Aprueban Reglas de Juicio Político en Contra de Trump

La medida es en gran parte simbólica, pero representa la primera acción legislativa de los demócratas para sus pesquisas sobre la supuesta «mala conducta» del mandatario al frente de la Casa Blanca y permitirá realizar audiencias e interrogatorios con mayor autoridad

Los sectores de la oposición que buscan abrir un juicio político contra el presidente Donald Trump tomaron un nuevo impulso este jueves, ante la ampliación de poderes para el Comité Judicial de la Cámara de Representantes, que fijó los parámetros concretos para la investigación.

«Algunos llaman a este proceso una consulta de juicio político. Algunos lo llaman una investigación de juicio político. No hay diferencia legal entre estos términos, y no me importa discutir sobre la nomenclatura», apuntó el presidente del Comité Judicial, el demócrata Jerry Nadler.

El proceso de juicio político («impeachment») en el Congreso tiene como objetivo la destitución del presidente del país, en caso de que se considere que no está capacitado para gobernar.

Algunos críticos con Trump han defendido que el mandatario se merece enfrentar al proceso de destitución por haber obstruido a la Justicia durante la investigación del fiscal especial Robert Mueller sobre los lazos de su campaña y Rusia.

En la votación, los 24 demócratas del comité votaron a favor de la iniciativa, mientras que los 17 republicanos que forman parte de la misma comisión lo hicieron en contra.

La resolución, que Nadler calificó como un «próximo paso necesario» en su investigación, permite a Trump y sus abogados responder formalmente a las pruebas y testimonios presentados en las audiencias del comité.

Además, la medida da luz verde a una regla de la Cámara que permite a sus miembros interrogar a los testigos durante una hora al final de cada audiencia que se considera parte de la investigación de juicio político.

Los republicanos criticaron la resolución y la catalogaron de «un gesto sin sentido» que simplemente señala los procedimientos ya disponibles en la Cámara y las reglas del comité.

Preguntada al respecto, la presidenta de la Cámara Baja, la demócrata Nancy Pelosi, aseguró que los liberales «perseguirán los hechos» antes de anunciar un juicio político contra Trump.

«El juicio político es una medida muy divisiva, pero si tenemos que ir allí, tendremos que ir allí. Pero no podemos ir allí a menos que tengamos los hechos. Perseguiremos los hechos», defendió Pelosi.

Continua Detalle de la Relación Entre Colombianos y el Chapo Guzmán

+ ‘Chupeta’, testigo del gobierno de Estados Unidos en el juicio a Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán detalló este martes la relación que tenía el capo mexicano con los

El narcotraficante colombiano Juan Carlos Ramírez Abadía, alias «Chupeta», testigo del gobierno de Estados Unidos en el juicio a Joaquín «El Chapo» Guzmán, detalló hoy los nexos entre el cartel de Sinaloa, liderado por el capo mexicano, y el del Norte del Valle, del que él formó parte.

En el segundo día de su testimonio, Ramírez, apodado también «el hombre de las mil caras», contó cómo conoció al narcotraficante mexicano en 1990, cuando comenzó a venderle cocaína por la rapidez con la que el Chapo transportaba la droga desde México a Estados Unidos.

Ramírez, extraditado en 2008 a Estados Unidos desde Brasil y que está pendiente de conocer su sentencia, explicó que antes de conocer al líder del cartel de Sinaola, ya trataba con otros miembros de esta organización, entre ellos los hermanos Arellano Félix y a Ismael «el Mayo» Zambada y a su hermano Jesús «el Rey» Zambada, que ya testificó en este juicio.

En su testimonio contó cómo, tras tener problemas para el envío de cocaína «de óptima calidad», propuso a ‘El Chapo’ en 1993 un cambio de ruta a través del Pacífico en barcos camaroneros.

Les dije que tenía tanta confianza en ese método que enviaría 10 mil kilos (en el primer cargamento), que saldría de Buenaventura, en el Valle del Cauca (Colombia)» indicó.

Preguntado por la Fiscalía, indicó que los miembros del cártel le dijeron que llevarían la carga al estado mexicano de Guerrero porque allí el Chapo tenía supuestamente contactos con la Policía, antes de transportarla a Sinaloa (norte) y de allí a la frontera de Estados Unidos.

Según el testigo, Guzmán aumentó su porcentaje de ganancia del 40 al 45 por ciento alegando el supuesto pago de sobornos a Guillermo González Calderoni, quien en ese entonces tenía a su cargo la oficina en Guadalajara de la dirección general de Seguridad de la Procuraduría General.

El expiloto de ‘El Chapo’, Miguel Ángel Martínez Martínez, apuntó durante el proceso a Calderoni como destinatario de supuestos pagos para que les permitiera el tráfico de drogas.

Alias «Chupeta» aseguró que el Chapo le dijo que «tendría que hacer arreglos con la Marina, lo que aumentaría los costos», un aumento que al narcotraficante colombiano entonces no le preocupó porque «ellos ponían el precio a su trabajo», aunque como «empresario» confiesa que trató de negociar a la baja.

Ramírez declaró que en una sola noche llegó a enviar entre 12 y 14 aviones a México y que entre 1990 y 1993 envió «muchísimas» aeronaves con cocaína desde Colombia.

Contó que uno de sus barcos resultó hundido por culpa de un capitán que lo manejaba bajo los efectos de la cocaína y «veía fantasmas y que lo perseguía la Guardia Costera.

Tras optar por el empleo de barcos en 1993 y hasta 1998, el cártel del Norte del Valle envió más de 20 embarcaciones con un cargamento de unos 10 mil kilogramos de cocaína cada uno, según su versión.

A partir de 1998, el cartel de Sinaloa alcanzó un acuerdo con Ramírez de crear una sociedad al 50 por ciento para el comercio de la droga, y entre 2002 y 2005 se empezaron a usar lanchas rápidas y submarinos construidos en Colombia, así como aviones pequeños y barcos pesqueros.