Te cuidado con lo que dices ya que algo mal fundado puede hacerte caer más pronto que un tropezón. El guerrero tiene que fijarse especialmente en dónde se para ya que si pisa terreno irregular, sus enemigos lo harán caer. De igual modo, investiga si lo que dices está bien fundado o esta basado en un rumor.

Te encuentras a la mitad del camino y tienes que decidir cual camino seguir. Un viajero se encontró ante una disyuntiva similar antes dos caminos que llevaban a lados distintos sin señalamientos para dónde ir. Confuso, se sentó a esperar a alguien que lo orientara, pero como esa persona nunca llegó, el viajero no llegó jamás a su destino.

La vida te presenta oportunidades a cada paso. Un embajador se presentó ante un sultán y el sultán lo invitó a comer. Le presentaron el primer platillo, pero el embajador pensó que el siguiente platillo sería mejor y no quiso arruinar su apetito. Hizo lo mismo con cada platillo y se quedó sin probar bocado.

La simpleza te dará hoy grandes satisfacciones. Piensa en una pequeña casa de campo a la mitad de un bosque. La chimenea tiene fuego cuando hace frío y una olla de sopa de verduras frescas hierve sobre el fuego. Es la imagen de la perfecta felicidad debido a su simpleza. Si haces todo así en tu vida y evitas los excesos, la felicidad será completa y continua.

Orienta tus emociones con el mapa del sentido común. Hay un dicho que dice que el sentido común es el menos común de los sentidos. En realidad, todos tenemos un sentido común, pero vivimos en una sociedad tan llena de información y de la opinión de los demás que la voz de nuestro sentido común se pierde en el escándalo de voces diciendo otras cosas.

Muestra tus sentimientos tal y como son. Un panadero quería impresionar al rey en un banquete y disfrazó sus panes de joyas para que se le hicieran mejores y más apetitosos al rey. Al final del banquete, el rey dijo «no entiendo dos cosas: porqué no hubo pan y quien puso todas estas joyas en la mesa.»

Recuerda hoy que todo es relativo y que las cosas son como se miran. Ante los ojos de un ratón, un gato es un temible depredador al grado de que un ratón no podría entender como un humano puede tener como mascota a un animal tan terrorífico y aterrador. Piensa como se verían tus problemas desde los ojos de otros.

No muestres emociones que no sientes. Un cazador que pasaba todo el tiempo bajo el Sol se quedó con la maña de fruncir el ceño todo el tiempo para proteger sus ojos de la luz. Cuando regresaba a casa, todo el mundo pensaba que le había ido mal en la cacería y nadie quería acercársele.

No dejes que los comentarios te afecten tanto. El rinoceronte era el animal más temido de las planicies. Ni siquiera el león se atrevía a acercársele. Sin embargo el zorro encontró su debilidad e hizo burla a su nariz. El rinoceronte no se atrevió a salir y el zorro se quedó con su comida.

Plantea bien las bases de lo que planeas hacer. En una construcción, el arquitecto se la pasaba concentrándose tanto en los acabados que pondría en el techo, que descuidó el trabajo del carpintero que hacía los andamios. Cuando el arquitecto quiso subir al techo a revisar el acabado, el andamio se rompió y fue a dar al suelo.

Vacía tu mente para poder crear algo nuevo. Las bombillas eléctricas encierran el filamento que da la luz al vacío ya que el aire le interfiere en su función. De este modo, las ideas y preocupaciones te impiden crear las soluciones más brillantes.

Vuélvete en juez de tus propios asuntos y árbitro del juego de tu vida. Dentro de ti hay dos lados en constante pugna: la parte que quiere algo y la que no puede alcanzarlo, la parte que exige y la parte que tiene que cumplir. Esta pugna te quita tanto tiempo que no te deja avanzar y necesitas alguien que ponga orden y tome una decisión.