Incautan Heroína con Foto de Pablo Escobar

La Agencia Antidrogas estadounidense (DEA) informó este lunes la detención en Nueva York de dos hombres con un cargamento de 34 kilos de heroína y fentanilo, valorado en más de diez millones de dólares, que estaban envueltos en paquetes con la foto del capo colombiano Pablo Escobar.

Los detenidos fueron identificados como Ariel Hernandez, quien fue acusado de posesión criminal de una sustancia controlada, y Luisuidyn Garcia Mena, señalado de conspiración y de suplantación de identidad, de acuerdo con medios locales.

La mayoría de la droga confiscada en un apartamento en la comunidad de Harlem estaba envuelta en forma de ladrillo mientras una pequeña cantidad fue encontrada en la mochila que llevaba Hernández.

También fueron confiscados 200,000 dólares en efectivo, una máquina para contar dinero, registros de transacciones y una balanza.

El operativo de la DEA, el Departamento de Seguridad y la Policía de Nueva York se realizó el pasado jueves como parte de una investigación contra el narcotráfico.

De acuerdo con las autoridades, los paquetes estaban envueltos con cinta adhesiva marrón, negra y transparente, algunas tenían la foto de Escobar y otros fueron identificados con los nombres de “Pablo”, “Escobar”, códigos o imágenes de aviones, indica además la prensa local.

“Las muertes relacionadas con los opioides están en un nivel muy alto y es nuestro trabajo investigar a los responsables de la distribución ilegal de la droga”, indicó el agente de la DEA a cargo de Nueva York, Ray Donovan.

“Esta organización usó una foto de Pablo Escobar, conocido como ‘el rey de la cocaína’, para marcar su producto. Aunque esta confiscación no se trató de cocaína, muestra una señal de los tiempos: que la heroína y el fentanilo, son los productos más rentables y abundantes para los traficantes y la amenaza más mortal para el público”, indicó Donovan.

Investigan a Familiares Directos de Escobar por Lavado de Dinero

La viuda y el hijo de de Pablo Escobar Gaviria, imputados del delito de lavado de dinero proveniente del narcotráfico fueron indagados. No declararon pero presentaron un escrito con documentación respaldatoria para defenderse.

Así lo informaron a fuentes judiciales. Las declaraciones indagatorias fueron tomadas por el juez federal Néstor Barral, titular del Juzgado Federal N° 3 de Morón. El Ministerio Público está representado por el fiscal Sebastián Basso.
María Isabel Santos Caballero y su hijo, Juan Sebastían Marroquín Santos, estuvieron acompañados por su abogado defensor, Ezequiel Klainer.
Los imputados están sospechados de haber prestado «colaboración esencial» para que el ciudadano colombiano José Piedrahita Ceballos, detenido en su país natal a la espera de ser extraditado a la Argentina y a los Estados Unidos, y el abogado y empresario argentino Mateo Corvo Dolcet llevaran a cabo una operatoria de lavado de activos en la Argentina. Según los voceros consultados, en el escrito la viuda y el hijo de «El Patrón del Mal» negaron conocer que Piedrahita Ceballos era un narcotraficante.
Pasado mañana será indagado por el mismo delito el exfuttbolista Mauricio «Chicho» Serna y después de la declaración comenzará el plazo de diez días para que el juez Barrral resuelva la situación procesal de los imputados.
Piedrahita Ceballos, según el expediente judicial, fue integrante del temible Cartel de Cali, liderado por los hermanos Miguel y Gilberto Rodríguez Orejuela. La organización criminal habría traficado desde Colombia a los Estados Unidos, entre 1986 y 1996, 200.000 kilos de cocaína. Fue detenido en septiembre pasado en Colombia en operativos simultáneo a los que hacia la Gendarmería Nacional en la Argentina.
María Isabel Santos Caballero y Juan Sebastían Marroquín Santos son las identidades que en 1995 les otorgó el gobierno de Colombia cuando abandonaron su país natal. Antes se llamaban Victoria Eugenia Henao Vallejo, y conocida como «La Tata», y sus dos hijos, Juan Pablo Escobar. Llegaron a la Argentina después de un acuerdo entre los por entonces presidentes de la Argentina y Colombia, Carlos Menem y Ernesto Samper, respectivamente. Anteriormente, la familia de «El Patrón del Mal» había intentado radicarse en Alemania y los Estados Unidos, pero no tuvo éxito.
La viuda y el hijo de Escobar Gaviriaya fueron investigados por lavado de dinero. Fueron sobreseídos en noviembre de 2005 por un tribunal oral federal (TOF) porteño, que anuló el juicio y cerró la causa por lavado de dinero.
Al ordenar las indagatorias de Santos Caballero, Marroquín Santos y Serna, el juez Barral hizo lugar a las solicitudes planteadas por el fiscal Basso; la Procuraduría de Criminalidad Económica y Lavado de Activos (Procelac), a cargo de Gabriel Pérez Barberá y la Procuraduría de Narcocriminalidad (Procunar), conducida por Diego Iglesias.
La pista sobre la viuda y el hijo de Escobar Gaviria surgió en documentación secuestrada a Corvo Dolcet en allanamientos hechos en septiembre pasado en su casa del country Ayres del Pilar. El abogado y empresario tiene 53 años y en octubre pasado fue procesado por el juez Barral con prisión preventiva por el delito de lavado de activos. A principios de año fue excarcelado, volvió a su domicilio y es controlado por medio de una tobillera electrónica. No puede alejarse más de 100 kilómetros.
«Pocos días después de que Corvo Dolcet brindara ese testimonio [su primera declaración indagatoria] hallamos dentro de la documentación secuestrada en su domicilio, más precisamente en una caja identificada como ´NO TOCAR MATEO´, un instrumento en el que Marroquín reconoció haber sido, junto con su madre, quienes presentaron a Piedrahita Ceballos como inversor de proyectos que Corvo Dolcet llevaba adelante», sostuvieron los fiscales Basso, Pérez Barberá e Iglesias en el dictamen que presentaron ante el juez Barral.
En el documento secuestrado, las partes fijaron como cláusula primera que la presentación del «señor Peidrahita fue al solo efecto de que invierta en el proyecto de Corvo Dolcet. Y que luego de de haber generado ese canal, el ciudadano colombiano efectuó distintas inversiones de dinero en efectivo y por medio de la entrega de dos propiedades».
Según describieron los representantes del Ministerio Público, Corvo Dolcet reconoció en favor de Santos Caballero y Marroquín Santos una comisión del 4,5 por ciento del total de la inversión realizada «la cual para el día en que ese documento privado fue firmado (presumiblemente el 15 de febrero de 2011) ya había sido cancela la totalidad de la comisión pactada.
Santos Caballero y Corvo Dolcet se conocieron en 1995, según el relato del empresario procesado, cuando la viuda de Escobar Gaviria buscaba a un abogado que lo ayudara en los trámites necesarios para instalarse en el país e insertarse económicamente. «Como sus necesidades no tenían relación con la actividad que yo estaba desempeñando, exclusivamente en el ámbito del derecho penal, no me interesó ser su abogado y tampoco le recomendé a otro colega», recordó el acusado.
«Entendemos que Santos Caballero y Marroquín Santos efectuaron un aporte caracter esencial para el cumplimiento de los objetivos criminales de Piedrahita Ceballos, siendo ellos quiénes operaron de nexo entre los intereses del ciudadano colombiano y el grupo que a nivel local lideraba Corvo Dolcet, quien contaba con una estructura empresarial lícita preparada para la inyección de directa de fondos», afirmaron los fiscales Basso, Pérez Barbellá e Iglesias en el dictamen donde pidieron la indagatoria de la viuda y el hijo de Escobar Gaviria.
En el expediente judicial que se tramita en el juzgado de Barral, se secuestraron 15.000.000 de dólares entre propiedades, dinero en efectivo y lingotes de oro que Piedrahita Ceballos invirtió en la Argentina a través de dos canales: un desarrollo inmobiliario en Pilar, que incluía la ampliación del Ferrocarril Belgrano Norte y la organización de espectáculos de tango en el Faena Hotel a través de la franquicia Rojo Tango, y en el Café de los Angelitos.
El desarrollo inmobiliario iba a contar con una nueva estación del ferrocarril Belgrano Norte en el kilómetro 46 de la ruta Panamericana, un complejo de 920 cocheras distribuidas en cinco niveles; el edificio Pilar Parking, que se desarrolla en el complejo Pilar Bicentenario, demandará una inversión de $ 150 millones. Corvo Dolcet figuraba presidente del directorio de Pilar Bicentenario SA, firma dueña de la tierra y del proyecto.
Para los representantes del Ministerio Público, a partir de la participación de Santos Caballero y Marroquín Santos «comenzó a materializarse una serie de actos delictivos multiples orquestados y controlados por Piedrahita Ceballos y Corvo Dolcet los cuales le permitieron al ciudadano colombiano inyectar millonarias sumas de dinero sospechadas de provenir del tráfico de drogas en el sistema financiero local».
Basso, Pérez Barberá e Iglesias sostuvieron las «cuestionadas» inversiones de Piedrahita Ceballos no se podrían haber concretado sin la participación de la viuda y del hijo de Escobar Gaviria.
«Las pruebas obtenidas hasta el momento permiten afirmar que Santos Caballero y Marroquín Santos conocían las actividades criminales del señor Piedrahita Ceballos y estaban al tanto de su vinculación con estructuras dedicadas al tráfico ilícito de estupefacientes. Al mismo tiempo sabían del origen espurio de los fondos con los que contaba. Sabedores [sic] de esas circunstancias encontraron en el proyecto que Corvo Dolcet les acercó una forma de obtener un beneficio patrimonial personal de la inyección de fondos de origen ilícito», afirmaron los fiscales en su dictamen.