Tras 11 semanas de juicio, 56 testigos, horas de grabaciones y miles de documentos en el juicio en contra de El Chapo, Joaquín Guzmán Loera, parece que el jurado ha quedado con más preguntas que respuestas. Por ello, durante los últimos tres días han pedido revisar el testimonio de seis testigos clave de la fiscalía.
Pero es tal el volumen de las transcripciones que han solicitado, y que les ha sido concedido por el juez Brian Cogan de la corte de Brooklyn en Nueva York, que tanto el juez como la defensa advierten que el juicio podría prolongarse más allá de esta semana.
¿Qué pide el jurado?
Tan sólo leer en la corte la transcripción completa del testimonio de los hermanos Cifuentes de Colombia, que han sido una parte fundamental del alegato de la fiscalía en contra del capo mexicano, tomaría 4 ó 5 días, según el juez Brian Cogan. Aunque Cogan no accedió a que se volvieran a leer en la corte las declaraciones de los Cifuentes, sí concedió al jurado una copia física de cientos de páginas con la transcripción de todo lo que dijeron.
Alex Cifuentes, el hermano menor, vivió 2 años con El Chapo en el Triángulo Dorado, la región de la Sierra Madre Occidental donde colindan los estados de Chihuahua, Durango y Sinaloa, trabajando como su secretario particular. Jorge dijo que era el proveedor de cocaína de El Chapo en Colombia.
También han recibido la transcripción del Rey Zambada, hermano de Ismael ‘El Mayo’ Zambada, actual líder del cártel de Sinaloa, quien habló sobre un proveedor de droga del cártel que trabajaba para Guzmán. Y la de Juan Aguayo, un agente de la Patrulla Fronteriza que habló de una llamada telefónica en la que se hacía referencia al “hielo”, un precursor de la substancia metanfetamina.
Adicionalmente, las siete mujeres y cinco hombres del jurado solicitaron este miércoles copias de los testimonios de El Vicentillo, miembro del clan Zambada en el cártel de Sinaloa; y de Dámaso López, alias El Licenciado, quien confesó haber ayudado a Guzmán mientras fue director del penal del que se fugó en 2001.
¿Y exactamente a qué se enfrenta?
Las mujeres y hombres del jurado no sólo se enfrentan “a una avalancha de evidencia”, por usar la frase que acuñó la fiscalía, sino que además deben cumplir con exactitud las instrucciones del juez para llenar un complejo formulario de ocho páginas con 53 opciones que deben ser cruzadas: “culpable o inocente”, “Probado o no probado” o, simplemente, “Sí o no”.
Contra Guzmán pesan 10 acusaciones, la principal por dirigir una empresa “continua” de narcotráfico de 1990 a 2014. Tan sólo esta acusación cuenta con 27 violaciones y para que sea declarado culpable el jurado debe coincidir de manera unánime en que incurrió en al menos 3 de estas violaciones.
Este martes, por ejemplo, además de las transcripciones de los testimonios, el jurado solicitó revisar una llamada telefónica de El Chapo que el Gobierno interceptó, donde éste discute la venta de metanfetamina.
Pero establecer la responsabilidad de un delito es más complejo de lo que parece. Para empezar, deben estar seguros de qué delito se comete con una determinada conducta. Por ejemplo, este miércoles, el jurado quiso que el juez explicara si el asesinato de un miembro de un cártel por un miembro de otro cártel “constituye un crimen de tráfico de drogas”. La respuesta fue no.
Estas preguntas sólo destacan la complejidad de los cargos a los que se enfrentan hombres y mujeres que no necesariamente tienen una formación profesional en derecho o una educación superior.
¿Qué pasaría si el jurado lo absuelve?
Aunque las probabilidades de que El Chapo sea absuelto por este jurado son mínimas, la probabilidad de que salga libre es infinitesimal. En el remoto caso de que el actual jurado no lo encontrara culpable de ninguno de los 10 cargos que se le imputan, muchos de los cuales acarrean la cadena perpetua o sentencias de varias décadas, que a sus 61 años implicarían una virtual condena de por vida, el Gobierno simplemente podría volver a iniciar el juicio en otra demarcación: California, Texas, Illinois, Arizona y Florida también le quieren preso.
Además, el tratado de extradición que tiene Estados Unidos con México establece que si El Chapo se encontrara con vida al momento de finalizar todas sus penas en Estados Unidos, aún debería regresar a México para ser juzgado.
Fuente: Telemundo