Sus Tarjetas de Crédito Ahora son más Caras

La Reserva Federal elevó su tasa de préstamo de referencia en un cuarto de punto este miércoles, con lo que las tasas de interés se ubican en su nivel más alto en 22 años.

Es el undécimo aumento de tasas desde que la Fed comenzó con los aumentos en marzo de 2022 para combatir la inflación, elevando la tasa activa a un rango de 5,25-5,5 %. Además, se produce solo un mes después de que el banco central hiciera una pausa para evaluar el estado de la economía después de las quiebras de tres bancos regionales desde la primavera.

Los funcionarios de la Fed estiman un aumento de tipos más este año, según su último conjunto de proyecciones. La desaceleración constante de la inflación en los últimos meses fue alentadora para los consumidores y las empresas estadounidenses, pero los funcionarios reiteraron en su declaración posterior a la reunión que «la inflación sigue siendo elevada» y que la Fed «sigue muy atenta a los riesgos» de la misma, lo que sugiere que sigue pendiente otro aumento de tasas.

«Al determinar el grado de endurecimiento adicional de la política que puede ser apropiado para devolver la inflación al 2% con el tiempo, el Comité tendrá en cuenta el endurecimiento acumulativo de la política monetaria, los retrasos con los que la política monetaria afecta la actividad económica y la inflación, y la política económica y los desarrollos financieros», dijo el comunicado de la Fed.

La inflación sigue siendo el foco número 1

El indicador de inflación preferido de la Reserva Federal —el índice de precios de gastos de consumo personal— aumentó un 3,8% en mayo respecto al año anterior, por debajo del 4,3% del mes pasado. Mientras tanto, la medida central bajó a 4,6% desde 4,7% durante el mismo período, que seguía siendo su nivel más bajo desde octubre de 2021. El Departamento de Comercio publicará las cifras de junio este viernes.

¿Por qué la Reserva Federal detuvo el aumento de tasas de interés?

Los funcionarios quieren conservar la opción de otro aumento de tasas en caso de que la inflación demuestre ser más resistente de lo esperado, pero el momento de ese aumento final sigue siendo un interrogante. Es posible que un segundo aumento nunca llegue y que la Fed decida pasar a la siguiente fase de su lucha contra la inflación, que sería mantener las tasas estables hasta que la inflación sea derrotada.

Los inversores son optimistas sobre el final de los aumentos de los tipos y las posibilidades de que la Fed logre un aterrizaje suave, un escenario en el que la inflación se deslice hasta el objetivo del 2% sin que la economía se deteriore drásticamente. Pero los funcionarios de la Fed insistieron en que dependerán de los datos y tomarán decisiones reunión por reunión. Los comentarios del presidente de la Fed, Jerome Powell, en el simposio económico anual de Jackson Hole el próximo mes podrían arrojar más luz sobre qué esperar en septiembre.

El mercado laboral se mantiene sólido

La Fed está muy atenta al estado del mercado laboral y si se está equilibrando mejor. Hay algunas señales en ese sentido. Las ofertas de trabajo cayeron desde su punto máximo el año pasado, la tasa de abandono se redujo a niveles cercanos a la pandemia y la proporción de trabajadores en edad productiva (aquellos entre 25 y 54 años) está en su nivel más alto desde 2002.

¿Por qué el mercado laboral mundial perderá millones de empleos?

La inflación se enfrió sin un fuerte repunte en la tasa de desempleo, pero queda por ver si esa situación continuará. La investigación sugiere que la Fed no tiene más remedio que desacelerar aún más la economía debido al papel persistente del mercado laboral ajustado en el aumento de los precios al consumidor, lo que podría provocar una recesión económica.

La importancia del aumento de los salarios

Los funcionarios están siguiendo de cerca las cifras de crecimiento de los salarios debido al papel que juegan los costos laborales en el aumento de los precios. Los costos laborales más altos son importantes para las empresas de servicios que requieren mucha mano de obra, como restaurantes y hospitales, y el remedio de la Reserva Federal para eso es eliminar parte de la demanda de la economía a través de aumentos de tasas. El efecto de los aumentos de tipos podría tardar al menos un año en impactar en la economía real más amplia, según algunas investigaciones. Ya pasó más de un año desde que la Fed empezó a subir los tipos.

Según los economistas, los datos que reflejan una economía fuerte podrían dar a la Fed suficiente margen de maniobra para hacer otro aumento. El Departamento de Comercio publica su primera estimación del producto interno bruto del segundo trimestre este jueves, y se espera que muestre que el crecimiento económico se mantuvo a medida que el gasto del consumidor se desaceleró drásticamente.

Sube el Costo del Dinero Para Frenar Inflación

El alza de medio punto porcentual fue la más elevada desde mayo del 2000. Y se anticipan varias más, lo que tendrá un impacto en lo que pagamos por nuestras deudas de tarjetas de crédito y los préstamos hipotecarios. ¿Estamos ante un posible frenazo o una recesión? Lo analizamos.

La Reserva Federal subió este miércoles su tasa clave de interés en medio punto porcentual, el alza más pronunciada desde el 2000 en medio de la lucha del banco central estadounidense contra la acelerada inflación.

Su decisión es súper importante para nosotros en este momento, porque sentiremos próximamente esa subida en nuestros bolsillos.

Por un lado, nos costará más endeudarnos con tarjetas de crédito y comprar una casa con un préstamo hipotecario (cuyas tasas se han disparado en algunos casos a máximos de una década). Por otro, lo que está haciendo la Reserva Federal con su tasa clave de interés y cuán exitosa sea en ello determinará si vemos finalmente un alivio en la inflación.

Los precios al consumidor llevan meses en un máximo de 40 años y, aunque ha habido algunas señales de que su escalada habría alcanzado ya su punto más alto, son un dolor de cabeza para la Reserva Federal.

A tal punto que el escenario más probable estima alzas que llevarán la tasa de referencia a casi 3% el próximo año —un largo recorrido desde el nivel cercano a cero durante la pandemia— y eso ha hecho que algunos economistas adviertan una recesión económica para ese entonces.

Por ahora, el gasto de los consumidores y las contrataciones de las empresas siguen en niveles sólidos. Eso aleja la probabilidad de una recesión en el corto plazo, pero a la misma vez genera preocupación porque son dos variables que alimentan la inflación. Y si la inflación no cede, más tendrá que subir la Reserva Federal su tasa de interés para controlarla.

Por eso expertos recomiendan que prepares tus finanzas y conozcas bien cómo esto repercute en tu bolsillo.

REVISA TUS TARJETAS DE CRÉDITO

El costo de endeudarse con una tarjeta de crédito es uno de los que más rápido suele moverse en línea con las decisiones de la Fed.

Las empresas que dan servicios de tarjetas de crédito suelen cobrarnos lo que se conoce como el ‘prime rate’ (que es una tasa ligada a la tasa referencial de la Fed) y un porcentaje adicional que ellas mismas determinan.

Ese porcentaje adicional lo deciden tomando en cuenta la puntuación crediticia de la persona. Un puntaje alto suele ser interpretado como una señal de confianza, mientras que uno bajo habitualmente es visto como una señal de alerta de que el cliente puede fallar en sus pagos.

Hacia la última semana de abril, el porcentaje promedio anual que se cobra en las tarjetas de crédito, o el APR por su sigla en inglés, se ubicaba en un 16.4 por ciento, según datos de Bankrate.

Expertos estiman que esa tasa se acercará al 17 por ciento con las subidas de la tasa referencial de la Fed, aunque para algunas personas con un puntaje crediticio bajo esa tasa podría elevarse a más del 20 por ciento.

También recomiendan que evalúes si te conviene transferir algún balance de tu tarjeta de crédito a otra que ofrezca un porcentaje de 0 por ciento por varios meses y que trabajes, si es necesario, en mejorar tu puntaje crediticio para que puedas acceder a tasas en las que debas poner menos dinero de tu bolsillo para saldar tu deuda.

EVALÚA CUÁNTO TE COSTARÁ UN PRÉSTAMO HIPOTECARIO

En estos préstamos se dan dos escenarios. Quienes tienen una hipoteca a tasa variable (que se mueve cada mes dependiendo del comportamiento de ese mercado) pueden verse afectados por tasas más altas cuando la Fed arranque su período de alza de tasas.

Para quienes tienen una hipoteca a tasa fija la situación es diferente, porque su tasa ya fue pactada con el banco o institución que le dio el crédito hasta que lo salde por completo.

Las tasas de los préstamos hipotecarias, a diferencia de las de las tarjetas de crédito, no suelen moverse al unísono con la tasa referencial de la Fed.

Para las hipotecas de tasa fija los bancos habitualmente toman en cuenta lo que sucede con unos bonos específicos del Tesoro: la deuda que emite Estados Unidos para repagar en 10 años. Se le conoce como los bonos del Tesoro a 10 años.

Las tasas de las hipotecas fijas a 30 años, por ejemplo, han estado subiendo en las últimas semanas y alcanzaron su mayor nivel en más de una década.

De acuerdo con la hipotecaria Freddie Mac, la tasa porcentual anual (APR por su sigla en inglés) de una hipoteca fija a 30 años subió a un promedio de 5.1 por ciento a fines de abril. La de una hipoteca fija a 15 años se elevó a 4.4 por ciento.