Un juez federal falló que el ex vicepresidente estadounidense, Mike Pence, deberá declarar ante un jurado investigador en la indagación que realiza el Departamento de Justicia sobre los esfuerzos del expresidente Donald Trump y sus aliados para anular los resultados de las elecciones de 2020.
Así lo informaron dos fuentes al tanto del tema que pidieron no ser identificadas debido a que no estaban autorizadas porque la decisión está bajo secreto.
Añadieron, sin embargo, que Pence no tendrá que responder preguntas sobre su conducta el 6 de enero de 2021, cuando una turba violenta de seguidores de Trump asaltó el Capitolio estadounidense. En ese momento, Pence estaba presidiendo la sesión conjunta del Congreso para certificar los resultados de la votación.
Pence y sus abogados habían apelado la orden judicial por razones constitucionales. Habían argumentado que, debido a que en ese momento fungía como presidente del Senado, no tenía que declarar, bajo la cláusula de la Constitución que exime a miembros del Congreso de declarar sobre actos oficiales legislativos.
La extraordinaria circunstancia de que un ex vicepresidente llegue a declarar en contra de su antiguo jefe en una investigación penal ocurre en momentos en que Pence evalúa la posibilidad de competir contra Trump por la candidatura presidencial republicana.
El equipo legal de Pence está considerando la posibilidad de apelar la decisión judicial.
Pence recibió meses atrás una orden de comparecer ante un jurado en Washington que investiga la injerencia electoral.
Un fiscal especial del Departamento de Justicia, Jack Smith, investiga los intentos de Trump y sus aliados de anular los resultados de la elección presidencial de 2020 para mantenerlo en el poder. Muchos colaboradores de Trump han comparecido ante el jurado investigador y ante otro panel que indaga la presencia de documentos secretos en Mar-a-Lago, el club privado y residencia de Trump en Florida.
Un vocero de la oficina del fiscal se negó a hacer declaraciones.
Pence ha hablado sobre la campaña de presiones de Trump para exhortarlo a rechazar la victoria de Joe Biden en los días que precedieron al 6 de enero. También ha mencionado los hechos en su libro “So Help Me God”. El vicepresidente tiene una función ceremonial al supervisar el recuento de los votos del Colegio Electoral, pero no tiene el poder de alterar los resultados.
Pence ha dicho que Trump puso en peligro a su familia y a todos los que estaban en el Capitolio ese día y ha dicho que la historia lo obligará a “rendir cuentas”.