El presidente respalda la medida pero no cuenta con el respaldo de republicanos. Altos funcionarios de la Casa Blanca le presionan para que recorte impuestos y tome acciones que mejoren la economía antes de las elecciones.
El presidente, Donald Trump, es favorable a aprobar una segunda ronda de cheques de ayuda económica ante la crisis provocada por la pandemia coronavirus, según publica el diario The Washington Post citando a dos ayundantes del mandatario.
Con esta medida, el dirigente espera dar otro impulso a la economía e refozar sus aspiraciones a revalidar la presidencia en las elecciones de noviembre, según cuenta el diario citando a tres fuentes de su Administración.
Sin embargo, es una idea que no ha calado bien entre las principales fuerzas republicanas en el Congreso y entre altos funcionarios de la Casa Blanca. Esta división podría traer consecuencias para el próximo paquete de estímulo económico, previsto para ser discutido en julio.
En marzo, el Congreso aprobó la Ley de Ayuda, Alivio y Seguridad Económica del Coronavirus (CARES, en sus siglas en inglés), que recogía el envió de cheques de hasta 1,200 dólares para cada ciudadano que ganara menos de 75,000 anuales. En junio, el Servicio de Impuestos Internos (IRS, en inglés) ya había enviado pagos a más de 159 millones de hogares.
A mediados de mayo, el Senado, bajo control republicano, dio la espalda al nuevo plan de estímulo presentado por los demócratas en la Cámara de Representantes denominado «el Acta de los Heroes”. Este planteaba una inversión de tres billones de dólares -superando al de marzo- con una segunda ronda de de ayudas para que las que esta vez sí que calificaban inmigrantes indocumentados. Hasta la fecha, los republicanos del Senado siguen sin apoyar una segunda ronda de cheques, según publica Forbes.
El lunes, el presidente fue entrevistado por la televisión local Scripps y se le preguntó sobre este tema. Sin embargo, no quedó del todo clara su respuesta, ya que Trump divagó sobre el próximo paquete de estímulo económico sin especificar nada sobre pagos.
«Tengo muchos televidentes en Florida, Ohio, Wisconsin, Michigan, que todavía están peleando por su economía. Ya enviaron la primera ronda de cheques. ¿Les va a hacer llegar una segunda ronda?», pregunta el entrevistador.
Trump contesta: «Sí, lo haremos. Lo haremos».
Sin embargo, el presidente sigue hablando y se centra en el paquete de estímulo, que califica de «muy bueno y muy generoso» -sin especificar la cuantía-, y en ningún momento se compromete ni habla de los cheques, anunciando únicamente que la medida será bipartidista y que llegará pronto.
Mientras tanto, entre bastidores, sus asesores económicos le presionan para que desoiga cualquier idea de gasto adicional y se centre recortar impuestas y en lanzar medidas desreguladoras que supuestamente ayudarían a recuperar más rápido el empleo y a las ventas minoristas, según publica NBC News.
Un funcionario de la Casa Blanca declaró a esta cadena que una nueva ronda de pagos directos es «parte de algo que el equipo económico está estudiando» y dejó claro que «aún no se han tomado decisiones».
Judd Deere, portavoz de la Casa Blanca, afirmó en un correo a NBC news que el próximo paquete «debe priorizar medidas económicas favorables al crecimiento y que incentiven a los empleadores y la la gran fuerza laboral estadounidense a regresar al mercado».
A principios de este mes, Trump declaró que está a favor de una reducción de impuestos sobre la nómina y que aprobará medidas para la industria hostelera y de entretenimiento en forma de «incentivos o deducciones».