Gobernador de Texas Envía Migrantes a Nueva York Para Presionar a la Casa Blanca

El alcalde neoyorquino Adams, que prometió hacer de la ciudad un refugio, denuncia la saturación de los albergues por la afluencia de extranjeros, en su mayoría latinoamericanos

Tras llenar de migrantes irregulares las calles de Washington, el gobernador de Texas, el republicano Greg Abbott, ha desviado la presión a Nueva York, a donde la semana pasada envió el primer autobús chárter de indocumentados en un pulso a la Administración demócrata que, en el caso de la capital federal, amenaza con desbordar los servicios sociales. Tanto, que el Pentágono ha rechazado el envío de miembros de la Guardia Nacional, un cuerpo de reservistas que habitualmente se despliega en las emergencias, para atender a los migrantes, como habían solicitado las autoridades del Distrito de Columbia.

El autobús llegado el viernes a Nueva York, con 54 personas a bordo, menores incluidos, no es el primero que Abbott fleta a la Gran Manzana, con el argumento de que el alcalde Eric Adams ha prometido hacer de la ciudad “un refugio” y queriendo hacerle partícipe de la crisis migratoria que a su juicio vive el Estado fronterizo. Aunque la mayoría de los migrantes se fueron quedando a lo largo del trayecto, muchos aseguraron al llegar que no sabían el destino final. Además de problemas logísticos, como el reto de hallar acomodo a los recién llegados en una red de “albergues ya saturados por solicitantes de asilo”, según Adams, los migrantes arrastran expedientes de solicitud de asilo o residencia presentados en los Estados por los que entraron al país, por lo que la resolución de sus casos queda ahora en el aire.

La de Abbott no es una medida inédita, el grifo de la presión migratoria en las fronteras (Ceuta y Melilla, las islas griegas del Egeo, el límite de Bielorrusia y Lituania o el paso de Ventimiglia entre Francia e Italia, entre otras muchas) se abre y cierra a voluntad de los políticos y sus intereses. Los de Abbott, que inició el trasvase a primeros de abril y en mayo fue secundado por su homólogo de Arizona, el también republicano Doug Ducey, son evidentes: mostrar mano dura frente a la inmigración en pleno proceso de primarias y responder al intento de la Administración del presidente Biden de rescindir el llamado Título 42, una normativa aprobada en la pandemia que preveía la expulsión de los irregulares por razones sanitarias y que un juez frenó en mayo, alimentando el caos en la frontera. El chantaje migratorio oculta casos tan tristes como el de la niña de seis años diabética que viajaba a bordo del bus, que tuvo que ser derivada a un hospital neoyorquino para recibir insulina. O como una familia venezolana formada por seis adultos y cuatro niños. La mayoría de los 54 pasajeros eran latinoamericanos.

Washington y Nueva York no son las únicas metas políticas de Abbott, cualquier ciudad demócrata de la costa este, más abierta teóricamente a los extranjeros que los feudos republicanos, es susceptible de convertirse en destino para obligar a la Administración de Biden a tomar medidas en la frontera. La oficina de prensa de Abbott confirmó que el autobús llegado el viernes trasladaba al “primer grupo de inmigrantes que viajan a la ciudad de Nueva York desde Texas”. Pero no son los primeros. Según las autoridades de Nueva York, han llegado alrededor de 4.000 solicitantes de asilo en los últimos meses. La diferencia estriba en que la afluencia no había gozado hasta ahora de la cobertura mediática que logró la semana pasada un aviso de la oficina de Abbott. Grupos de la archidiócesis de Nueva York confirman que han atendido a un millar largo de extranjeros en las últimas semanas, llegados directamente a la ciudad o previo desvío por Washington. “Vienen porque les sale gratis el pasaje, porque creen que mejor probar suerte que eternizarse en un Estado donde no les quieren, y porque en algunos casos disponen del apoyo de redes informales de familiares o amigos que pueden ayudarles a arrancar una nueva vida aquí”, explica João Fes, diácono de una parroquia de Manhattan que colabora en la acogida. Sobre las nacionalidades, afirma, “hay de todo, de venezolanos sin recursos a guatemaltecos u hondureños que huyen de las maras”.

Abbott y Adams llevaban semanas enzarzados en una agria polémica, con especial resonancia en las redes sociales y en la prensa. El autobús zarpó de Eagle Pass dos días después de que Adams anunciara medidas de emergencia para aumentar exponencialmente la capacidad de los albergues. No fue un anuncio gratuito, en cualquier caso: el mes pasado, la ciudad violó una ley que garantiza el derecho a la vivienda al no proporcionar acomodo a personas que habían solicitado ingresar en un albergue para familias del Bronx (la red de viviendas sociales disponible en la ciudad es deficitaria). Para defenderse, Adams culpó a los solicitantes de asilo enviados desde Texas y Arizona, y Abbott vio el momento de contratacar.

Como Washington, dijo Abbott este fin de semana mediante un comunicado, Nueva York es “el destino ideal para estos migrantes, que pueden recibir la abundancia de servicios y viviendas de la ciudad de los que el alcalde Eric Adams se ha jactado dentro de la ciudad-refugio. Espero que cumpla su promesa de dar la bienvenida a todos los migrantes con los brazos abiertos para que nuestras ciudades fronterizas invadidas y abrumadas puedan encontrar alivio”. Adams ha llamado este lunes a Abbott “inhumano, malo y cruel” y asegurado que “a cada solicitante de asilo que viene a Nueva York, le daremos el refugio y el apoyo que necesita”. Hoy han llegado a Manhattan 14 más.

Tanto Adams como la alcaldesa de Washington, Muriel Bowser, sostienen que sus ciudades se ven sobrepasadas por la afluencia de solicitantes de asilo cuando el sistema de acogida y alojamiento para personas sin hogar ya está al máximo de su capacidad. En Nueva York había la semana pasada 50.000 plazas ocupadas, por encima de las 46.000 de mediados de mayo, aunque el departamento encargado ha rehusado detallar cuántos de los migrantes llegados en los últimos meses han entrado en el sistema. La red de antiguos hoteles que Nueva York habilitó durante la pandemia como solución de acogida temporal para personas sin techo es una de las opciones para alojar los casos más urgentes, como familias con menores. Adams y Bowser han pedido ayuda al Gobierno federal y este mismo lunes estaba prevista una reunión de los representantes de Nueva York en el Congreso sobre la crisis.

Adams en especial no se ha ahorrado las críticas sobre la falta de colaboración del Ejecutivo de Washington. La portavoz de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, se ha referido este lunes a la crisis migratoria minimizando las quejas del alcalde, también demócrata, de que la Casa Blanca no está haciendo lo suficiente. Jean-Pierre señaló que la agencia federal para la gestión de emergencias (FEMA, en sus siglas inglesas) está colaborando. “Esto compete al gobernador Abbott. Esto es lo que está haciendo”, zanjó la portavoz.

Washington, una de las ciudades que concentra el grueso de la emigración salvadoreña, entre otros países emisores, ha recibido la mayoría de los autobuses salidos de Texas y Arizona. Para ambas ciudades, en pleno ferragosto, con alertas por calor extremo y en una coyuntura económica difícil, en la que los bancos de alimentos sufren el impacto de la inflación, el desafío de acoger a miles de personas exhaustas tras viajes que en muchos casos duran meses es mayúsculo.

Gobernador de Texas Aprueba Barrera de Acero en Frontera

Con 8,600 migrantes que permanecen bajo el Puente Internacional de Del Río, el gobernador de Texas, Greg Abbott, dijo el martes que los funcionarios están utilizando métodos «sin precedentes» para disuadir a los migrantes de cruzar al estado, incluyendo estacionar vehículos de la Guardia Nacional de Texas y el Departamento de Seguridad Pública de Texas a lo largo de la frontera para crear una «barrera de acero».

El aumento de migrantes, muchos de los cuales son haitianos, fue el resultado de mensajes de boca en boca o en las redes sociales de que la frontera en Del Río estaba abierta, dijo el jefe de la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos, Raul Ortiz. Escenas caóticas en el puente, que incluyen a agentes de la ley a caballo usando tácticas agresivas contra los migrantes, han provocado la ira de los funcionarios locales y federales. Algunos incluso han calificado de inhumanos los campamentos improvisados bajo el puente.

«Lo que ves debajo del puente, eso no es humano», dijo Brandon Judd, presidente del Consejo Nacional de la Patrulla Fronteriza.

Abbott culpó a la administración del presidente Joe Biden por la situación actual en Del Río, diciendo que el gobierno federal no está haciendo lo suficiente para asegurar la frontera sur del país. Eso, argumentó Abbott, ha llevado a miles de migrantes a acampar bajo el Puente Internacional de Del Río esperando a ser procesados por las autoridades de inmigración de Estados Unidos.

EE.UU. investiga imágenes «horrorosas» de la Patrulla Fronteriza cargando contra migrantes haitianos
«Cuando tienes una administración que no está haciendo cumplir la ley en este país, cuando tienes una administración que ha abandonado cualquier pretensión de asegurar la frontera y asegurar nuestra soberanía, ves la avalancha de personas como la que vimos cruzar esta presa que está justo detrás de mí», dijo Abbott en una conferencia de prensa en el condado de Val Verde.

La administración Biden todavía se basa en una política fronteriza de la era Trump vinculada a la pandemia de coronavirus que permite a las autoridades fronterizas expulsar rápidamente a los migrantes detenidos en la frontera entre Estados Unidos y México. En los últimos días, la administración ha intensificado esas deportaciones y ha aumentado el ritmo de los vuelos de repatriación.

El secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, dijo que la administración espera limpiar el campamento de migrantes debajo del puente dentro de los próximos nueve o 10 días.

«Esperamos ver resultados impactantes en las próximas 48 a 96 horas, y tendremos un sentido mucho mejor en los próximos dos días», dijo a los senadores durante una audiencia del panel del Senado el martes.

«Es extremadamente preocupante», dijo anteriormente a CNN la ministra de Relaciones Exteriores de Panamá, Erika Mouynes.

Hay hasta 30,000 haitianos en Colombia que pueden estar buscando viajar al norte, y Panamá espera que 80,000 migrantes crucen sus fronteras de camino a Estados Unidos para fines de este año. A principios de septiembre, más de 70.000 migrantes llegaron a Panamá en 2021, más de 30,000 de los cuales son de Haití.

Más del 97% de los haitianos que migran a Estados Unidos no provienen directamente de Haití, sino que eran residentes de países de Sudamérica, como Chile y Brasil, según el gobierno panameño.

Se cree que muchos haitianos que acampan debajo del puente han estado viviendo en Sudamérica desde el catastrófico terremoto de 2010 en su país natal. El costo económico de la pandemia en la región impulsó aún más la migración hacia la frontera sur de Estados Unidos.

Haití es un «país peligroso» ahora debido al reciente asesinato presidencial y el terremoto de magnitud 7,2 que azotó el país en agosto, dijo Nicole Phillips, directora legal de Haitian Bridge Alliance, un grupo de defensa de los migrantes haitianos.

«La gente todavía tiene que conseguir agua potable y atención médica», dijo. «Entonces, lo que debe suceder es detener los vuelos de deportación a Haití de inmediato y, en cambio, dar la bienvenida a los haitianos para que los examinen en busca de asilo… para que no tengan que regresar a donde huyeron».

Algunos de los haitianos que se amontonaron bajo el puente de Del Río ya han comenzado a regresar a México, según un funcionario de Seguridad Nacional que agregó que se anticipan menos llegadas a medida que la administración incrementa los vuelos de repatriación.

El gobernador Abbott solicitó una declaración de emergencia el lunes debido a la cantidad de migrantes en el puente. La avalancha de migrantes en Del Río también ha provocado el cierre temporal del puente, y el tráfico se está desviando para garantizar el flujo ininterrumpido de comercio y viajes, dijo Ortiz, jefe de la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos.

El Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) también depende de otras instalaciones de Aduanas y Protección Fronteriza a lo largo de la frontera para procesar a los migrantes de Del Río. Se han llevado más de 1.000 a El Paso, y se esperan 500 por día, según el juez del condado de El Paso Ricardo Samaniego

«Estamos recibiendo a algunos de allá debido a la incapacidad en este momento para manejarlos», dijo Samaniego. «Necesitan mucha ayuda de nuestra parte y El Paso siempre está listo para ayudar».

El director del Departamento de Seguridad Pública de Texas, Steven McCraw, dijo que el gobernador Abbott dejó en claro que «Texas no necesita el permiso de nadie para proteger a Texas».

McCraw dijo que asegurar la frontera es imperativo porque representa una amenaza para la seguridad pública, una amenaza para la seguridad nacional y permite a los cárteles «explotar» las brechas que conducen a un aumento en el tráfico de personas y problemas con las drogas.

«Hoy alcanzamos el máximo histórico en Texas y son 1,1 millones de detenciones sin incluir lo que se ve aquí», dijo McCraw, refiriéndose al puente de Del Río.

Abbot dijo que los agentes de la Patrulla Fronteriza están «abrumados con la cantidad de trabajo que deben hacer y están sufriendo las consecuencias de una administración que no les proporciona el personal ni los recursos que necesitan».

La crisis en la frontera ha generado muchas preguntas en Washington sobre la respuesta del DHS. El senador estadounidense Josh Hawley de Missouri interrogó al secretario del DHS, Alejandro Mayorkas, sobre la crisis de Del Río durante una audiencia del panel del Senado el martes.

«¿Estás contento con tu progreso?», le preguntó Hawley a Mayorkas.

«Senador, tenemos que hacerlo mejor y tenemos que hacer más, y estamos comprometidos a hacerlo, y lo estamos haciendo», dijo Mayorkas, y agregó que el aumento de migrantes, principalmente de Haití, fue «sin precedentes».

Hawley dijo que la situación actual ocurrió bajo la supervisión de Mayorkas y que las condiciones humanitarias no deben minimizarse.

«Francamente, usted es responsable, usted y su administración son responsables», le dijo Hawley a Mayorkas. «Decenas de miles de personas que viven en condiciones alarmantes, alarmantes, traídas aquí debido a sus políticas».

Mayorkas también se refirió a las imágenes de agentes de la Patrulla Fronteriza confrontando agresivamente a los migrantes el martes, diciendo que además de iniciar una investigación interna, el DHS alertó al inspector general del incidente.

Gobernador de Texas Pide a Guardia Nacional Ayuda Para Detener a Indocumentados

+ El gobernador de Texas ordena a la Guardia Nacional detener a indocumentados

+ La Guardia Nacional se limitaban a funciones de observación y mantenimiento y mejora de infraestructuras

+ “La Guardia Nacional de Texas está desempeñando un papel sin precedentes para asegurar la frontera”

Guardia Nacional detención indocumentados. Este martes el gobernador de Texas, Greg Abbott, informó que la Guardia Nacional desplegada en la frontera con México para colaborar en el combate contra el cruce de indocumentados podrá empezar a detener a los inmigrantes que crucen la frontera de manera ilegal, según Agencia Efe.

Los elementos de la Guardia Nacional han ayudado hasta ahora a las autoridades locales y federales que se encargan de detener a los inmigrantes en esta tarea, pero tradicionalmente se limitaban a funciones de observación y mantenimiento y mejora de infraestructuras, como la valla fronteriza.

Gobernador de Texas ordena detener indocumentados

Pero el gobernador Abbott, desde hace meses libra una batalla política y judicial en materia migratoria con el presidente estadounidense, Joe Biden, quiere que vaya un paso más allá y no se limite a avisar de avistamientos de migrantes sino que los propios soldados hagan cumplir las leyes de manera efectiva.

“La Guardia Nacional de Texas está desempeñando un papel sin precedentes para asegurar la frontera debido a la negativa sin precedentes del Gobierno federal a cumplir con sus obligaciones bajo la ley federal”, dijo el gobernador de Texas Greg Abbott en un comunicado.

Guardia Nacional detención indocumentados: Ya lo había anunciado

Incluso hace algunos meses, el gobernador Abbott ya había anunciado que los soldados de la Guardia Nacional iban a asistir en el arresto de migrantes indocumentados que sean detenidos por el estado bajo el cargo de invasión de propiedad en la frontera de Texas, pero ahora dio un paso más.

La nota de prensa de la Gobernación de Texas explicó que los efectivos ya trabajan con el Departamento de Seguridad Pública de Texas (DPS) y la policía local para aumentar la seguridad fronteriza. Sin duda el cruce ilegal de los indocumentados a suelo americano será más difícil de lo normal.

Guardia Nacional detención indocumentados: Ayudan en la construcción de un muro

Pero no solo realizan funciones de la policía, si no que también están ayudando con las primeras etapas de la construcción de barreras fronterizas y un muro fronterizo, para tratar de evitar que un gran numero de personas indocumentadas lleguen al país de manera ilegal, explicó el comunicado.

En julio, y utilizando el poder que le otorga la Constitución de Texas, Abbott ordenó que la Guardia Nacional asistiera en el arresto de migrantes que crucen ilegalmente la frontera desde México después de que semanas antes anunció que el estado comenzaría a arrestar a indocumentados bajo cargos de invasión agravada con base en una orden de emergencia firmada por propio el político republicano.

Guardia Nacional detención indocumentados: Operación Estrella Solitaria

El gobernador lanzó en marzo pasado una operación llamada “Estrella Solitaria”, que es para combatir la inmigración irregular, en esa ocasión fueron enviados a los condados fronterizos centenares de agentes del DPS, que han realizado más de 4.600 arrestos en el limite de Estados Unidos y México.

De hecho en julio pasado, fueron más de 212.000 personas que intentaron cruzar ilegalmente la frontera sur de EE.UU. Esta es la mayor cantidad desde al menos 21 años, según datos oficiales del Gobierno federal. Por lo que el gobierno de Texas intenta reducir el numero de inmigrantes.

Guardia Nacional detención indocumentados: Han sido criticados

Grupos de derechos civiles han criticado repetidamente el uso de la Guardia Nacional en actividades policiales, especialmente desde que varios gobernadores conservadores del país han enviado a la frontera sur con Texas y Arizona efectivos de este cuerpo de reserva de las Fuerzas Armadas estadounidenses.

La pasada semana, el gobernador de Arizona, Doug Ducey, extendió por un año más la misión de soldados de la Guardia Nacional en la frontera con México para frenar el cruce de migrantes debido a que, en su opinión, la Administración del presidente Joe Biden “no ha logrado asegurar la frontera”.

Guardia Nacional detención indocumentados: Juez toma medida en contra indocumentados

De acuerdo con la agencia Efe, un juez federal en Texas declaró nulas las prioridades establecidas por el gobierno del presidente Joe Biden para que el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) detenga a migrantes indocumentados para su deportación. Lo cual causó la sorpresa de la administración del presidente

Esta decisión, suma un punto desfavorable contra las políticas que deseaba implementar Biden, en su gobierno. Llega en un punto de inflexión, donde se esperaba que el jurado y las autoridades no llegaran a anular las prioridades de la administración de Biden, en torno a los indocumentados.

¿Quiénes serán los afectados?

El Congreso había ordenado a ICE que estableciera prioridades en la detención de inmigrantes indocumentados, y un memorando del Gobierno Biden el 18 de febrero estipuló que se diera prioridad a la detención de individuos que hubieran cometido delitos graves o que presentaran una amenaza para la seguridad pública y nacional, según la agencia Efe.

Por esta razón, se esperaba que la decisión del jurado no llegara a presentar un peligro, contra los inmigrantes. El gobierno de Biden había tomado en sí la responsabilidad de asegurar a los indocumentados de un proceso justo, donde no fueran reportados con severidad si no habían llegado a cometer un delito grave. Archivado como: Guardia Nacional detención indocumentados.

La decisión del Juez Tipton

El juez Drew Tipton, en el Tribunal del Distrito Sur en Corpus Christi, Texas, echó abajo estas prioridades, poniéndose del lado de los estados de Texas y Luisiana que habían demandado la orden. Al eliminar estas prioridades, también se establece que el peligro en cuestión de los inmigrantes y su deportación es casi segura.

Aunque no hay declaraciones por parte de el gobierno de Biden, se espera que en las próximas horas haya un comunicado de su parte o se logre llegar a una nueva petición que contrarreste la decisión del juez Drew Tipton. La opinión del público se ha dividido, algunos lo consideran como una buena noticia, mientras que otros lo han tomado como ‘un hecho desafortunado’. Archivado como: Guardia Nacional detención indocumentados.

Las nuevas prioridades

Según la agencia Efe, las nuevas prioridades estipuladas por el gobierno de Biden apuntaban a enfocar los esfuerzos policiales en quienes cometan crímenes, cesando de hecho las políticas de redadas masivas y la detención de inmigrantes indocumentados en sus lugares de trabajo

Por tal motivo, la mayoría de veces que se han hecho deportaciones en los primeros meses de su mandato, eran a personas que cometían delitos, no hombres o mujeres que desarrollan un trabajo en la comunidad y que han respetado a los demás. Por tal motivo, el que este juez haya hecho tal pedimento, sorprendió a más de una persona. Archivado como: Guardia Nacional detención indocumentados.

Un nuevo plazo

La orden del magistrado Tipton da al Departamento de Seguridad Nacional (DHS) un plazo hasta el 3 de septiembre para que la agencia informe qué hará sin las tales prioridades, mencionó la agencia.

Seis días después de ese memorando el mismo juez Tipton, que fue designado por el ex presidente Donald Trump, empujó el primer obstáculo en la política inmigratoria del nuevo gobierno cuando bloqueó, por tiempo indefinido y a nivel nacional una moratoria de 100 días en las deportaciones decretada por Biden. Archivado como: Guardia Nacional detención indocumentados.

Autoridades de Houston Critican Decisión de Apertura

Lina Hidalgo dijo que en el mejor de los escenarios es un «solo un deseo» del gobernador y en el peor de los casos un intento cínico por distraer la opinión por las fallas del estado frente a la crisis energética.

“No es el mejor momento para relajar las restricciones relacionadas con el COVID-19”.

Con esta frase, el alcalde Sylvester Turner le salió al paso a la decisión del gobernador Greg Abbott de acabar con las restricciones impuestas desde el año pasado para controlar la propagación del virus.

“Es demasiado temprano”, dijo el mandatario, quien agregó -que- si se considera la cantidad de gente infectada y el pequeño número de personas vacunadas, hay una gran porción de la población que aún es susceptible de contagio.

Abbott anunció la reapertura de todos los negocios al 100% desde este miércoles 10 de marzo y acabó con la orden de usar cubrebocas.

A este se sumó la administradora ejecutiva del Condado Harris, Lina Hidalgo, quien rechazó la medida al señalar que quitar estas medidas que han mostrado ser efectivas no harán a la comunidad más segura.

Dijo que, por el contrario, cada vez que se ha reversado «se ha visto un aumento en las hospitalizaciones». Agregó quer en caso de que eso ocurra «se estará empezando desde el punto más alto, lo cual es inaceptable y peligroso». En esto también hubo coincidencia entre alcalde y administradora ejecutiva.

Finalmente, Hidalgo señaló que la decisión tomada por Abbott es «un deseo» del gobernador y que en el peor de los casos «es un intento cínico por distraer a los texanos de las fallas del Estado por supervisar el sistema eléctrico» durante la reciente tormenta invernal.

Texas Quita Toda Restricción por COVID

El republicano Greg Abbott anunció este martes que el fin de las restricciones comenzará el 10 de marzo, a pesar de que los expertos advierten que la pandemia está lejos de haber terminado y piden justo lo contrario: seguir usando el tapabocas. Michigan, Mississippi y Louisiana también relajarán las medidas de contención.

El gobernador del Texas, Greg Abbott, anunció este martes que el estado sureño suspenderá el uso obligatorio de mascarillas, como parte de su decisión de levantar las restricciones contra el COVID-19 «al 100%» en los próximos días, a pesar de que la pandemia se ha cobrado la vida de 42,000 tejanos y los expertos advierten que está lejos de haber terminado.

Texas también eliminará los límites para la cantidad de personas que pueden estar en el interior de los comercios, dijo Abbott, quien hizo el anuncio desde un restaurante en la localidad de Lubbock. El republicano dijo que las nuevas reglas entrarán en vigencia el 10 de marzo.

«Ya es momento de reabrir Texas al 100%», dijo Abbott en el restaurante mexicano Montelongo’s, en la ciudad de Lubbock. «El COVID no ha desaparecido repentinamente», dijo, «pero los mandatos estatales ya no son necesarios».

“Eliminar los mandatos estatales no termina con la responsabilidad personal”, dijo desde el local abarrotado donde muchos de los que lo rodeaban no llevaban mascarillas.

La decisión llega en un momento en que un sinnúmero de gobernadores han comenzado a relajar las restricciones contra el coronavirus, a pesar de las advertencias de los expertos sanitarios, quienes continúan pidiendo al público que no deben de usar el cubrebocas.

Los gobernadores de Michigan, Mississippi y Louisiana también anunciaron este martes que suavizarán las restricciones para bares, restaurantes y otros negocios, al igual que el alcalde de San Francisco.

El gobernador de Mississippi, Tate Reeves, anunció que pondría fin a la orden de llevar mascarillas en todo el estado poco después del anuncio de Abbott. Reeves dijo que se hará efectivo tan pronot como el miércoles de esta semana.

«Nuestras hospitalizaciones y el número de casos se ha desplomado, y la vacuna se está distribuyendo rápidamente», tuiteó Reeves. «¡Ya es hora!»

En Texas, el fin de la orden sobre el uso obligatorio de mascarillas convierte al estado, con una población de 29 millones, en el más grande que dice adiós a una medida efectiva en la mitigación de contagios. Solo California y Nueva York han informado más muertes por COVID-19 que Texas.

Como el resto de Estados Unidos, Texas ha visto caer el número de casos y muertes por coronavirus. Las hospitalizaciones se encuentran en los niveles más bajos desde octubre. Pero solo poco más del 15% de la población estadounidense ha recibido al menos una dosis de la vacuna y la inmunidad colectiva está lejos de alcanzarse.

Las reacciones a la polémica decisión de Abbott comenzaron a suscitarse momentos después de su anuncio.

«Por el amor de Dios, no escuchen al gobernador. Usen sus mascarillas. Pidan comida para llevar. No asistan a fiestas. No vayan a bares. Sigan las pautas de seguridad en el trabajo. Respeten el distanciamiento social. El COVID no creen en la política», respondió al gobernador Abbott en Twitter el editor de noticias Obed Manuel, del Dallas Morning News.

«Mi padre murió en el hospital este fin de semana después de luchar por 3 meses contra el COVID», escribió. «Puedo decirles que el COVID es real porque lo he visto. Esta es una decisión imprudente que provocará más dolor».

El representante demócrata por Texas Henry Cuéllar, quien aseguró que él y su familia continuarán usando el cubrebocas, dijo que «una máscara es algo que se puede usar sin parar los negocios».

«Nosotros necesitamos hallar el balance entre la salud de la persona y la salud de la economía», dijo Cuéllar.

La jueza del condado de Harris (el más populoso del estado), Lina Hidalgo, calificó el anuncio como «idealista» y dijo que los picos en las hospitalizaciones se han producido precisamente después de que los estados relajaran las medidas contra el COVID-19.

El lunes, la directora de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, en inglés), Rochelle Walensky, advirtió enérgicamente contra los retrocesos que Abbott y Reeves estaban a punto de implementar.

«Estoy realmente preocupada por los informes de que más estados están retrocediendo con las mismas medidas de salud pública que hemos recomendado para proteger a las personas del COVID-19», dijo Walensky en la sesión informativa diaria de la Casa Blanca sobre la pandemia.

«Por favor, escúchenme con claridad», dijo Walensky. «En este nivel de casos con variantes (del coronavirus) en expansión, podemos perder por completo el terreno que ganamos con tanto esfuerzo».

El presidente, Joe Biden, se hizo eco de esas preocupaciones el martes, incluso cuando anunció que Estados Unidos tendrá suficientes dosis de la vacuna para cada adulto en el país hacia fines de mayo. «Esta pelea está lejos de terminar», dijo Biden. «Aunque celebramos la noticia … insto a todos los estadounidenses a que sigan lavándose las manos, mantengan distancia social y usen mascarillas».

Texas Amplía Pruebas del COVID a Comunidades Marginados

TDEM ya está trabajando con funcionarios locales en las ciudades de Dallas, San Antonio, Houston, El Paso, Abilene, el Valle del Río Grande, Coastal Bend, Laredo y Midland-Odessa.

El gobernador Greg Abbott anunció que la División de Manejo de Emergencias de Texas (TDEM) en coordinación con funcionarios locales, funcionarios de salud pública y oficinas de manejo de emergencias en ciudades de todo el estado para identificar y expandir rápidamente las pruebas COVID-19 en comunidades marginadas y minoritarias que han sido afectadas por el virus.

TDEM ya está trabajando con funcionarios locales en las ciudades de Dallas, San Antonio, Houston, El Paso, Abilene, el Valle del Río Grande, Coastal Bend, Laredo y Midland-Odessa para identificar y establecer pruebas de acceso directo y sin conductor. Y ya está en proceso el trabajar con otras ciudades para traer más sitios en línea en los próximos días. TDEM también está trabajando con los líderes locales para expandir las pruebas en áreas urbanas donde se han producido protestas a gran escala.

«A medida que el estado de Texas continúa mitigando la propagación de COVID-19, nos comprometemos a garantizar que todos los tejanos tengan acceso a las pruebas de COVID-19 sin importar dónde vivan», dijo el gobernador Abbott.

«Houston, la ciudad más poderosa de Texas»: Abbott

Así lo aseguro el Gobernador del Estado de Texas el día de hoy.

Un nuevo llamado a la necesidad de prepararse para prevenir desastres hizo este martes 19 de febrero el gobernador de Texas, Greg Abbott, al presentar su visión de gobierno frente a un grupo de empresarios de Houston.

Abbot resaltó la labor cumplida por la ciudad tras el paso del huracán Harvey, pero dijo que el siguiente paso es “hacer la preparación de desastres y la respuesta gubernamental una prioridad legislativa”.

El gobernador destacó el rol cumplido por Houston, ciudad de la cual manifestó que a pesar de haber sufrido el peor desastre de su historia reciente “sigue siendo el lugar más poderoso de Texas”.

Abbott dijo que una de sus prioridades es lograr un aumento salarial importante para los maestros del Estado.

El mandatario estatal agregó que otra de sus prioridades es la de limitar el aumento de impuestos a la propiedad, la cual afecta a los dueños de casas y apartamentos con menores recursos, especialmente, a los ancianos.