pronto. Y podrán juzgar por sí mismos quién es honorable y quién no», advirtió Comey en su cuenta de Twitter.
Comey, va de entrevista en entrevista para publicitar su libro A Higher Loyalty (Lealtad Mayor), que se publica el martes próximo. El despido de Comey es visto como una de las decisiones más controvertidas de Trump y llevó a la pregunta de si se trató de una obstrucción de la justicia: un causa para juicio político.