¿A Qué Hora Conoceremos al Ganador?

Llegó el día de las elecciones generales 2024 en Estados Unidos, en las que se elegirán, entre otros cargos, a las personas que ocuparán la presidencia y vicepresidencia del país en los próximos cuatro años.

Donald Trump (republicano) y Kamala Harris (demócrata), los principales candidatos presidenciales en este ciclo electoral, se encuentran en una contienda muy reñida.

¿Por qué es importante que el enfrentamiento entre Harris y Trump esté tan cerrado? Porque eso afecta directamente a la publicación de los resultados finales de las elecciones.

¿A qué hora se conocerán los resultados de las elecciones de EE.UU.?

Primero, la Comisión Federal Electoral (FEC, por sus siglas en inglés) de EE.UU. señala que las oficinas electorales de los estados son las responsables de certificar los resultados.

“Por favor visita el sitio web de la oficina electoral de tu estado para obtener información sobre los resultados electorales”, dice la FEC.

Por ejemplo, en Carolina del Norte —uno de los estados clave que no tienen un líder claro en la carrera presidencial—, los centros de votación cierran a las 7:30 p.m. hora local, por lo que en adelante se comienzan a reportar los resultados de los votos ausentes por correo, los votos anticipados y los votos en persona el día de las elecciones. Entre 8 y 9:30 p.m., los datos se actualizarán en el panel de resultados cada 5 o 10 minutos.

Mira aquí en vivo los resultados de las elecciones presidenciales

Un ejemplo más: en Georgia, otro estado clave en disputa, las urnas cierran a las 7 p.m. hora local y la mayoría de las boletas se contarán hacia el final del día de las elecciones.

En total, son siete estados clave en disputa. Aquí te dejamos las horas en las que cierran las urnas y detalles sobre el conteo de votos:

Carolina del Norte: 7:30 p.m. ET. Se espera que casi todos los votos del estado se reporten la noche de las elecciones, pero las boletas provisionales –que podrían representar una mayor proporción del total debido a las nuevas leyes de identificación de votantes y los efectos del huracán Helene– se contarán después.
Georgia: 7 p.m. ET. Se espera que casi todos los votos del estado se reporten la noche de las elecciones.
Pensilvania: 8 p.m. ET .Es probable que los condados grandes reporten grandes cantidades de votos enviados por correo poco después del cierre de las urnas. Podría tardar varios días en reportarse todas las boletas enviadas por correo, ya que los funcionarios electorales no pueden comenzar a procesarlas hasta el propio día de las elecciones.
Michigan: entre las 8 y 9 p.m. ET. Si bien el estado suele reportar casi todos sus votos para el mediodía del miércoles, algunos de los condados más grandes del estado, notablemente el condado de Wayne (donde se encuentra Detroit), a menudo terminan de informar el miércoles temprano.
Arizona: 9 p.m. ET. No se reportan votos hasta una hora después del cierre de las urnas. Los primeros resultados suelen ser los votos anticipados y las boletas enviadas por correo que llegaron antes. El informe de las boletas enviadas por correo que llegaron más tarde y de las depositadas el día de las elecciones podría continuar durante varios días.
Wisconsin: 9 p.m. ET. Si bien el estado suele informar casi todos sus resultados la noche de las elecciones, es probable que algunas grandes ciudades informen de sus boletas enviadas por correo y los votos anticipados el miércoles temprano.
Nevada: 10 p.m. ET. No se reportan votos hasta que todas las mesas electorales del estado hayan cerrado, por lo que puede haber una espera para los primeros resultados. El estado seguirá contando durante varios días, y Nevada acepta boletas con sello postal del día de las elecciones si llegan antes del 9 de noviembre.
Los resultados finales, en tanto, dependen del conteo en cada uno de los estados. ¿A qué hora podrían llegar?

Podría tardar un poco, dependiendo del número de votos por correo emitidos en algunos estados y de lo reñidas que estén las cosas.

CNN no pronosticó que el presidente de EE.UU., Joe Biden, ganaría las elecciones de 2020 hasta cuatro días después de la jornada electoral. Si la elección 2024 está reñida en uno o más estados decisivos, podría tardar aún más.

En 2000, por ejemplo, los disputados resultados en Florida se prolongaron durante 36 días hasta que la Corte Suprema puso fin a un recuento.

En 2016, en cambio, las cosas estuvieron relativamente reñidas en algunos estados clave y Hillary Clinton reconoció su derrota al día siguiente de la jornada electoral. Es poco probable que Trump haga esto alguna vez. La vicepresidenta Harris ha hablado de la importancia de un traspaso pacífico del poder.

Podemos esperar que, si Trump pierde, impugne los resultados, ya que alegó fraude en las elecciones presidenciales del 2020 y, durante la campaña de este 2024, reiteró innumerables ocasiones que le “robaron los comicios” del 2020.

Las normas sobre cómo y cuándo se activa o puede solicitarse un recuento varían de un estado a otro. Este año, según una nueva ley, los estados tienen hasta el 11 de diciembre para determinar un ganador con el fin de garantizar el recuento de sus votos electorales.

Kamala Harris Enfrenta Hostil Entrevista de Fox News

La vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, concedió el miércoles una combativa entrevista a Fox News, en la que discutió con el presentador Bret Baier sobre cuestiones migratorias y políticas, y aseguró que, en caso de ganar las elecciones, no representará una continuación de la presidencia de Joe Biden.

La entrevista significó la primera interacción de Harris con la televisora, la cual goza de una gran popularidad entre los conservadores, como parte de los intentos de la vicepresidenta por incrementar su alcance entre los votantes de tendencia republicana cuando faltan menos de tres semanas para la jornada electoral. La sesión de casi 30 minutos con Baier se volvió acalorada y en varias ocasiones se interrumpieron el uno al otro.

Cuando Baier siguió hablando mientras Harris trataba de responder a sus cuestionamientos en materia migratoria, Harris le dijo: “¿Puedo terminar, por favor? Me tienes que dejar terminar, por favor”.

Harris trató en varias ocasiones de llevar la conversación hacia un punto en el que pudiera atacar a Donald Trump. Pero también tuvo mucho que decir sobre sí misma.

Una semana después de declarar que no se le ocurría nada que haría de forma diferente a Biden, Harris aclaró: “Mi presidencia no será una continuación de la presidencia de Joe Biden”.

La vicepresidenta no entró en detalles, pero puntualizó: “Como cualquier nuevo presidente que asume el cargo, traeré mi experiencia de vida y mi experiencia profesional e ideas nuevas y frescas”.

Cuando se le pidió ser más específica sobre su comentario de que quiere “dar vuelta a la página”, a pesar de que actualmente hay un demócrata en la Casa Blanca, la vicepresidenta aseguró que su campaña se basa en “dar vuelta a la página de la última década, en la que hemos tenido que cargar con el peso de la retórica de Donald Trump”.

En cuestiones de inmigración, Harris lamentó los casos de mujeres asesinadas por personas que fueron detenidas después de cruzar la frontera ilegalmente durante la presidencia de Biden y posteriormente puestas en libertad, pero también criticó a Trump por su papel en bloquear un proyecto de ley bipartidista en materia migratoria este año, el cual habría impulsado el financiamiento de seguridad fronteriza.

“Lamento mucho su pérdida, en verdad”, dijo Harris después de que Baier le mostró un video en el que aparece la madre de una de estas mujeres, Jocelyn Nungaray, en el que culpa a Biden y a Harris por la muerte de su hija.

Harris indicó que ya no está de acuerdo con despenalizar los cruces fronterizos ilegales, postura que tenía en 2019.

“Eso fue hace cinco años y he sido muy clara al decir que me apegaré a las leyes”, subrayó. Respondió de la misma forma a preguntas sobre las propuestas para permitir que las personas que están sin autorización en el país obtengan su licencia de conducir y subsidios en atención médica.

En cuanto a Trump, dijo que “la gente está cansada de alguien que asegura ser un líder y dedica todo su tiempo a insultar y enfrascarse en disputas personales”. Y añadió. “No es (una persona) estable”.

También trató de sacar el tema de las declaraciones de Trump sobre un “enemigo interno” y sus amenazas de castigar a sus adversarios políticos.

Baier cuestionó las afirmaciones de Harris sobre el estado mental de Biden después del desastroso desempeño del presidente durante un debate con Trump en junio pasado que eventualmente obligó al demócrata a abandonar la contienda y facilitar el ascenso de Harris a la candidatura presidencial. La vicepresidenta defendió nuevamente a Biden, pero agregó: “Joe Biden no está en la boleta electoral, Donald Trump sí”.

La portavoz de la campaña de Trump, Karoline Leavitt, dijo que Harris se mostró “enojada, a la defensiva y nuevamente abdicó toda responsabilidad por los problemas que enfrentan los estadounidenses”. Añadió que si “Kamala no puede lidiar con la presión de una entrevista con Fox News, ciertamente no puede lidiar con la presión de ser la presidenta de Estados Unidos”.

En clara oposición a las preguntas de Baier, Harris declaró en cierto punto que “me gustaría que pudiéramos tener una conversación basada en una evaluación completa de los hechos”.

El vocero de la campaña de Harris, Brian Fallon, dijo que su equipo sintió que con esta entrevista “logró el objetivo que se había trazado”.

“Pudo llegar a una audiencia que probablemente no había sido expuesta a los argumentos que ha estado haciendo durante la campaña, y también pudo mostrar su tenacidad al hacerle frente a un entrevistador hostil”, comentó.

En una referencia a la antigua adversaria de Trump, la republicana Nikki Haley, Fallon añadió “que hay un buen número de independientes y republicanos como Haley que están abiertos a votar por la vicepresidenta Harris, y es por eso que estamos abiertos a hacer eventos con republicanos y en Fox News”.

¿Cómo van las Elecciones?

A un mes de las elecciones en EU: ¿Cómo van las encuestas entre Donald Trump y Kamala Harris?La jornada electoral se llevará a cabo el próximo 5 de noviembre, en donde la vicepresidenta Kamala Harris y el expresidente Donald Trump buscarán estar al frente de la Casa Blanca.

Estados Unidos está a un mes de celebrar sus elecciones presidenciales 2024. El expresidente republicano Donald Trump se enfrentará a la vicepresidenta Kamala Harris para buscar un segundo mandato al frente de la Casa Blanca.

La jornada electoral se llevará a cabo el próximo martes 5 de noviembre. Kamala Harris, quien es ahora la candidata por el Partido Demócrata, tendrá que superar al multimillonario, después de que el presidente Joe Biden se bajó de la campaña presidencial.

Pese a que la candidata demócrata cuenta con la misma ventaja en la media general de las última encuesta publicada por ABC News, consultadas al corte del miércoles 2 de octubre, el promedio de encuestas es reñido y separa a los candidatos por menos de tres puntos porcentuales, pero ¿cómo van las encuestas entre Donald Trump y Kamala Harris?

Harris vs. Trump: ¿quién lidera las encuestas nacionales en Estados Unidos?

Pese a que Donald Trump encabezaba las encuestas por cinco puntos sobre el presidente Joe Biden en los primeros meses de las elecciones 2024 en EU, según la cadena de televisión CBS, la nominación de Kamala Harris como candidata presidencial revirtió la tendencia.

Así lo indica el promedio de encuestas que publica el sitio FiveThirtyEight. De acuerdo con los datos más recientes, Kamala Harris tiene un promedio de 48.5 por ciento en las encuestas nacionales realizadas, mientras que el candidato republicano Donald Trump reúne 45.8 por ciento.

Aunque las encuestas son una guía para saber la popularidad de los aspirantes a la Casa Blanca, no implican una victoria para uno de los candidatos presidenciales debido a que Estados Unidos utiliza un sistema de colegio electoral para elegir a su presidente, esto pese a que el candidato haya ganado la mayor cantidad de votos.

El reporte de Morning Consult, realizado del 27 al 29 de septiembre, también reveló una ventaja de Harris del cinco por ciento. La exfiscal general de California obtuvo 51 por ciento de aprobación, mientras que el republicano tuvo el 46 por ciento.

YouGov realizó un sondeo entre el 21 y 24 de septiembre. Los resultados colocan a Kamala Harris con una ventaja de tres puntos, ya que tiene 49 por ciento, a diferencia del 46 por ciento que respalda al candidato del Partido Republicano.

Los promedios de FiveThirtyEight se ajustan con base en los datos de encuestas nacionales y estatales, incluidos sondeos de The New York Post, Morning Consult, The Economist (YouGov) e Ipsos/Reuters por mencionar algunos.

¿Los votantes quieren republicanos o demócratas en el Congreso?

En los meses previos a la jornada electoral de EU, una diferencia del 2.3 por ciento de los votantes dijeron querer a los demócratas en el Congreso de los Estados Unidos (47.0 por ciento), en tanto, un 44.7 por ciento de la gente prefirió a los republicanos.

Del 21 al 24 de septiembre, YouGov detalló que el 47 por ciento prefiere a los demócratas en el Congreso, mientras que un 45 por ciento quiere a los republicanos.

La Sociedad de Encuestadores Presidenciales de la Universidad George Washington registró un empate del 50 por ciento del 14 al 16 de septiembre, en donde los votantes de ambos partidos quieren que tanto republicanos como demócratas estén en el Congreso.

Según la BBC, algunas personas apoyan un gobierno dividido porque significa que cada partido político puede vigilar al otro.

¿Qué opinión tienen los estadounidenses sobre Kamala Harris?

Ante la pregunta sobre qué opinión tienen los estadounidenses sobre la demócrata, Kamala Harris, 47.4 por ciento dice tener una opinión favorable de la aspirante presidencial, mientras que el 46.2 por ciento, tiene una opinión desfavorable.

La encuesta del Morning Consult, realizada entre el 27 y 29 septiembre, señala que Harris tuvo una opinión favorable del 52 por ciento; no obstante, un 46 por ciento de los encuestados dice tener una opinión desfavorable.

YouGov registró que un 49 por ciento de los consultados calificó positivamente a la también exprimera senadora indoestadounidense de Estados Unidos. El 51 tiene una opinión desfavorable, dicha encuesta fue realizada del 21 al 24 de septiembre.

Ipsos/Reuters registro un empate del 47 por ciento, sobre la opinión favorable y desfavorable de la demócrata, del 20 al 22 de septiembre.

La entrada de Harris en la contienda presidencial ha desencadenado una oleada de organización entre los hombres negros así como latinos quienes han respaldado su candidatura presidencial superando a Trump en la intención de voto de ambos grupos.

¿Qué opinión tienen los estadounidenses sobre Trump?

Según una encuesta de FiveThirtyEight, el 52.5 de los estadounidenses tiene una opinión desfavorable sobre Donald Trump, y el 42.9 por ciento tiene una opinión favorable.

Esto se debe a la falta del voto de afroamericanos y latinos, quienes lo rechazaron durante las elecciones presidenciales de 2020, aunque Trump ha prometido aplicar nuevos esfuerzo para expandir su coalición y ganar la confianza de los votantes la opinión sobre él sigue siendo más negativa que positiva.

De acuerdo con un análisis de dos encuestas realizadas durante septiembre, alrededor del 8 por ciento tienen una opinión desfavorable de Trump.

La encuesta de YouGov indica que un 46 por ciento de los votantes encuentra favorable al republicano y un 54 por ciento lo encuentra desfavorable.

Monrning Consult dice que un 44 por ciento de los votantes encuentra favorable al empresario, mientras que 54 por ciento también lo ve desfavorable.

¿Respaldo de estrellas de Hollywood a candidatos de EU influye en los votantes?

Pese a que recientemente cantantes como Taylor Swift y Billie Eilish dieron su respaldo a la vicepresidenta demócrata, minutos después del debate presidencial. Solo 6 por ciento de los encuestados dicen que el apoyo de la estrella del pop a Harris los hace más propensos a votar por ella.

Mientras que el 13 por ciento, en cambio, dice que los hace menos propensos a apoyarla y el 81 por ciento dice que no hace ninguna diferencia, según la encuesta de ABC News/Ipsos.

Sin embargo, puesto que en Estados Unidos la elección no se hace de un modo directo sino a través de 538 electores, que se dividen proporcionalmente entre los 50 estados del país (más el Distrito de Columbia), la clave de estos comicios está en los estados bisagra como Pensilvania, Georgia o Wisconsin, donde la diferencia es mínima.

Harris o Trump: ¿Quién tiene ventaja en los estados bisagra?

Las entidades que desempeñan un papel importante en el resultado de los próximos comicios son: Arizona, Georgia, Michigan, Nevada, Carolina del Norte, Pensilvania y Wisconsin, las cuales se consideran clave para el resultado de las elecciones presidenciales.

¿Cuántos puntos lleva Kamala vs. Trump en Pensilvania?

Las encuestas recientes muestran que los dos candidatos están separados por solo un punto porcentual o menos en varios estados en bisagra, entre los que destaca Pensilvania. En esa entidad, Harris tiene un 48.0 por ciento y Trump un 47.3 por ciento.

El reporte de Morning Consult señala que Harris lleva una ventaja de cuatro puntos porcentuales. La demócrata recibió un 51 por ciento de la preferencia, frente a Trump, quien tiene un 46 por ciento.

¿Qué candidato lleva ventaja en Arizona?

Actualmente, según la media de encuestas de FiveThirtyEight, en Arizona hay una diferencia de 1.3 puntos porcentuales, en favor del republicano que tiene 48.1 por ciento, mientras que la vicepresidenta obtuvo un 46.8 por ciento.

La investigación de Morning Consult, realizada también del 19 al 25 de septiembre, colocó a Harris con el 50 por ciento, mientras que Trump se quedó con el 47 por ciento de preferencia.

¿Cuál es el candidato favorito en Georgia?

Los votantes de Georgia también dieron la delantera al exmandatario por 1.2 puntos porcentuales. Trump tuvo un 48.3 por ciento, y Harris un 47.1 por ciento.

No obstante, el reporte de Morning Consult reportó un empate del 49 por ciento para ambos candidatos.

¿Quién lleva ventaja en Michigan?

En Michigan, muestra a la candidata del Partido Demócrata tiene una preferencia del 48.1 por ciento, mientras que el exmandatario tuvo un 46.3 por ciento.

El reporte de Bloomberg en colaboración con Morning Consult da una delantera de tres puntos, dejando a Harris con el 50 por ciento y a Trump con un 47 por ciento.

¿Kamala o Trump? Quién lleva ventaja en Nevada

La encuesta en Nevada también da preferencia a la vicepresidenta de Estados Unidos. Harris tiene el 47.8 por ciento, frente al 46.8 por ciento de Trump.

Otro reciente sondeo muestra a la vicepresidenta demócrata con un 52 por ciento, frente al 45 por ciento del empresario.

¿Cuántos puntos tiene Donald Trump en Carolina del Norte?

Los votantes de Carolina del Norte están separados por menos de un punto. Donald Trump supera a Kamala Harris con una preferencia de 48 por ciento, mientras que la demócrata solo tiene el 47.5 por ciento.

Por el contrario, un sondeo de Morning Consult indica que la vicepresidenta tiene una ventaja sobre el demócrata de dos putos, (50 por ciento de Harris y 48 por ciento de Trump).

¿Cuántos puntos le lleva Harris a Trump en Wisconsin?
En Wisconsin, Harris tiene el 48.5 por ciento del apoyo frente al 46.7 por ciento de Trump. Mientras que el sondeo de Morning Consult le da a Harris la delantera con un 51 por ciento de apoyo y a Trump lo deja con un 48 por ciento.

¿Cómo van los Candidatos a Presidente? Depende a Quién le Preguntes

Durante la última semana, los estadounidenses tuvieron más probabilidades de escuchar noticias sobre el expresidente Donald Trump que sobre la vicepresidenta Kamala Harris, según The Breakthrough, un proyecto de encuestas de CNN que rastrea lo que los estadounidenses promedio realmente escuchan, leen y ven sobre los candidatos presidenciales a lo largo de la campaña.

Pero después de una serie de noticias de alto perfil que atrajeron la atención de todo el espectro político, incluido el debate presidencial y el primer intento de magnicidio contra Trump, los datos de esta semana muestran una divergencia significativa entre lo que los demócratas y los republicanos recordaron haber escuchado sobre el candidato republicano. Los republicanos se centraron más en el intento de magnicidio contra el expresidente en Florida a principios de este mes, mientras que los demócratas siguieron diciendo que estaban escuchando más sobre sus afirmaciones infundadas sobre los inmigrantes haitianos en Springfield, Ohio.

En la encuesta más reciente, realizada del 20 al 23 de septiembre por SSRS y Verasight en nombre de un equipo de investigación de CNN, la Universidad de Georgetown y la Universidad de Michigan, tres cuartas partes de los estadounidenses dijeron que habían leído al menos algunas noticias sobre Trump, superando ligeramente al 69% que dijo lo mismo sobre Harris. Se trata de un cambio con respecto a finales de agosto y principios de septiembre, cuando porcentajes aproximadamente iguales recordaban haber escuchado noticias sobre cada uno de los candidatos.

Los republicanos fueron mucho más propensos que los demócratas a mencionar la palabra “asesinato” y otras frases relacionadas con el intento de magnicidio de Trump, como referencias al campo de golf donde tuvo lugar el intento.

“Donald Trump ha estado en campaña y la situación se está volviendo peligrosa para él. Recientemente sufrió un segundo intento de asesinato en un campo de golf”, escribió un encuestado.

Los demócratas se mostraron más proclives a centrarse en el debate presidencial de septiembre, mencionando palabras como “mentira” y referencias a las afirmaciones falsas de Trump de que los inmigrantes en Ohio se estaban comiendo a las mascotas. “Sigue difundiendo la historia de Springfield sobre los inmigrantes haitianos que se comen a las mascotas locales”, escribió otro encuestado. “Está utilizando tropos antisemitas en sus discursos. Sigue difundiendo falsedades sobre su actuación en el debate”.

Los independientes políticos mencionaron ambos conjuntos de temas, según la encuesta, y los estadounidenses del otro bando tenían aproximadamente la misma probabilidad de mencionar palabras que apuntaban de manera más amplia a la carrera presidencial, como “campaña” o “elección”.

Parte de la disparidad entre demócratas y republicanos puede deberse a una diferencia en las fuentes de información que consumen, pero también puede reflejar diferencias en las noticias que resuenan más en cada grupo, así como en la forma en que los partidarios de cada bando tienden a describir esas noticias cuando se les pregunta, lo que a menudo refleja sus propios sentimientos políticos.

Mientras tanto, cuando se les preguntó qué habían visto, leído o escuchado sobre Harris, las respuestas de los estadounidenses incluyeron la palabra “debate”, una referencia tanto a su actuación en su primer debate presidencial como a su voluntad declarada de una revancha contra Trump, así como a su entrevista con Oprah Winfrey.

El sentimiento detrás de las palabras que los estadounidenses usaron para describir lo que habían escuchado sobre Harris siguió siendo más positivo que las palabras que usaron para describir las noticias sobre Trump. Esto no significa que expresaran sentimientos más cálidos sobre ella personalmente, sino que lo que dijeron sobre ella tendió a formularse en términos y tonos relativamente positivos.

Sin embargo, la brecha en los sentimientos sobre los dos candidatos fue significativamente menor que la de la semana pasada tras el debate. El tono de las respuestas relacionadas con Harris fue ligeramente más negativo que positivo, lo que llevó su sentimiento a un nivel similar al que tenía antes del debate, mientras que el de Trump se mantuvo en territorio negativo.

Mañana hay Debate Presidencial Cunao Hay Empate Técnico

La vicepresidenta demócrata y el expresidente republicano se encontrarán este martes en Filadelfia para protagonizar una contienda pública dirigida a seducir al electorado indeciso que definirá los comicios del 5 de noviembre

Desde Washington, Kamala Harris se encerró en un hotel de Pittsburgh para entrenar su guión de debate presidencial: enfrente un asesor disfrazado de Donald Trump contestaba sus argumentos políticos sobre el valor de la democracia y a la importancia de preservar el derecho al aborto. A 3.500 kilómetros de allí, en su hotel de Las Vegas, Trump utilizó su propia suite para observar -una y otra vez- el discurso de Harris en la Convención Demócrata: buscaba su flanco débil para afilar su réplica política.

Con las encuestas arrojando un empate técnico, Los dos candidatos asumen que el debate presidencial en la cadena ABC será un punto de inflexión en la campaña electoral. Y se preparan para una puja mediática que tiene lógica de suma cero: solo quien gane se llevará cuatro años en el Salón Oval.

Harris y Trump nunca se encontraron. El expresidente republicano descartó una transición ordenada con Joseph Biden -denunció fraude electoral-, y no concurrió a la Casa Blanca para hacer los honores a su sucesor.

Ambos candidatos se tienen inquina personal, y una muestra de ese desagrado mutuo podría ocurrir cuando inicie la confrontación pública: no está claro aún si se darán la mano frente a los millones de estadounidenses que mañana a las 21.00 (hora del este) cenarán mirando un acontecimiento histórico.

La última encuesta publicada por The New York Times muestra a Trump con 48 por ciento de los votos versus el 47 por ciento a favor de Harris. Ese sondeo tiene un error estadístico del tres por ciento, un dato que afirma lo obvio: hay empate técnico entre los dos contendientes.

La estrategia electoral de Harris apunta fortalecer sus niveles de conocimiento público entre los votantes indecisos. Los sondeos propios aseguran que cerca de un 25 por ciento de ese segmento aún no sabe cómo piensa la candidata demócrata, mientras que Trump está en una cifra que ronda el 7 por ciento.

En este contexto, el debate de mañana es clave para Harris. Ella y su equipo definieron un guión que se apoya en sus ideas políticas más que en la confrontación directa contra Trump. Eso no significa que la candidata demócrata rehuya un debate caliente sobre un asunto disruptivo que presente su adversario republicano, como podría ser su genero, su etnia o su religión.

Harris quiere demostrar que puede liderar Estados Unidos con una agenda moderna, que Trump sería incapaz de ejecutar por su edad (78 años) y sus ideas políticas. La candidata demócrata -explicó su entorno a Infobae- desplegaría un discurso con posibles medidas económicas que van más allá del programa que lideró Biden en su mandato.

Desde esta perspectiva, la candidata oficialista tiene un paper que asigna importancia táctica a demostrar que aún es posible construir el denominado sueño americano, una aspiración social que millones de votantes no encontraban en la propuesta de Biden cuando todavía buscaba su reelección electoral.

La encuesta del New York Times exhibe al factor cambio y un mejor futuro como aspiraciones básicas del electorado indeciso: más del 60 por ciento de los encuestados opinaron que el próximo presidente debe modificar la actual coyuntura. Y a continuación, sólo un 25 por ciento coloca en ese rol a Harris, mientras que Trump aparece con un porcentaje del 53 por ciento.

Entonces, Harris tiene tres objetivos a cumplir durante el debate: presentar sus ideas al electorado indeciso que no la conoce, convencer a los independientes que exigen una nueva agenda presidencial, y desnudar las posiciones ideológicas (aborto y impuestos) que definen el discurso de Trump.

Por su parte, Trump estructura el guión de debate sobre la situación económica que deja Biden. El comité de campaña republicano tiene un sondeo propio que muestra a Trump por encima de Harris en un 15 por ciento, cuando se pregunta sobre economía, inflación y empleo.

Y la diferencia entre ambos adversarios crece al momento de consultar sobre la inmigración indocumentada: el expresidente obtiene una diferencia de 21 puntos sobre la vicepresidente, que se encargó del tema con escaso éxito en 2021.

A su vez, se prevé que Trump hará foco en el tablero internacional. Cuestionará la retirada de Estados Unidos desde Afganistán, criticará la estrategia de negociación de Biden respecto al cese del fuego entre Israel y Hamas, y argumentará que la guerra en Ucrania es consecuencia directa de la agenda geopolítica de la administración demócrata.

El candidato republicano también usará la imagen publica de Biden para castigar a Harris. El presidente de los Estados Unidos tiene una imagen negativa promedio de 54,3 por ciento (acorde al sitio Realclearpolitics), y Trump intentará aprovechar este hecho político para erosionar el perfil electoral de Harris.

El debate presidencial tendrá una extensión de 90 minutos con dos cortes publicitarios. Harris y Trump sólo dispondrán de un bolígrafo, un anotador y una botella de agua. No habrá asesores en el estudio de televisión de la cadena ABC, y los periodistas David Muir y Linsey Davis conducirán este hecho histórico. Está previsto para mañana a las 21, hora del este

Campaña de Kamala Harris Aventaja Ligeramente a la de Trump

Las últimas cuatro semanas en Estados Unidos han estado marcadas por un gran contraste entre las dos campañas: la de Kamala Harris, que ha logrado en tiempo récord hacerse un hueco y remotivar a su bando; y la de Donald Trump, frustrado por esta nueva rival, que bloquea su camino hacia la Casa Blanca.

Kamala Harris aumenta el entusiasmo en el campo demócrata

La campaña de Harris disfrutó de un agosto ideal, sin tiempos muertos mediáticos, entre el nombramiento de compañero de fórmula, el anuncio de propuestas económicas y migratorias, la convención demócrata y una primera entrevista sin grandes errores.

Tim Walz o el regreso de la amabilidad a la política

El 6 de agosto, Kamala Harris anunció el nombre de su vicepresidente si es elegida para la Casa Blanca. Eligió a Tim Walz, gobernador de Minnesota, y éste recibió una calurosa bienvenida por parte de los demócratas. Veinticuatro horas después de su nombramiento, la campaña de Harris había recaudado 42 millones de dólares.

Su perfil es complementario al de la candidata: él procede de un entorno rural, ella de California; él es blanco, ella negra; él es exveterano, entrenador y profesor, ella hizo carrera en Derecho. Su perfil de tío simpático contrasta con la imagen elitista de muchos políticos demócratas.

No brilla por su elocución —nunca había leído un discurso en un teleprompter, admitió durante sus entrevistas con la campaña de Harris antes de su nominación—, pero sus palabras combinan sentido común y benevolencia. Tanto que a veces se le compara con Ted Lasso, el personaje de la serie homónima que ha marcado el regreso de la amabilidad y el buen humor a la televisión en los últimos años.

Kamala Harris o cómo cortar por lo sano con Joe Biden

Kamala Harris consiguió sustituir a un candidato en funciones. Por definición ella tiene que defender su historial, y al mismo tiempo presentarse como la opción del cambio. Para ello, tuvo que romper con Joe Biden y construir su propia marca.

Atrás queda la defensa de la democracia y el referéndum contra Donald Trump: ya no se trata de pedir el voto contra la amenaza republicana, sino a favor de las propuestas de la demócrata. Y apuesta tanto por la «alegría» —la palabra estuvo en boca de todos en la convención del partido del 19 al 22 de agosto— como por mirar al futuro.

La campaña de la candidata también se ha preocupado por abordar dos de los temas que más preocupan a los estadounidenses: la inflación y la crisis migratoria. Kamala Harris propone medidas para impulsar el poder adquisitivo, en particular la propiedad de la vivienda, pero también adopta una línea más dura en relación con la seguridad de la frontera mexicana.

Comunicación bien ensayada… por ahora

Kamala Harris, que en el pasado ha pisado a veces la alfombra al hablar en público tardó mucho en conceder su primera entrevista. La CNN obtuvo la exclusiva el 29 de agosto. La entrevista transcurrió sin contratiempos, un alivio para su bando, aún traumatizado por las meteduras de pata de Joe Biden.

Al mismo tiempo, su equipo de comunicación está haciendo un trabajo eficaz, con comunicados de prensa ocasionalmente mordaces sobre Donald Trump.

La candidata, que sale al campo en zapatillas Converse, también sabe jugar con los códigos de la red social TikTok —tiene su propia cuenta además de la de campaña—, un buen punto para dirigirse a la generación más joven de votantes. Además, reunió a un montón de estrellas en la convención del partido, desde los matrimonios Obama y Clinton hasta la diosa de la televisión estadounidense Oprah Winfrey. Incluso se rumoreó que Beyoncé vendría a cantar… pero eso no fue más que un dulce sueño demócrata.

Una bóveda bien provista y equipos motivados

El retorno del entusiasmo, visible en las encuestas y en el tamaño de las multitudes que acuden a los mítines de Kamala Harris, también se aprecia internamente. Su campaña puede contar con donaciones que se han disparado: más de 500 millones de dólares recaudados desde su llegada a la candidatura. También cuenta con más de 2.000 empleados de campaña (frente a los 300 de Trump) y miles de voluntarios que llaman a las puertas y hacen llamadas telefónicas para la candidata.

Hay algo de Obama 2008 en esta campaña, según los veteranos de la política estadounidense que cubrieron el ascenso al poder del primer presidente negro. En un memorando enviado el domingo, Jen O’Malley Dillon, directora de campaña de Kamala Harris, advirtió a sus equipos de que nada es seguro. «No se equivoquen: nos dirigimos a la recta final de esta carrera como perdedores». Y añadió: «Esta carrera va a seguir siendo increíblemente reñida y vamos a tener que trabajar extraordinariamente duro para convencer a los votantes que van a decidir estas elecciones».

Donald Trump o el regreso de los viejos demonios

Luto por su antiguo rival

Incluso sus partidarios más leales admitirán que agosto fue un mes difícil para Donald Trump. En una campaña electoral estadounidense, la convención de uno de los dos grandes partidos suele ir seguida de un rebote en las encuestas. Esta vez no ha sido así. Nada más al terminar la convención republicana, Joe Biden anunció que dejaba paso a Kamala Harris. Todos los focos recayeron sobre la nueva candidata demócrata, y desde entonces está en el punto de mira. Sin embargo, si hay algo que Donald Trump odia es que dejen de hablar de él.

El republicano se esfuerza por asimilar la derrota de un rival debilitado al que pensaba noquear el 5 de noviembre. En su lugar, el expresidente de 78 años tiene que enfrentarse a una mujer 20 años más joven que él, sin problemas de dicción, y que ha conseguido revigorizar el entusiasmo de su bando.

De hecho, es un candidato frustrado que da rienda suelta a sus pensamientos en las ruedas de prensa: 162 mentiras en 64 minutos, según un recuento de la radio NPR, en su conferencia de prensa en Mar-a-Lago el 8 de agosto. Se refugia en su red social Truth y se comunica con mensajes insultantes y a menudo incoherentes. Sobre las multitudes en los mítines de Kamala Harris afirma que las genera la inteligencia artificial.

Incluso llega a sugerir que los demócratas intentan una vez más ‘robarle’ las elecciones en 2020 — lo consiguieron extendiendo el uso del voto electrónico por la pandemia del Covid-19, y esta vez lo intentan cambiando al candidato —.Este tipo de discursos conspirativos — recordemos que en las últimas elecciones presidenciales no se presentó ninguna prueba de fraude — no han tenido éxito en el terreno electoral hasta ahora…

¿Podrá cambiar las cosas?

Los estrategas republicanos tienen algunos consejos para evitar que Donald Trump sabotee su campaña. Debería concentrarse en los temas en los que los votantes le consideran más competente que Kamala Harris: la economía, la inmigración y la delincuencia. También tendría que señalar los puntos débiles de la candidata, en particular sus cambios de opinión sobre una serie de cuestiones como la fracturación hidráulica, la criminalización de los inmigrantes que cruzan la frontera y el seguro sanitario público universal. Por último, tendría que emplearse a fondo en dos estados cruciales para él: Georgia y Pensilvania.

Sin embargo, el multimillonario ha enviado señales contradictorias en Georgia: atacó públicamente a su gobernador Brian Kemp por no apoyarle en su intento de revertir el resultado de 2020, antes de dar marcha atrás en los últimos días.

Donald Trump, que se vendía como un hombre nuevo tras escapar a un intento de asesinato en julio, lucha por no hacer caso a sus instintos. A mediados de agosto, volvió a contratar a Corey Lewandowski, uno de los artífices de su victoria en 2016, que le permitía expresarse sin filtros, pero cuyo controvertido perfil está causando revuelo. Este último parece estar creando tensiones internas, en particular con Susie Wiles y Chris LaCivita, dos veteranos de las campañas republicanas que debían poner orden en la casa Trump.

¿Es Donald Trump capaz de hacer otra cosa que no sea Donald Trump? El propio hombre lo tenía claro. En una cena a principios de julio en los Hamptons con donantes adinerados, el multimillonario, cuando le preguntaron sobre qué temas haría campaña a partir de ahora (una forma educada de pedirle que se dejara de niñerías y se concentrara en los asuntos importantes), se limitó a responder: «Soy como soy».

RFK Jr. o la retirada con mínimas consecuencias

Estaba anunciado como «el tercer hombre» de estas elecciones: Robert Francis Kennedy Jr, alias RFK Jr, tiró finalmente la toalla el 23 de agosto y se unió al bando de Trump. Sin embargo, la contribución en votos de este candidato antivacunas y conspiranoico parece bastante insignificante, y muchos expertos señalan que sus votantes ya se inclinaban hacia el bando republicano o se abstenían de votar. RFK Jr., que sueña con un puesto en la administración Trump, podría ser incluso un repelente para los votantes moderados.

Actualización de las encuestas

En el espacio de unas semanas, Kamala Harris ha conseguido no sólo recuperar el terreno perdido, sino colocarse a la cabeza de los sondeos nacionales (49,2% de intención de voto frente al 45,7% de Donald Trump, según la media de Silver Bulletin, o 48,1% frente al 46,3%, según Real Clear).

También es extremadamente competitiva en los estados clave, de modo que la carrera, que parecía perdida para Joe Biden, está ahora muy abierta. Cabe señalar, sin embargo, que no ganó más terreno tras la Convención Demócrata: la mayor parte de sus avances se produjeron antes.

En detalle, Kamala Harris obtuvo mejores resultados que su predecesor Joe Biden entre los jóvenes, los independientes, los afroamericanos (importantes en Georgia), los latinos (importantes en Arizona y Nevada) y las mujeres (generalmente más inclinadas a votar que los hombres). En resumen, consiguió removilizar la gran coalición demócrata sin asustar a los independientes, lo que es todo un logro.

En general, a partir de septiembre, una vez concluidas las convenciones, los electores empiezan a estabilizar su elección y los movimientos en los sondeos pierden importancia. Por tanto, todo se jugará en el filo de la navaja, en un puñado de Estados clave. Pero como se trata de una carrera presidencial única, no podemos descartar otra sorpresa antes de noviembre.

Próximo en el calendario: el esperado debate

Kamala Harris y Donald Trump se enfrentarán el martes 10 de septiembre en la cadena ABC. Aún no se sabe si habrá un segundo debate. Hay mucho en juego para Kamala Harris: no es cuestión de que la ex fiscal repita el desastre de su predecesor Joe Biden. En cuanto a Trump, tendrá que demostrar que es capaz de debatir con una candidata más joven y en mejor forma sin perder el norte.

Y para sonreír… dos salas, dos ambientes

Para ilustrar el contraste de ambiente entre las dos campañas de este agosto, he aquí dos vídeos divertidos, pero no por las mismas razones.

El primero está tomado de la «toma de lista» en la Convención Demócrata, el momento en que las delegaciones de cada Estado anuncian su apoyo oficial al candidato. Como hemos visto, en esta convención todo era «alegría». Y es justo decir que la delegación de Georgia lo dio todo, con la aparición del rapero Lil Jon, que sumió a la sala en un júbilo extraordinario.

En cambio, el 22 de agosto, en Georgia, el compañero de fórmula de Donald Trump, J.D. Vance, no estaba muy contento cuando entró en una tienda de donas. Una vendedora empezó pidiéndole que no apareciera en cámara — J.D. Vance puede dar las gracias a su equipo, que había preparado bien la visita — y el candidato hizo entonces una bochornosa actuación de «small talk» (entablar conversación, hablar de cualquier cosa y de todo — los estadounidenses suelen ser excelentes en este tipo de ejercicios —).

Kamala Aventaja a Trump en Encuestas

Los sondeos muestran un panorama muy reñido en la disputa presidencial de EE.UU. con la nueva candidatura demócrata redibujando el mapa electoral que hasta hace un mes favorecía a los republicanos.

La carrera hacia las elecciones presidenciales en Estados Unidos presenta un escenario muy reñido que, por el momento, da una ligera ventaja a la vicepresidenta Kamala Harris, frente al expresidente y candidato republicano a la reelección, Donald Trump, según varios sondeos fechados este domingo.

La diferencia más significativa es la que ofrece la nueva encuesta publicada por ABC News/Washington Post/Ipsos, que da a la candidata demócrata una ventaja de 50 % frente al 45 % de apoyo que recibe Trump, si bien Harris no logra superar al expresidente (2017-2021) en temas clave como el manejo de la economía y la inmigración.

Según esta encuesta, Harris se impondría a Trump por un 50 % frente al 45 % del exmandatario entre todos los adultos y con un punto porcentual menos (49%-45%) entre los votantes registrados.

Y lo superaría también entre los posibles votantes por un 51 % frente al 45 % del magnate neoyorquino.

Revirtiendo los malos augurios de la candidatura Biden

La encuesta de la consultora Ipsos refleja, al igual que el promedio elaborado por la web FiveThirtyEight, lo reñido de estas elecciones presidenciales, en momentos en que la vicepresidenta Harris se prepara para aceptar oficialmente la próxima semana su nominación en la Convención Nacional Demócrata en Chicago.

En el promedio de FiveThirtyEight divulgado este domingo, Harris adelanta a Trump por un margen de 2,6 puntos porcentuales (46,4 % frente al 43,8 %).

Y de acuerdo con un agregado de encuestas publicado por The Hill/Decision Desk, Harris supera a Trump a nivel nacional por un estrecho 1,8 % (49 % de la demócrata frente al 47 % del republicano).

La dupla demócrata (Harris y su compañero de fórmula, el gobernador Tim Waltz), ha logrado revertir por el momento los malos augurios para su formación de cara a los comicios de noviembre que tenía el presidente estadounidense, Joe Biden, cuando figuraba como candidato.

Candidatura de Harris ha redibujado el mapa electoral

Harris llega a Chicago el jueves, impulsada por una serie de encuestas que muestran que ya ha redibujado un mapa electoral que favorecía fuertemente a Trump en las últimas semanas de la candidatura de Biden.

Harris lidera o empata con Trump en seis de los siete estados que se espera decidan las elecciones del 5 de noviembre, según el último informe publicado el miércoles por el Cook Political Report.

El analista electoral cambió sus calificaciones para los estados indecisos de Arizona, Georgia y Nevada a favor de Harris, después de que los tres estados estaban marcados como «republicano” a principios de julio, cuando Biden aún era el candidato.

Trump se prodigará esta semana próxima con una intensa agenda de actos de campaña para contrarrestar el foco mediático que en los próximos días se cernirá sobre la Convención Nacional Demócrata, donde se oficializará como candidata a la vicepresidenta Kamala Harris.

Multitudes de Eventos de Kamala Harris se han Vuelto Preocupación Para Trump

La renovada energía que Harris contagió a la campaña demócrata se está reflejando en las multitudes que acuden a algunos de sus actos. Sin embargo, Trump se niega a admitirlo y llegó a decir falsamente que dichas imágenes de miles de personas son modificadas con inteligencia artificial.

Tras sus críticas al origen racial e, incluso, la risa de la vicepresidenta Kamala Harris, una nueva cuestión está ahora en el punto de mira de Donald Trump y ya se convirtió en su más reciente motivo de ataque al Partido Demócrata: el número de personas que acuden a sus mítines.

El expresidente está teniendo dificultades para encontrar su equilibrio político y una estrategia efectiva frente a su nueva rival por la presidencia. Trump se mostraba tranquilo y confiado teniendo que competir con Joe Biden, pero tras la retirada del presidente, el ánimo y nerviosismo de los republicanos por los apoyos que está sumando Harris son más que evidentes.

Las encuestas de intención de voto reafirman este cambio en la carrera electoral, y la demócrata ya lidera ligeramente en el promedio de sondeos estadounidenses. Un estudio reciente de The New York Times y el Siena College muestra que Harris tiene una ventaja de cuatro puntos porcentuales en estados clave como Wisconsin, Michigan y Pensilvania.

Esos resultados se reflejan también en los actos públicos de Harris, donde se han venido observando miles de asistentes en sus últimos mítines que parecen haberse contagiado de una energía renovada por la candidatura demócrata, tras el desencanto vivido durante los últimos días de Biden en la carrera por la Casa Blanca.

Y este apoyo público de su rival está preocupando a Trump, que está optando de nuevo por una práctica ya recurrente en su estrategia: realizar afirmaciones falsas.

Ocurrió este domingo, cuando el expresidente aseguró sin pruebas que una foto que muestra a miles de personas reunidas la semana pasada para ver llegar a Harris al aeropuerto de Detroit era “falsa” y que su equipo de campaña usó inteligencia artificial para ocultar que “no había nadie”.

Su mentira quedó fácilmente al descubierto cuando todos los periodistas y medios que hicieron la cobertura de ese acto electoral publicaron imágenes y videos que mostraban la alta afluencia de público en el evento, que desmentían rotundamente las palabras de Trump.

De hecho, Trump también insinuó que Harris había fingido la presencia de multitudes en otros mítines y sugirió incluso que su candidatura presidencial fuera invalidada.

“Lo mismo está sucediendo con sus falsas ‘multitudes’ en sus discursos. Debería ser descalificada porque la creación de una imagen falsa es interferencia en las elecciones. ¡Cualquiera que haga eso, hará trampa en cualquier cosa!”, escribió en su red Truth Social.

Este lunes, la campaña de Harris confirmó que la famosa foto fue tomada por un miembro del equipo y que en ningún caso fue modificada con inteligencia artificial.

La agencia AP pidió que analizara la imagen a Hany Farid, profesor de la Universidad de Berkeley en California y especialista en ciencia forense digital y desinformación.

El experto usó dos modelos diseñados para detectar patrones de inteligencia artificial generativa y no encontró ninguna evidencia de manipulación.

Farid aseguró haber comparado varias versiones de la foto y que la única alteración que detectó fue un simple cambio de brillo o contraste, y tal vez una mayor nitidez. Agregó que muchas otras imágenes y videos del evento del miércoles pasado muestran el mismo entorno.

Trump comenzó a impulsar estas falsas teorías sobre la foto de la campaña de Harris unos días después de que el jueves fuera preguntado por periodistas sobre las multitudes que estaban asistiendo a los mítines de su rival demócrata. Trump aseguró que nadie atrae tanta gente como él.

«He hablado con las multitudes más grandes. Nadie ha hablado ante multitudes más grandes que yo», afirmó Trump en su primera conferencia de prensa desde que Harris se convirtió en la candidata presidencial demócrata.

Entonces decidió comparar, sin ningún fundamento, el público que asistió a su discurso frente a la Casa Blanca el 6 de enero de 2021 -cuando llamó a sus seguidores a protestar en el Capitolio tras la victoria electoral de Joe Biden- con la multitud que asistió al famoso discurso en el que Martin Luther King pronunció la frase I have a dream (“Tengo un sueño”) en 1963 en el Monumento a Lincoln de Washington DC.

Sin embargo, esto fue otra gran falsedad del republicano. Aproximadamente 250,000 personas asistieron a la marcha en la que King pronunció su discurso, según el Servicio de Parques Nacionales de EEUU. En cambio, al discurso de Trump en 2021 asistieron al menos 10,000 personas, según informó AP en aquel momento.

Por qué algunos republicanos recomendaron a Trump cambiar de estrategia electoral

Esta y otras afirmaciones obviamente falsas le valieron duras críticas a Trump por quienes creen que mentir no es la mejor estrategia para hacer frente a la candidatura demócrata. Algunos expertos llegaron a cuestionar la salud mental de Trump y apuntaron a un posible “deterioro cognitivo” tras sus últimos discursos repletos de falsedades y mensajes inconexos e incoherentes.

Incluso, algunos de los principales asesores y partidarios de Trump instaron al expresidente a centrar sus críticas en las políticas de Harris y hablar más sobre asuntos de la frontera y la economía del país.

«Dejen de cuestionar el tamaño de sus multitudes», recomendó el expresidente republicano de la Cámara de Representantes Kevin McCarthy en una entrevista este lunes con Fox News.

La campaña de Harris aprovechó este debate sobre las multitudes de cada candidato para atacar a Trump en un comunicado titulado “Nueve días desde el último evento de Trump en un estado clave”.

“(Trump) está muy enojado por el tamaño de las multitudes, afirmando que todo es falso y generado por inteligencia artificial. (¿Quizás si hiciera campaña también conseguiría multitudes?)”, se pregunta de forma irónica en el texto publicado por los demócratas.

“Como si a alguien le importara el tamaño de la multitud ni nada por el estilo”, dijo en tono burlón Tim Walz, candidato a vicepresidente por los demócratas, tras lo que recibió una fuerte ovación en un mitin reciente.

El historial de afirmaciones falsas pronunciadas por Trump

Aunque la cuestión de quién atrae a más público no es la única teoría infundada que Trump está esparciendo en las últimas semanas.

Por ejemplo, tras la salida de Biden de la carrera electoral -a quien aventajaba en las encuestas de intención de voto, especialmente tras la cuestionada actuación del presidente en el debate electoral-, ahora Trump asegura sin ninguna prueba que su exrival querría volver a la campaña, una posibilidad que él apoyaría dado que su apoyo era notablemente menor que el logrado hasta ahora por Harris.

“Le quitaron la presidencia a Joe Biden”, dijo Trump la semana pasada. “No soy su fan, como probablemente se habrán dado cuenta. Tuvo un debate duro. Pero eso no significa que se le haga a un lado así como así”.

«¿Cuáles son las posibilidades de que el corrupto Joe Biden, el peor presidente en la historia de EEUU, cuya presidencia le fue robada inconstitucionalmente por Kamabla, (…) arruine la Convención Nacional Demócrata e intente recuperar la nominación, comenzando por desafiarme a otro debate?», escribió el expresidente en redes sociales.

Durante meses, la edad y la aptitud física y mental de Biden para ser reelegidos fue una de las claves de la campaña republicana para atacar a su rival. Sin embargo, Trump parece ahora estar batallando para encontrar un flanco desde el que atacar con efectividad a Harris, a jugar por las últimas encuestas que le dan a ella la victoria.

Entre otras cuestionadas estrategias, Trump se centró en criticar aspectos como la propia risa de Harris, asegurando que ríe demasiado y en momentos inapropiados.

«Yo la llamo laughing Kamala (algo así como ‘Kamala la risueña’)», dijo Trump en un mitin en julio. «¿La han visto reír alguna vez? Está loca. Se puede saber mucho de alguien por su risa… Ella está loca».

También optó incluso por atacar su origen racial, al asegurar que repentinamente “se volvió negra” (sugiriendo que lo hacía para atraer votos de la población afroestadounidense) pese a ser hija de padre jamaicano y de madre india

«No sabía que era negra hasta hace unos años, cuando por casualidad se volvió negra y ahora quiere que la conozcan como negra. Así que, no sé, ¿es india o es negra?», dijo Trump.

Sin embargo, también en este caso, los medios tardaron poco tiempo en desmentir la afirmación de Trump y encontrar muchos momentos en el pasado en los que Harris ya se identificó consistentemente como una mujer negra a lo largo de su carrera política.

Kamal Harris Gana Candidatura Demócrata

La vicepresidenta Kamala Harris ganó la candidatura presidencial demócrata, anunció el partido este lunes, lo que la convierte en la primera mujer negra y la primera estadounidense de origen asiático en encabezar una candidatura de un gran partido.

El anuncio se produjo después de que el plazo para que los delegados emitieran su voto digital se cerrara a las 18.00 horas ET.

Harris obtuvo el 99% de los votos, según el Comité Nacional Demócrata.

Desde poco después de que el presidente Joe Biden pusiera fin a su campaña de reelección y apoyara a Harris, estaba claro que la vicepresidenta sería la única candidata seria. Era la única candidata que había reunido suficientes firmas de delegados para figurar en la papeleta, y el partido ya declaró el viernes que había obtenido suficientes votos para asegurarse la candidatura.

A continuación, el secretario de la convención certificará los resultados y Harris aceptará oficialmente la candidatura.

Harris también podrá elegir a su compañero de fórmula sin necesidad de una votación separada. Se espera que revele su elección el martes, antes de un mitin de campaña previsto en Filadelfia.

Kamala Harris ya Avetnaja a Trump

La campaña de la candidata demócrata cobró impulso por los apoyos de las mujeres y los votantes negros, según la nueva encuesta.

La vicepresidenta de Estados Unidos y candidata demócrata a la Casa Blanca, Kamala Harris, tiene una ligera ventaja de un punto a nivel nacional sobre el expresidente y candidato republicano, Donald Trump, ante las elecciones de noviembre, según una encuesta publicada este domingo (04.08.2024).

El sondeo, de la CBS y YouGov, señala que 50% de los votantes se inclinarían el 5 de noviembre por la actual vicepresidenta, frente al 49% por Trump.

La diferencia está situada dentro del margen de error pero da cuenta del impulso que ha cobrado la campaña de Harris, que el 21 de julio reemplazó al presidente Joe Biden en la carrera hacia la Casa Blanca.

El actual mandatario, que desistió de postularse a la reelección por preocupaciones sobre su edad y su estado de salud, se mantenía claramente por detrás de Trump en los sondeos.

Antes de que el presidente Joe Biden abandonara la carrera, estaba cinco puntos por debajo de Trump.

Harris cosecha sus mejores resultados entre las mujeres y también entre los votantes negros, que marcaron además una predisposición mayor de asistir a participar del acto eleccionario que la que habían manifestado en la encuesta anterior, este mismo mes.

Un mayor numeró de demócratas y votantes negros dijo en el sondeo que «definitivamente votarán», pero Harris tendrá que seguir generando entusiasmo, particularmente en los estados clave, para mantener la ventaja.

La exfiscal de distrito, exfiscal general de California y vicepresidenta de Estados Unidos, será la rival del controversial candidato republicano y expresidente Donald Trump, en los comicios presidenciales de noviembre. (02.08.2024)Imagen: Aaron Schwartz/CNP/picture alliance
Anunciará a su compañero de fórmula

El martes la vicepresidenta anunciaría a su acompañante en la fórmula demócrata, con quien de inmediato saldría de gira por siete estados clave.

De acuerdo a analistas políticos, se inclinaría por un hombre blanco con el fin de ampliar su base y compensar ciertos puntos débiles de su campaña.

Los nombres más citados por la prensa son los de Mark Kelly, senador por Arizona, Josh Shapiro, gobernador del estado clave de Pensilvania, y Tim Walz, el poco conocido gobernador de Minnesota.

La encuesta preguntó a unos 3.102 votantes registrados en todo Estados Unidos entre el 30 de julio y el 2 de agosto.