Aprobación de Biden Arriba del 50%

Se trata de la tercera calificación más baja para un presidente en el cargo desde Harry Truman a esta altura del gobierno. Desde entonces, solo Gerald Ford y Donald Trump obtuvieron un porcentaje de aprobación menor

Un 53% de los estadounidenses cree que el presidente Joe Biden está haciendo bien su trabajo, especialmente en lo que se refiere a la lucha contra la covid-19, pero su punto débil es la seguridad fronteriza y la inmigración, según una encuesta publicada este domingo.

Un 59% de los encuestados para la cadena NBC desaprueba las actuaciones en la frontera con México y el manejo de la inmigración por parte de la Administración Biden, que asumió el 20 de enero pasado y cumplirá 100 días en el poder el 29 de abril.

Solo el 33% aprueba la gestión de Biden en ese sensible terreno en el que el anterior presidente, Donald Trump, dejó su impronta con una política de mano dura no solo con los inmigrantes que cruzaron a EEUU sin documentos sino con los solicitantes de asilo.

Sin embargo, comparado con Trump, Biden tiene una aprobación mayor en sus primeros cien días de Gobierno -53% frente a 40%- y una desaprobación menor -39% frente a 54%-.

Tanto Barack Obama, demócrata como Biden, como George W. Bush, republicano como Trump, los aventajan a ambos, con 61% y 57% de aprobación, respectivamente, en sus primeros cien días.

Según recordó ABC News, se trata de la tercera calificación más baja para un presidente en el cargo desde Harry Truman. Desde entonces, solo Gerald Ford –con un 48 por ciento en 1978– y Donald Trump –con un 47 por ciento en 2017–, obtuvieron un porcentaje de aprobación menor.

El encuestador demócrata Jeff Horwitt, de Hart Research Associates, dijo que los resultados de la encuesta no permiten determinar si son “parte de una luna de miel de 100 días o algo más duradero para la administración Biden-Harris”.

“Lo que sí sabemos es que la presidencia de Joe Biden está cumpliendo con los tiempos”, agregó.

Horwitt realizó esta encuesta con el encuestador republicano Bill McInturff, de Public Opinion Strategies.

La mayor valoración para Biden es por su gestión de la pandemia (69% de aprobación), seguida de la economía (52%) y los esfuerzos por unir al país (52%).

Menos del 50% de aprobación recibieron en la encuesta las relaciones raciales (49%), los impuestos y el gasto /44%), China (35%) y el problema de las armas (34%), además del tema fronterizo y migratorio (33%).

“En los primeros 100 días cambiamos presidentes, pero no cambiamos el país”, dijo el encuestador McInturff para apoyar la tesis de que la encuesta no sugiere cambios profundos en la actitud sobre la dirección de la nación y su política.

De hecho, un 56% dijo que el país va en la dirección equivocada frente a un 36% que defiende que el rumbo es el correcto.

El tema en el que hay mayor unanimidad es la división del país. Un 82% cree que está dividido frente a solo un 16% que considera que está unido.

Para uno de cada cuatro estadounidenses (25%) unir al país es el tema más importante en este momento, solo superado por el 30% de encuestados que mencionó la covid-19.

La seguridad fronteriza y la inmigración figuran en quinto lugar con un 22%, por detrás de las relaciones raciales y la economía, aunque en el caso de los republicanos es el “número uno” con un 47% de menciones.

Biden tiene una imagen positiva del 50% entre los encuestados frente a un 32% de Trump, mientras que las imágenes negativas son de un 36% y un 55%, respectivamente.

La encuesta fue realizada de 17 al 20 de abril a unos 1,000 adultos y tiene un margen de error de más/menos 3.1 puntos porcentuales.

Aprueban Nuevo Cheque de Ayuda por $1,400 USD

El presidente estadounidense Joe Biden elogió el sábado la aprobación de la Cámara de Representantes de un paquete de 1,9 billones de dólares que aliviaría los efectos de la pandemia de COVID-19, el primer paso hacia ofrecer otra dosis de ayuda a una agotada nación al tiempo que la medida ahora para a un tenso Senado.

“No hay tiempo que perder”, dijo Biden en breves declaraciones desde la Casa Blanca. “Si actuamos ya —de manera decisiva, rápida y audaz— podemos finalmente dejar atrás este virus. Podemos finalmente poner otra vez en marcha nuestra economía. El pueblo de este país ha sufrido demasiado y por demasiado tiempo”.

El proyecto del presidente para inyectar fondos a la economía en aprietos de individuos, negocios, escuelas, estados y ciudades azotados por el COVID-19 fue aprobado 219-212 en una votación casi apegada a las líneas partidistas. Con ello el proyecto de ley pasa al Senado, donde los demócratas aparentemente están empeñados en resucitar la cláusula de aumento del salario mínimo y donde podría haber enfrentamientos por la ayuda estatal y otros asuntos.

Los demócratas dijeron que el desempleo masivo y el medio millón de vidas perdidas en Estados Unidos son causas para actuar pese a que de antemano se han invertido casi cuatro billones de dólares en la lucha contra la enfermedad. Según ellos, los legisladores republicanos están fuera de sintonía con un público que, de acuerdo con las encuestas, está a favor del paquete económico.

“Me siento feliz esta noche”, dijo la representante demócrata de California, Maxine Waters. “Esto es lo que Estados Unidos necesita. Republicanos, ustedes deben ser parte de esto. Pero si no es así, vamos sin ustedes”.

Los republicanos señalaron que la iniciativa era demasiado costosa y que se gastaría muy poco dinero en educación para reabrir las escuelas de inmediato. Afirmaron que el texto está lleno de regalos para el electorado demócrata, como los sindicatos, y destina recursos a estados gobernados por demócratas que, según los republicanos, no los necesitarían porque sus presupuestos se habrían recuperado ya.

“A mis colegas que dicen que este proyecto de ley es audaz, yo les digo que es desmesurado”, afirmó el líder de la minoría en la Cámara de Representantes, el republicano Kevin McCarthy de California. “A los que dicen que es urgente, les digo que no está centrado. A los que dicen que es popular, les digo que es totalmente partidista”.

La propuesta de ley de ayuda económica en total proporcionaría pagos de 1.400 dólares a individuos, extendería los beneficios de emergencia por desempleo hasta agosto e incrementaría la desgravación para subsidios infantiles y federales de los seguros médicos.

También ofrecería miles de millones de dólares a escuelas y colegios, a gobiernos estatales y municipales, a vacunas contra el COVID-19 y pruebas de coronavirus, a arrendatarios, productores de alimentos e industrias en aprietos como las aerolíneas, restaurantes, bares y centros de eventos.

Los congresistas demócratas moderados Jared Golden, de Maine, y Kurt Schrader, de Oregon, fueron los dos únicos que no votaron siguiendo la tendencia de su partido. Esa marcada división partidista está convirtiendo la disputa en un enfrentamiento sobre a quién recompensarán los votantes por acumular más gasto federal para combatir el coronavirus y reactivar la economía, además de los cuatro billones de dólares aprobados el año pasado.

La disputa también se perfila como una prueba inicial de la capacidad de Biden de mantener la cohesión entre las frágiles mayorías legislativas de su partido: apenas 10 votos en la cámara baja y un Senado dividido en escaños iguales 50-50.

Al mismo tiempo, los demócratas trataban de resolver cómo calmar a los progresistas que perdieron su máxima prioridad en un sorprendente revés en el Senado el jueves.

La representante independiente de esa cámara, Elizabeth MacDonough, dijo que las normas del Senado obligan a que el aumento del salario mínimo federal se desvincule de la iniciativa sobre el COVID-19, lo que deja la propuesta en soporte vital. La medida elevaría gradualmente el mínimo a 15 dólares la hora en 2025, el doble de los 7,25 dólares en vigor desde 2009.