Denuncian que el gobierno de Trump revoca pasaportes a cientos de hispanos con ciudadanía. Pese a ser estadounidenses y tener certificados de nacimiento y documentación que lo prueba, cientos de hispanos han sufrido la revocación de sus pasaportes por parte del Departamento de Estado, de acuerdo con un reportaje del diario The Washington Post.
Abogados y activistas a lo largo de la frontera sur denuncian que incluso las autoridades han comenzado procesos de deportación para varios ciudadanos estadounidenses y a algunos se les negó el regreso luego de visitar México, pues dudan que sus documentos sean verdaderos.
El Departamento de Estado aseguró al diario que sus políticas no han cambiado, y se negaron a ofrecer una cifra oficial de pasaportes revocados por dudas sobre la legitimidad de la ciudadanía de una persona. Sin embargo, defensores de derechos civiles aseguraron al Post que los casos han incrementado hasta cientos en los últimos meses con el gobierno de Trump.
A Juan, uno de los afectados que se negó a que su apellido fuera publicado por el diario, le negaron la renovación de su pasaporte pese a haber nacido en Brownsville, Texas, pasar tres años en las Fuerzas Armadas, servir en la Patrulla Fronteriza y trabajar actualmente como guardia en una prisión.
Para comprobar su nacionalidad, a Juan le pidieron su certificado de bautizo, evidencia de las citas médicas de su madre cuando estaba embarazada, y contratos de renta de sus padres de la época en que él era un bebé. Pese a entregar algunos de esos documentos, el Departamento volvió a rechazar su caso, que aún sigue en litigio.
Los casos de revocaciones están relacionados con actas de nacimiento expedidas por ciertas obstetras o matronas que están en la mira de las autoridades. Algunas de ellas están acusadas de expedir, entre las décadas de los 50 y los 90, documentos fraudulentos para bebés que nacieron en México a cambio de dinero.
Pese a tener pruebas de casos contados de fraude, apunta el medio, ahora las autoridades están congelando las aplicaciones de todas los ciudadanos que nacieron con ayuda de esas obstetras.
Y en muchos de esos casos, los ciudadanos son directamente remitidos a centros de detención para ser deportados, aseguró el abogado Jaime Diez, con lo que comienzan largos juicios.
En los casos, aseguró Diez al diario, los fiscales han llegado al extremo de cuestionar a los ciudadanos si recuerdan el momento de su nacimiento. “Tengo que convencer a mis clientes de que no es una pregunta capciosa”, afirmó al diario.