Robert Kennedy Considera Unirse a Trump

El tercero en discordia en la elección estadounidense está pensando en “unir fuerzas” con Donald Trump. El libertario Robert F. Kennedy Jr. considera la posibilidad de abandonar la contienda y plegarse al candidato republicano, a quien más le está restando votos rumbo a los comicios de noviembre. Nicole Shanahan, la abogada que RFK Jr. eligió como compañera del ticket sin partido, ha compartido en una entrevista el cálculo interno que podría favorecer a Trump en su batalla contra Kamala Harris. La pareja de independientes tiene un 5% de intención de voto, de acuerdo a sondeos publicados el fin de semana.

La abogada Shanahan, quien tiene una enorme riqueza gracias a su divorcio de uno de los fundadores de Google, Sergey Brin, asegura que la campaña independiente se encuentra en una encrucijada. “Una es mantenernos en la carrera y construir un tercer partido sólido, pero corremos el riesgo de permitir una presidencia de Kamala Harris y Tim Walz porque le quitamos algunos votos a Trump. O nos vamos ahora y sumamos fuerzas con Trump y explicamos a nuestra base por qué estamos tomando esta decisión”, aseguró la candidata a la vicepresidencia en una entrevista en el pódcast Impact Theory, subido a YouTube este martes. “No es una decisión fácil”, añadió Shanahan.

A Trump la oferta le ha sonado bien. En una gira por Michigan, uno de los siete Estados que definirá la elección, el candidato dijo a la CNN que “respeta” a Kennedy. “Es un tipo brillante. Es muy inteligente. Lo conozco desde hace tiempo. No sabía que estaba pensando en salirse, pero si decide abandonar, estaría abierto a ello (a recibir su respaldo)”, dijo el abanderado republicano, quien busca romper el gran momento que viven los demócratas tras el ascenso de Harris.

Shanahan, de 38 años, fue presentada en marzo pasado en un evento en Oakland (California). Ha sido un salvavidas financiero para la campaña de RFK, quien compite sin el apoyo del clan Kennedy. Con una fortuna que ronda los 1.000 millones de dólares, Shanahan, una apóstata de la élite de Silicon Valley, ha invertido “varias decenas de millones de dólares” en las aspiraciones presidenciales del hijo de Bobby Kennedy. Este esfuerzo, sin embargo, ha estado lleno de dificultades para lograr que el nombre de la pareja esté en las boletas de los 50 Estados.

“Los demócratas han gastado millones de dólares para descarrilarnos (…) Han metido gente en nuestra campaña para crearnos obstáculos. Nos han saboteado porque nos quieren mantener amarrados con una correa”, ha señalado Shanahan en la charla de casi una hora. La semana pasada, un juez negó la posibilidad de que el nombre de Kennedy aparezca en la boleta de Nueva York, al determinar que el político mintió al asegurar en su registro que era residente del Estado. La demanda fue iniciada por un grupo de simpatizantes de Joe Biden y del Partido Demócrata.

“Nos vamos a asegurar de que la gente que ha corrompido nuestra democracia no llegue al poder en noviembre”, dijo la abogada con tono amenazante. También lanzó críticas a Walz por haber exagerado sobre su papel en las fuerzas armadas, uno de los puntos de ataque que se han fijado los republicanos contra el gobernador de Minnesota. “No es un patriota, es alguien a quien le daba terror ser enviado a una misión (…) Utilizó su carrera militar para su beneficio político”, dijo Shanahan sobre su rival.

La candidata, sin embargo, mostró durante la charla estar en la misma sintonía que el polémico expresidente republicano, quien eligió como compañero de fórmula a un capitalista de riesgo que vivió en San Francisco, el senador por Ohio JD Vance. “Si se trata del futuro de este país, confío más en Trump, Peter Thiel y JD Vance, que en Harris y Reid Hoffman (el fundador de LinkedIn y un poderoso donador al Partido Demócrata)”, admitió.

Shanahan aseguró que el gran talón de Aquiles de la Administración Trump (2016-2020) fue su cercanía con la industria farmacéutica durante la pandemia de coronavirus. Ahora cree que el republicano ha corregido el rumbo, lo que acerca en posiciones con la campaña de RFK Jr., un famoso activista antivacunas.

“Trump ha mostrado un interés real en nuestras políticas sobre enfermedades crónicas. Lo toma en serio. Así que creo que eso nos obliga a sentarnos y hablar de si podemos hacer un cambio de verdad. Podríamos tener un partido de unidad que beneficie a los estadounidenses”, dijo Shanahan.

A finales de julio, The Washington Post publicó que RFK Jr. tuvo contactos en julio con la campaña de Trump. El independiente sugirió la idea de que estab dispuesto a abandonar la campaña y apoyar a Trump a cambio de obtener un puesto en el Gabinete de Trump de 2025. “Tengo un gran respeto por el presidente Trump y que esté en contacto conmigo. Nadie del Partido demócrata, de alto o bajo rango, me ha contactado en 18 meses. En cambio, han gastado millones para interrumpir mi campaña”, mencionó Kennedy en una entrevista el 22 de julio.

Los medios estadounidenses han señalado que la fórmula Kennedy-Shanahan ha hecho lo mismo con el Partido Demócrata. Condicionar la salida de la contienda a cambio de un trabajo. La candidata a la vicepresidencia asegura que esto es falso. “No hemos hablado con Harris. No se ha hablado de la posibilidad de apoyarla ni de la opción ni de la opción a un puesto en el Gabinete. Son Fake News”, le dijo al creador de contenido y empresario Tom Bilyeu, en la entrevista de este martes.

En la valoración del equipo independiente está también el mantenerse en la contienda. Shanahan confía en que Kennedy puede lograr el 5% de los votos a nivel nacional, un porcentaje que ayudaría a consolidar la organización como una tercera opción entre demócratas y republicanos. Los expertos, sin embargo, advierten que los candidatos sin partido terminan tradicionalmente por debajo de los números que tenían en los sondeos. Shanahan, no obstante, se mostró positiva con la posibilidad de llegar al número de sufragios que le permitiría obtener 13,5 millones de dólares en financiamiento público a la organización. “Eso es bastante. Podríamos posicionarnos en 2028 sin estar pagando millones de dólares para asegurar el acceso a la boleta. Nos podemos enfocar en hacer campaña”, declaró.

Shanahan se separó de Sergey Brin después de que saliera a la luz una infidelidad de ella con Elon Musk en 2021, de acuerdo a The New York Times. El acuerdo de separación la hizo merecedora de parte de la fortuna de su exmarido, quien tiene unos 145.000 millones de dólares. Ese capital financiero sirve ahora a la abogada en la que es su primera aventura política. Ante las escasas posibilidades de triunfo de este otoño, la novata se ha fijado como objetivo la elección de California de 2026, en la que desea cortar la continuidad demócrata en el poder. “Tenemos que eliminar eso de raíz”, ha dicho.

Nuevo Programa «Parole in Place» Ayudará a Migrantes a Obtener Documentos

El Servicio de Inmigración norteamericano inició el programa que permite a miles de indocumentados solicitar permanencia temporal y la residencia permanente. Quiénes califican y cómo aplicar

Este lunes 19 de agosto, el Servicio de Inmigración de EEUU (USCIS) ha dado inicio al nuevo programa “parole in place” que beneficiará a aproximadamente 500.000 personas, incluyendo cónyuges e hijastros no ciudadanos. El objetivo de este programa es permitir que miles de indocumentados soliciten el permiso de permanencia temporal y, eventualmente, la residencia permanente.

USCIS mencionó que los solicitantes deben llenar el formulario I-131F, disponible en línea a través de la cuenta de USCIS, cuyo costo es de USD 580, según indicó Univision 23.

Agregó que el Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos evaluará las solicitudes caso por caso y considerará si las personas cumplen con varios criterios, incluyendo haber vivido en EEUU durante al menos diez años antes del 17 de junio de 2024.

bogados de inmigración consultados por Univision 23 subrayaron que el “Parole in place no es el parole humanitario”, y explicaron que este programa está dirigido específicamente a “cónyuges e hijastros de ciudadanos estadounidenses”, diferenciándose claramente del parole humanitario que asiste a nacionales de Cuba, Venezuela, Nicaragua y Haití.

Enumeró los requisitos para calificar en el programa, detallando que los solicitantes deben estar presentes sin haber sido admitidos oficialmente en el país, haber estado físicamente en EEUU desde al menos el 17 de junio de 2014, y no representar una amenaza para la seguridad pública, nacional o fronteriza. Además, se debe evidenciar un matrimonio legalmente válido con un ciudadano estadounidense antes del 17 de junio de 2024.

Añadió que los hijos no ciudadanos de estos solicitantes cumplen con requisitos específicos, como haber estado físicamente presentes en Estados Unidos desde antes del 17 de junio de 2024 y tener una relación de hijastro calificada con un ciudadano estadounidense.

El proceso de solicitud debe iniciarse a través del formulario I-131F, que es exclusivamente en línea, y cada solicitante menor de edad debe crear su propia cuenta en la plataforma de USCIS. “No hay un formulario en papel para este proceso”, aclaró Univision 23.

Sobre la documentación requerida, Telemundo informó que se debe presentar evidencia como certificados de matrimonio, identificaciones con foto y pruebas de residencia continua en EEUU durante al menos diez años.

La vicepresidenta de la Federación Hispana, Julieta López, recomendó: “Eso significa hablar con tu iglesia, con tu trabajo, diferentes personas que pueden tener documentos que prueben que han estado aquí por 10 años seguidos”.

Para aquellos interesados en obtener más detalles, USCIS llevará a cabo sesiones informativas en inglés y español el mismo lunes de 15:30 a 16:30 horas (hora del este).

Servicios y asesoría

La Hispanic Federation ofrece apoyo adicional para responder preguntas sobre el proceso. Además, sugirieron que quienes tengan antecedentes de incidentes en la frontera, consulten con un abogado para recibir orientación legal y asegurar una solicitud correcta.

Este nuevo programa representa una oportunidad significativa para miles de familias que residen sin documentación en Estados Unidos, permitiéndoles regularizar su estatus migratorio y refrendar su vínculo legal con ciudadanos estadounidenses. La medida ha sido bien recibida y se espera que muchos aprovechen esta opción para regularizar su situación en el país.

En un contexto de políticas migratorias cada vez más complejas, el programa “Manteniendo a las Familias Unidas” ofrece una vía para que ciertos cónyuges e hijastros no ciudadanos de ciudadanos estadounidenses puedan solicitar un permiso de permanencia temporal en Estados Unidos.

Este programa, implementado como una medida humanitaria, establece criterios específicos para determinar quiénes pueden beneficiarse de este alivio migratorio.

Requisitos para cónyuges no ciudadanos

Uno de los principales grupos que pueden beneficiarse de esta medida son los cónyuges no ciudadanos de ciudadanos estadounidenses. Para calificar, el matrimonio debe haber sido legalmente válido y haberse realizado en o antes del 17 de junio de 2024. Además, el cónyuge debe cumplir con varios requisitos importantes:

Haber estado presente en los Estados Unidos sin haber sido admitido oficialmente ni haber recibido un permiso de permanencia temporal.
Demostrar una presencia física continua en el país desde al menos el 17 de junio de 2014 hasta la fecha de presentación de la solicitud.
No representar una amenaza a la seguridad pública, nacional o fronteriza.
Cumplir con otros criterios de elegibilidad establecidos por las autoridades migratorias.
Para que se otorgue este permiso, es fundamental que el solicitante pueda demostrar que existen razones humanitarias urgentes o que su presencia en el país representa un beneficio público significativo. La evaluación se realiza caso por caso, permitiendo que las autoridades tomen decisiones discrecionales basadas en las circunstancias individuales de cada solicitante.

Requisitos para hijastros no ciudadanos

Los hijastros no ciudadanos también pueden calificar para un permiso de permanencia temporal bajo este programa, siempre que se cumplan ciertos requisitos clave. Los hijastros deben ser solteros y menores de 21 años al 17 de junio de 2024.

Además, deben haber estado presentes continuamente en los Estados Unidos desde esa fecha y cumplir con la definición legal de hijastro de un ciudadano estadounidense, lo que implica que el matrimonio entre sus padres y el ciudadano estadounidense debe haber sido legalmente válido en o antes de la misma fecha, y antes de que el menor cumpla los 18 años.

Al igual que los cónyuges, los hijastros no deben representar una amenaza para la seguridad y deben cumplir con otros criterios específicos para ser considerados para la concesión de un permiso discrecional por razones humanitarias o de beneficio público.

Proceso de solicitud y tarifas

Para acceder a este proceso, los solicitantes deben presentar el Formulario I-131F, también conocido como la Solicitud de Permiso de Permanencia Temporal en el País para Ciertos No Ciudadanos Cónyuges e Hijastros de Ciudadanos Estadounidenses.

Este formulario debe presentarse exclusivamente en línea a través de una cuenta de myUSCIS. La tarifa de presentación es de USD 580, y no se aceptan formularios en papel ni se ofrece exención de tarifas bajo este proceso.

Es importante destacar que aquellos que obtengan el permiso de permanencia temporal en el país pueden, posteriormente, solicitar una autorización de empleo mediante el Formulario I-765. Sin embargo, este formulario no puede presentarse simultáneamente con el I-131F. Las tarifas para el I-765 varían: USD 520 si se presenta en formato impreso y USD 470 si se presenta en línea, con la posibilidad de solicitar una exención de tarifas para quienes califiquen.

Criterios adicionales y razones humanitarias

Más allá de los requisitos básicos, los solicitantes deben cumplir con ciertos criterios adicionales de elegibilidad. Estos criterios son evaluados rigurosamente por las autoridades migratorias, quienes consideran tanto el historial del solicitante como su situación actual en el país.

La demostración de razones humanitarias urgentes o de un beneficio público significativo es fundamental para que se conceda este permiso discrecional, ya que estas razones deben justificar la necesidad de la permanencia temporal en el país bajo circunstancias excepcionales.

Kamala Aventaja a Trump en Encuestas

Los sondeos muestran un panorama muy reñido en la disputa presidencial de EE.UU. con la nueva candidatura demócrata redibujando el mapa electoral que hasta hace un mes favorecía a los republicanos.

La carrera hacia las elecciones presidenciales en Estados Unidos presenta un escenario muy reñido que, por el momento, da una ligera ventaja a la vicepresidenta Kamala Harris, frente al expresidente y candidato republicano a la reelección, Donald Trump, según varios sondeos fechados este domingo.

La diferencia más significativa es la que ofrece la nueva encuesta publicada por ABC News/Washington Post/Ipsos, que da a la candidata demócrata una ventaja de 50 % frente al 45 % de apoyo que recibe Trump, si bien Harris no logra superar al expresidente (2017-2021) en temas clave como el manejo de la economía y la inmigración.

Según esta encuesta, Harris se impondría a Trump por un 50 % frente al 45 % del exmandatario entre todos los adultos y con un punto porcentual menos (49%-45%) entre los votantes registrados.

Y lo superaría también entre los posibles votantes por un 51 % frente al 45 % del magnate neoyorquino.

Revirtiendo los malos augurios de la candidatura Biden

La encuesta de la consultora Ipsos refleja, al igual que el promedio elaborado por la web FiveThirtyEight, lo reñido de estas elecciones presidenciales, en momentos en que la vicepresidenta Harris se prepara para aceptar oficialmente la próxima semana su nominación en la Convención Nacional Demócrata en Chicago.

En el promedio de FiveThirtyEight divulgado este domingo, Harris adelanta a Trump por un margen de 2,6 puntos porcentuales (46,4 % frente al 43,8 %).

Y de acuerdo con un agregado de encuestas publicado por The Hill/Decision Desk, Harris supera a Trump a nivel nacional por un estrecho 1,8 % (49 % de la demócrata frente al 47 % del republicano).

La dupla demócrata (Harris y su compañero de fórmula, el gobernador Tim Waltz), ha logrado revertir por el momento los malos augurios para su formación de cara a los comicios de noviembre que tenía el presidente estadounidense, Joe Biden, cuando figuraba como candidato.

Candidatura de Harris ha redibujado el mapa electoral

Harris llega a Chicago el jueves, impulsada por una serie de encuestas que muestran que ya ha redibujado un mapa electoral que favorecía fuertemente a Trump en las últimas semanas de la candidatura de Biden.

Harris lidera o empata con Trump en seis de los siete estados que se espera decidan las elecciones del 5 de noviembre, según el último informe publicado el miércoles por el Cook Political Report.

El analista electoral cambió sus calificaciones para los estados indecisos de Arizona, Georgia y Nevada a favor de Harris, después de que los tres estados estaban marcados como «republicano” a principios de julio, cuando Biden aún era el candidato.

Trump se prodigará esta semana próxima con una intensa agenda de actos de campaña para contrarrestar el foco mediático que en los próximos días se cernirá sobre la Convención Nacional Demócrata, donde se oficializará como candidata a la vicepresidenta Kamala Harris.

Multitudes de Eventos de Kamala Harris se han Vuelto Preocupación Para Trump

La renovada energía que Harris contagió a la campaña demócrata se está reflejando en las multitudes que acuden a algunos de sus actos. Sin embargo, Trump se niega a admitirlo y llegó a decir falsamente que dichas imágenes de miles de personas son modificadas con inteligencia artificial.

Tras sus críticas al origen racial e, incluso, la risa de la vicepresidenta Kamala Harris, una nueva cuestión está ahora en el punto de mira de Donald Trump y ya se convirtió en su más reciente motivo de ataque al Partido Demócrata: el número de personas que acuden a sus mítines.

El expresidente está teniendo dificultades para encontrar su equilibrio político y una estrategia efectiva frente a su nueva rival por la presidencia. Trump se mostraba tranquilo y confiado teniendo que competir con Joe Biden, pero tras la retirada del presidente, el ánimo y nerviosismo de los republicanos por los apoyos que está sumando Harris son más que evidentes.

Las encuestas de intención de voto reafirman este cambio en la carrera electoral, y la demócrata ya lidera ligeramente en el promedio de sondeos estadounidenses. Un estudio reciente de The New York Times y el Siena College muestra que Harris tiene una ventaja de cuatro puntos porcentuales en estados clave como Wisconsin, Michigan y Pensilvania.

Esos resultados se reflejan también en los actos públicos de Harris, donde se han venido observando miles de asistentes en sus últimos mítines que parecen haberse contagiado de una energía renovada por la candidatura demócrata, tras el desencanto vivido durante los últimos días de Biden en la carrera por la Casa Blanca.

Y este apoyo público de su rival está preocupando a Trump, que está optando de nuevo por una práctica ya recurrente en su estrategia: realizar afirmaciones falsas.

Ocurrió este domingo, cuando el expresidente aseguró sin pruebas que una foto que muestra a miles de personas reunidas la semana pasada para ver llegar a Harris al aeropuerto de Detroit era “falsa” y que su equipo de campaña usó inteligencia artificial para ocultar que “no había nadie”.

Su mentira quedó fácilmente al descubierto cuando todos los periodistas y medios que hicieron la cobertura de ese acto electoral publicaron imágenes y videos que mostraban la alta afluencia de público en el evento, que desmentían rotundamente las palabras de Trump.

De hecho, Trump también insinuó que Harris había fingido la presencia de multitudes en otros mítines y sugirió incluso que su candidatura presidencial fuera invalidada.

“Lo mismo está sucediendo con sus falsas ‘multitudes’ en sus discursos. Debería ser descalificada porque la creación de una imagen falsa es interferencia en las elecciones. ¡Cualquiera que haga eso, hará trampa en cualquier cosa!”, escribió en su red Truth Social.

Este lunes, la campaña de Harris confirmó que la famosa foto fue tomada por un miembro del equipo y que en ningún caso fue modificada con inteligencia artificial.

La agencia AP pidió que analizara la imagen a Hany Farid, profesor de la Universidad de Berkeley en California y especialista en ciencia forense digital y desinformación.

El experto usó dos modelos diseñados para detectar patrones de inteligencia artificial generativa y no encontró ninguna evidencia de manipulación.

Farid aseguró haber comparado varias versiones de la foto y que la única alteración que detectó fue un simple cambio de brillo o contraste, y tal vez una mayor nitidez. Agregó que muchas otras imágenes y videos del evento del miércoles pasado muestran el mismo entorno.

Trump comenzó a impulsar estas falsas teorías sobre la foto de la campaña de Harris unos días después de que el jueves fuera preguntado por periodistas sobre las multitudes que estaban asistiendo a los mítines de su rival demócrata. Trump aseguró que nadie atrae tanta gente como él.

«He hablado con las multitudes más grandes. Nadie ha hablado ante multitudes más grandes que yo», afirmó Trump en su primera conferencia de prensa desde que Harris se convirtió en la candidata presidencial demócrata.

Entonces decidió comparar, sin ningún fundamento, el público que asistió a su discurso frente a la Casa Blanca el 6 de enero de 2021 -cuando llamó a sus seguidores a protestar en el Capitolio tras la victoria electoral de Joe Biden- con la multitud que asistió al famoso discurso en el que Martin Luther King pronunció la frase I have a dream (“Tengo un sueño”) en 1963 en el Monumento a Lincoln de Washington DC.

Sin embargo, esto fue otra gran falsedad del republicano. Aproximadamente 250,000 personas asistieron a la marcha en la que King pronunció su discurso, según el Servicio de Parques Nacionales de EEUU. En cambio, al discurso de Trump en 2021 asistieron al menos 10,000 personas, según informó AP en aquel momento.

Por qué algunos republicanos recomendaron a Trump cambiar de estrategia electoral

Esta y otras afirmaciones obviamente falsas le valieron duras críticas a Trump por quienes creen que mentir no es la mejor estrategia para hacer frente a la candidatura demócrata. Algunos expertos llegaron a cuestionar la salud mental de Trump y apuntaron a un posible “deterioro cognitivo” tras sus últimos discursos repletos de falsedades y mensajes inconexos e incoherentes.

Incluso, algunos de los principales asesores y partidarios de Trump instaron al expresidente a centrar sus críticas en las políticas de Harris y hablar más sobre asuntos de la frontera y la economía del país.

«Dejen de cuestionar el tamaño de sus multitudes», recomendó el expresidente republicano de la Cámara de Representantes Kevin McCarthy en una entrevista este lunes con Fox News.

La campaña de Harris aprovechó este debate sobre las multitudes de cada candidato para atacar a Trump en un comunicado titulado “Nueve días desde el último evento de Trump en un estado clave”.

“(Trump) está muy enojado por el tamaño de las multitudes, afirmando que todo es falso y generado por inteligencia artificial. (¿Quizás si hiciera campaña también conseguiría multitudes?)”, se pregunta de forma irónica en el texto publicado por los demócratas.

“Como si a alguien le importara el tamaño de la multitud ni nada por el estilo”, dijo en tono burlón Tim Walz, candidato a vicepresidente por los demócratas, tras lo que recibió una fuerte ovación en un mitin reciente.

El historial de afirmaciones falsas pronunciadas por Trump

Aunque la cuestión de quién atrae a más público no es la única teoría infundada que Trump está esparciendo en las últimas semanas.

Por ejemplo, tras la salida de Biden de la carrera electoral -a quien aventajaba en las encuestas de intención de voto, especialmente tras la cuestionada actuación del presidente en el debate electoral-, ahora Trump asegura sin ninguna prueba que su exrival querría volver a la campaña, una posibilidad que él apoyaría dado que su apoyo era notablemente menor que el logrado hasta ahora por Harris.

“Le quitaron la presidencia a Joe Biden”, dijo Trump la semana pasada. “No soy su fan, como probablemente se habrán dado cuenta. Tuvo un debate duro. Pero eso no significa que se le haga a un lado así como así”.

«¿Cuáles son las posibilidades de que el corrupto Joe Biden, el peor presidente en la historia de EEUU, cuya presidencia le fue robada inconstitucionalmente por Kamabla, (…) arruine la Convención Nacional Demócrata e intente recuperar la nominación, comenzando por desafiarme a otro debate?», escribió el expresidente en redes sociales.

Durante meses, la edad y la aptitud física y mental de Biden para ser reelegidos fue una de las claves de la campaña republicana para atacar a su rival. Sin embargo, Trump parece ahora estar batallando para encontrar un flanco desde el que atacar con efectividad a Harris, a jugar por las últimas encuestas que le dan a ella la victoria.

Entre otras cuestionadas estrategias, Trump se centró en criticar aspectos como la propia risa de Harris, asegurando que ríe demasiado y en momentos inapropiados.

«Yo la llamo laughing Kamala (algo así como ‘Kamala la risueña’)», dijo Trump en un mitin en julio. «¿La han visto reír alguna vez? Está loca. Se puede saber mucho de alguien por su risa… Ella está loca».

También optó incluso por atacar su origen racial, al asegurar que repentinamente “se volvió negra” (sugiriendo que lo hacía para atraer votos de la población afroestadounidense) pese a ser hija de padre jamaicano y de madre india

«No sabía que era negra hasta hace unos años, cuando por casualidad se volvió negra y ahora quiere que la conozcan como negra. Así que, no sé, ¿es india o es negra?», dijo Trump.

Sin embargo, también en este caso, los medios tardaron poco tiempo en desmentir la afirmación de Trump y encontrar muchos momentos en el pasado en los que Harris ya se identificó consistentemente como una mujer negra a lo largo de su carrera política.

Tim Waltz Será Candidato a la Vicepresidencia Demócrata

La vicepresidenta Kamala Harris, candidata demócrata a la presidencia, ha elegido al gobernador Tim Walz de Minnesota como compañero de fórmula, elevando a un ex entrenador de fútbol americano cuyas raíces rurales, políticas liberales y sonadas críticas al expresidente Donald Trump lo han puesto recientemente en el mapa.

Walz, de 60 años, destacó en un campo de candidatos que tenían un mejor reconocimiento de nombre y que procedían de estados políticamente más ventajosos. Minnesota no es estado decisivo a nivel presidencial y es poco probable que resulte clave para una victoria de Harris-Walz.

Pero él saltó a la cabeza de la lista de Harris en cuestión de días, impulsado por sus apariciones en noticieros por cable donde dijo que los republicanos eran “raros”. La nueva y clara expresión de por qué los votantes deben rechazar a Trump se puso rápidamente de moda y puso los reflectores en el hombre campechano del Medio Oeste que la pronunció.

“Una de las cosas que más me llamó la atención de Tim es cuán tan profundas son sus convicciones en la lucha por las familias de clase media”, dijo Harris en una publicación en redes sociales en la que confirmó que lo había elegido. “Es personal”.

Walz estará con Harris en un mitin el martes por la noche en Filadelfia, su primera aparición como parte de la fórmula demócrata.

Walz aventajó a aspirantes más conocidos en parte porque Harris lo considera como una figura común y corriente de Minnesota, cuyo aspecto de padre de provincia es capaz de equilibrar los antecedentes de ella en la Bahía de San Francisco, según tres personas familiarizadas con el razonamiento de la vicepresidenta.

Se pensó que Walz, con su estilo franco, podría ser buen contrincante en un debate con el senador JD Vance, de Ohio, a quien Trump eligió el mes pasado como su compañero de fórmula. Y después de dos semanas de escrutinio y deliberaciones, Harris conectó mejor con Walz en comparación con las otras opciones.

Una y otra vez durante el proceso de selección, se había insistido en la lealtad como uno de los criterios más importantes para Harris. Esto sugiere que Walz la convenció de que la apoyaría no solo para ganar, sino también para ayudarla a gobernar.

En su mensaje en las redes sociales, Harris destacó los antecedentes de Walz como miembro de la Guardia Nacional y su etapa como profesor de secundaria, entrenador de fútbol y asesor de la Gay-Straight Alliance, un grupo de colaboración entre personas homosexuales y heterosexuales. También destacó sus esfuerzos como gobernador para colaborar con los republicanos en medidas bipartidistas al tiempo que impulsaba prioridades progresistas.

Walz está en su segundo mandato como gobernador y fungió como congresista 12 años, donde se desempeñó como el inusual demócrata del Medio Oeste que representaba a un distrito mayoritariamente rural. Sirvió durante 24 años en la Guardia Nacional del Ejército y fue profesor de Ciencias sociales en una secundaria de Mankato, Minnesota, antes de entrar en la política.

Aunque sus antecedentes iban a la perfección con los votantes moderados, sus políticas como gobernador han sido firmemente liberales, lo cual refleja lo que sus aliados llaman “populismo de las praderas”. Promulgó una lista de proyectos de ley demócratas sobre marihuana, licencia familiar renumerada, derecho al aborto y control de armas, algo que Harris destacó al anunciar su elección. Los republicanos lo califican de izquierdista vestido con ropa hecha en casa.

“Con el gobernador Walz, los demócratas obtienen toda la agenda política de la izquierda de alguien que a menudo parece que acaba de bajar de su puesto de cacería”, dijo Tim Pawlenty, el último republicano que fue gobernador de Minnesota.

Los republicanos no tardaron en señalar que planeaban atacar a Walz en particular por la violencia y los disturbios que se produjeron en Mineápolis tras el asesinato de George Floyd en 2020.

“Harris-Walz: la fórmula más izquierdista en la historia de Estados Unidos”, publicó el gobernador Ron DeSantis de Florida en las redes sociales el martes por la mañana. “Walz se quedó sentado y dejó que Mineápolis ardiera”.

Pero la compleja identidad política de Walz fue parte del atractivo para Harris, quien surgió de la política liberal de San Francisco y dio prioridad en su búsqueda de un compañero de fórmula a la apariencia de equilibrio ideológico que podría ayudarla a ganar votantes indecisos. Todos los finalistas de Harris para el puesto, incluido Walz, eran hombres blancos que habían ganado en zonas republicanas.

Esa lista incluía al gobernador Josh Shapiro de Pensilvania, quien era más conocido y más pulido, procedente de un estado clave en la contienda. El senador Mark Kelly, de Arizona, quien fue astronauta, llegó con un currículum impresionante y un profundo conocimiento de los problemas fronterizos de su estado, algo que podría haber sido beneficioso para mitigar algunos ataques republicanos.

Pero Walz, al ofrecer un mensaje sencillo y contundente sobre Trump y el Partido Republicano cuando los demócratas aún estaban procesando la salida del presidente Joe Biden y el ascenso de Harris, se transformó en solo dos semanas de un gobernador poco conocido a alguien que en enero podría ser el siguiente en la sucesión presidencial.

Después de que se conociera la noticia de la selección del Walz, Shapiro confirmó en las redes sociales que estaría en el mitin de Filadelfia el martes por la noche, respaldando a la candidatura y prometiendo trabajar “para unir a los habitantes de Pensilvania detrás de mis amigos Kamala Harris y Tim Walz y derrotar a Donald Trump”.

Walz nació y creció en la zona rural de Nebraska, y de joven se trasladó a Mankato, Minnesota, donde fue profesor de Ciencias sociales en secundaria y entrenó al equipo de fútbol de la escuela, que ganó un campeonato estatal. Se retiró de la Guardia Nacional del Ejército en 2005, cuando inició su primera campaña para un cargo público.

La historia del origen político de Walz parece sacada del guion de una película de Hollywood.

En agosto de 2004, acompañó a algunos de sus alumnos a un acto de campaña del presidente George W. Bush en Mankato. Según Walz, el grupo fue rechazado porque uno de los estudiantes llevaba una pegatina en la cartera a favor del oponente de Bush, John F. Kerry, senador demócrata por Massachusetts.

Walz se indignó y al día siguiente se apuntó como voluntario en la campaña de Kerry. A finales de año, Kerry había perdido, pero Walz estaba decidido a presentarse a las elecciones.

En 2006, con un equipo de campaña conformado en gran parte por sus exalumnos, Walz logró una victoria inesperada por un escaño rural que los republicanos habían ocupado durante 12 años. Sirvió seis mandatos en el Congreso antes de ganar su primera elección como gobernador en 2018. Desde entonces, su curul en la Cámara ha estado ocupado por un republicano.

“Algo que me encanta cuando estoy en Minnesota es que alguien se me acerque y me diga: ‘El entrenador Walz me dio Geografía’ o ‘Él cambió mi vida y su salón de clases fue un espacio seguro para mí como estudiante queer’”, dijo la vicegobernadora de Minnesota, Peggy Flanagan, quien fue voluntaria en la carrera al Congreso del Walz en 2006. “Así es como conducía su campaña”.

En el Congreso, Walz era considerado un demócrata moderado, que formó parte de las comisiones de Agricultura, Asuntos de Veteranos y Servicios Armados de la Cámara de Representantes. Durante años tuvo una positiva calificación de A de la Asociación Nacional del Rifle (NRA por su sigla en inglés). Sin embargo, cuando se postuló para gobernador en 2018, después del tiroteo masivo en Parkland, Florida, renunció al apoyo del grupo y pidió una prohibición de las armas de asalto. Walz dijo que fue influenciado a petición de su hija, y desde entonces la decisión le brinda aplausos en sus discursos.

“Acepto la patada en el trasero que medio la NRA”, ha dicho. “Pasé 25 años en el Ejército y cazo”.

En 2022, montado en una ola de ira demócrata por la decisión de la Corte Suprema que puso fin al derecho constitucional al aborto, Walz ayudó a que su partido tuviera control total de la legislatura de Minnesota por primera vez desde 2014.

Walz y los demócratas del estado hicieron gala de su nuevo poder. En 2023, promulgó la legislación que codifica el derecho al aborto en la ley estatal, legalizó la marihuana, aprobó nuevas leyes de control de armas, brindó almuerzo gratis a todos los estudiantes de las escuelas públicas, creó un programa de licencia pagada y proporcionó a los inmigrantes indocumentados acceso a las licencias de conducir de Minnesota.

A finales de año, asumió la presidencia de la Asociación de Gobernadores Demócratas, una posición que le permitía acceder a los donantes del partido en todo el país.

Durante la última visita de Trump a Minnesota, un estado que fue gobernado por última vez por un candidato presidencial republicano en 1972, Walz tuvo que lanzar contraataques preventivos.

Su descripción del expresidente y de su compañero de fórmula, el senador JD Vance de Ohio —“Estos tipos son simplemente raros— se propagó en internet. Casi de la noche a la mañana, la etiqueta de weird o “raros” fue adoptada por demócratas de todo el país, entre ellos Harris.

Kamal Harris Gana Candidatura Demócrata

La vicepresidenta Kamala Harris ganó la candidatura presidencial demócrata, anunció el partido este lunes, lo que la convierte en la primera mujer negra y la primera estadounidense de origen asiático en encabezar una candidatura de un gran partido.

El anuncio se produjo después de que el plazo para que los delegados emitieran su voto digital se cerrara a las 18.00 horas ET.

Harris obtuvo el 99% de los votos, según el Comité Nacional Demócrata.

Desde poco después de que el presidente Joe Biden pusiera fin a su campaña de reelección y apoyara a Harris, estaba claro que la vicepresidenta sería la única candidata seria. Era la única candidata que había reunido suficientes firmas de delegados para figurar en la papeleta, y el partido ya declaró el viernes que había obtenido suficientes votos para asegurarse la candidatura.

A continuación, el secretario de la convención certificará los resultados y Harris aceptará oficialmente la candidatura.

Harris también podrá elegir a su compañero de fórmula sin necesidad de una votación separada. Se espera que revele su elección el martes, antes de un mitin de campaña previsto en Filadelfia.

Kamala Harris ya Avetnaja a Trump

La campaña de la candidata demócrata cobró impulso por los apoyos de las mujeres y los votantes negros, según la nueva encuesta.

La vicepresidenta de Estados Unidos y candidata demócrata a la Casa Blanca, Kamala Harris, tiene una ligera ventaja de un punto a nivel nacional sobre el expresidente y candidato republicano, Donald Trump, ante las elecciones de noviembre, según una encuesta publicada este domingo (04.08.2024).

El sondeo, de la CBS y YouGov, señala que 50% de los votantes se inclinarían el 5 de noviembre por la actual vicepresidenta, frente al 49% por Trump.

La diferencia está situada dentro del margen de error pero da cuenta del impulso que ha cobrado la campaña de Harris, que el 21 de julio reemplazó al presidente Joe Biden en la carrera hacia la Casa Blanca.

El actual mandatario, que desistió de postularse a la reelección por preocupaciones sobre su edad y su estado de salud, se mantenía claramente por detrás de Trump en los sondeos.

Antes de que el presidente Joe Biden abandonara la carrera, estaba cinco puntos por debajo de Trump.

Harris cosecha sus mejores resultados entre las mujeres y también entre los votantes negros, que marcaron además una predisposición mayor de asistir a participar del acto eleccionario que la que habían manifestado en la encuesta anterior, este mismo mes.

Un mayor numeró de demócratas y votantes negros dijo en el sondeo que «definitivamente votarán», pero Harris tendrá que seguir generando entusiasmo, particularmente en los estados clave, para mantener la ventaja.

La exfiscal de distrito, exfiscal general de California y vicepresidenta de Estados Unidos, será la rival del controversial candidato republicano y expresidente Donald Trump, en los comicios presidenciales de noviembre. (02.08.2024)Imagen: Aaron Schwartz/CNP/picture alliance
Anunciará a su compañero de fórmula

El martes la vicepresidenta anunciaría a su acompañante en la fórmula demócrata, con quien de inmediato saldría de gira por siete estados clave.

De acuerdo a analistas políticos, se inclinaría por un hombre blanco con el fin de ampliar su base y compensar ciertos puntos débiles de su campaña.

Los nombres más citados por la prensa son los de Mark Kelly, senador por Arizona, Josh Shapiro, gobernador del estado clave de Pensilvania, y Tim Walz, el poco conocido gobernador de Minnesota.

La encuesta preguntó a unos 3.102 votantes registrados en todo Estados Unidos entre el 30 de julio y el 2 de agosto.

Brecha Entre Kamala y Trump se Acorta a Casi Empate

Los cambios entre grupos se anulan entre sí por ahora y Trump lidera estrechamente, pero hay un empate cuando se consideran candidatos como Kennedy Jr.

Después de todo el tumulto político del último mes, la última encuesta del jueves de The New York Times/Siena College está llena de resultados diferentes a los que hemos visto este ciclo, con una excepción: quién lidera la contienda presidencial.

Según la encuesta, Donald Trump aventaja a Kamala Harris por un punto porcentual, 48 a 47 por ciento, entre los votantes probables. Aparte del nombre del candidato demócrata, “Trump +1” es un resultado que podría haber salido de cualquier otra encuesta del Times/Siena antes del desastroso debate del presidente Joe Biden.

Pero, pregunta tras pregunta, hay cambios importantes respecto a sondeos previos del Times-Siena, todos ellos realizados antes de que la vicepresidenta Harris se asegurara prácticamente la nominación de su partido a la presidencia, antes de la convención republicana y antes del intento de asesinato de Trump. Incluso el déficit de un punto de Harris representa una mejora significativa para los demócratas en comparación con el déficit de seis puntos de Biden en nuestra anterior encuesta Times/Siena.

Estos acontecimientos hacen que sea difícil saber qué hacer con los resultados de las encuestas recientes, lo que incluye a esta que se acaba de publicar. La encuesta es un indicador útil de la situación actual de la contienda, pero no hay razón para confiar en que esa será la situación cuando todo vuelva a la calma.

Aunque el resultado general entre Harris y Trump puede parecer conocido, la encuesta está llena de señales de que todavía hay mucha perturbación en el aire político.

Trump alcanza un máximo de popularidad. En general, el 48 por ciento de los votantes registrados dicen tener una opinión favorable de él, por encima del 42 por ciento de nuestra encuesta previa (realizada después del debate, pero antes de la convención y el intento de asesinato). Es la cifra más alta en una encuesta del Times/Siena, que antes siempre situaba sus valoraciones favorables entre el 39 y el 45 por ciento.

Harris está subiendo. De hecho, sus índices han aumentado incluso más que los de Trump. En general, el 46 por ciento de los votantes registrados tienen una opinión favorable de ella, frente al 36 por ciento de la última vez que preguntamos por ella en febrero. Solo el 49 por ciento tiene una opinión desfavorable, por debajo del 54 por ciento en nuestra última medición. Y, lo que es más importante, su valoración favorable es mayor que la de Biden. De hecho, es superior a la posición del presidente en cualquier encuesta del Times/Siena desde septiembre de 2022, que casualmente fue la última vez que Biden lideró una encuesta nacional del Times/Siena entre votantes registrados.

El ambiente político nacional es un poco más prometedor. El porcentaje de votantes que afirmó que el país va por “buen camino” ha subido al 27 por ciento, lo que para nada representa un público optimista y sonriente, pero sigue siendo el más alto desde las elecciones de medio mandato de 2022. Los índices de aprobación y valoraciones favorables de Biden también han aumentado. Las filas de quienes odian por partida doble han disminuido: con Harris y Trump en la cresta de la ola, el número de votantes a los que no les gustan ambos candidatos se ha reducido al 8 por ciento, frente al 20 por ciento de las encuestas del Times/Siena en lo que va de año.

Con todos estos cambios subyacentes en las actitudes sobre los candidatos, no hay razón para suponer que este resultado familiar de Trump +1 signifique que la contienda ha vuelto al punto en el que se encontraba antes del debate. Por ahora, estos desarrollos se han anulado entre sí en su mayoría, pero es mucho más difícil determinar si eso seguirá siendo así dentro de unas semanas.

Según la teoría, las ganancias de Trump en el último mes se asemejan a un clásico “rebote de convención”, tal vez con la buena voluntad añadida de su supervivencia al intento de asesinato. Históricamente, los rebotes suelen desvanecerse, pero no necesariamente en su totalidad.

Lo que le ha ocurrido a Harris en la última semana no se ajusta en absoluto a ninguna teoría. Es de suponer que seguirá aprovechando el impulso de su nueva candidatura durante un tiempo, pero después todo es posible. Solo el tiempo dirá cómo reaccionará el público al escucharla —y a los ataques contra ella— en los próximos días y semanas.

A continuación, ofrecemos algunas conclusiones de nuestra encuesta.

Sí, a los votantes les parece bien el cambio en el Partido Demócrata

No creo que la encuesta Times/Siena haya encontrado nunca antes un 87 por ciento de votantes que estuvieran de acuerdo en algo, pero ese es el porcentaje de quienes dicen aprobar la decisión de Biden de apartarse de la contienda presidencial. Solo un 9 por ciento la desaprueba.

Los demócratas, por su parte, están preparados para Kamala. Casi cuatro quintas partes afirman que el partido debería nominarla para la presidencia, en comparación con el 14 por ciento que dicen que deberían nominar a otra persona. Un 27 por ciento algo más grande dice que el partido debe fomentar un proceso de nominación competitivo, pero el 70 por ciento afirma que el partido debe apoyar a Harris y rápidamente nombrarla candidata.

Una división demográfica más típica

Si eres un lector veterano de las noticias sobre encuestas, sabrás que llevamos casi un año monitoreando la debilidad de Biden entre los votantes jóvenes, negros, hispanos y de baja participación.

Pasará algún tiempo —quizá más de un mes, dada la posible volatilidad que se avecina— antes de que tengamos una buena idea de los contornos demográficos de esta nueva contienda. Pero, al menos en esta encuesta, el enfrentamiento Harris-Trump presenta una división demográfica diferente y más típica.

En la encuesta, Harris obtuvo mejores resultados entre los votantes jóvenes (de 18 a 29 años) e hispanos que Biden en cualquier otra encuesta de este año. Entre los no votantes, los resultados de Harris son mejores que los de Biden en todos los sondeos del Times/Siena realizados en el mismo periodo, excepto uno. Por el contrario, entre los votantes blancos de clase trabajadora y los mayores de 65 años a Biden le fue mejor en todas las encuestas anteriores del Times/Siena, excepto en una.

Por supuesto, se trata solo de una encuesta; los resultados de subgrupos individuales de una encuesta son ruidosos y están sujetos a un margen de error considerable. Pero hay buenas razones para pensar que estos cambios demográficos son parte de algo real. Los resultados coinciden con los de anteriores sondeos del Times/Siena. Y, más en general, están en consonancia con las fortalezas relativas esperadas de una mujer negra (que también tiene ascendencia india) de California de unos 50 años comparada con un hombre blanco de Scranton, Pensilvania, de unos 80 años.

¿Kennedy ayudará a Harris?

De hecho, Harris empató con Trump cuando se incluyeron todos los candidatos de partidos minoritarios junto con el independiente Robert F. Kennedy Jr.

Harris estaba en el 44 por ciento y Trump en el 43 por ciento (la ventaja de Harris se reduce a cero utilizando las cifras exactas, 43,5 a 43,2), con Kennedy en el 5 por ciento. Es el porcentaje más bajo de Kennedy desde que empezamos a incluirlo en nuestras encuestas.

Trump lideró en la contienda de dos candidatos —pero no en la multicandidato— porque ganó el apoyo de Kennedy por un margen de más de dos a uno. Es una muestra pequeña, pero es la mayor ventaja de Trump entre los partidarios de Kennedy en nuestras encuestas hasta este momento.

Es solo una encuesta, pero hay algo en la idea de que la presencia de Kennedy en la contienda podría ayudar más claramente a Harris. A lo largo de la contienda, la candidatura de Kennedy ha tendido a atraer más a la derecha que a la izquierda. En esta encuesta, por ejemplo, la valoración de Kennedy tiende a ser positiva entre los republicanos, pero negativa entre los demócratas. Aún así, le ha estado quitando de forma relativamente pareja electores al presidente Biden y a Trump, ya que ha conseguido ganar un número considerable de los votantes desproporcionadamente jóvenes descontentos con Biden.

Harris, sin embargo, no tiene necesariamente la misma vulnerabilidad. Si atrae lo suficiente a los votantes jóvenes y descontentos que normalmente se inclinan por los demócratas, Kennedy podría no arrebatarle tanto apoyo y empezar a restarle desproporcionadamente a Trump.

Biden Aclara su Renuncia

El presidente se dirige a la nación estadounidense desde el Despacho Oval, tres días después de anunciar su retirada de la carrera para la reelección: “La idea de América queda en vuestras manos”

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, justificó este miércoles su decisión de no presentarse a la reelección como la expresión de un elevado acto de generosidad y de sacrificio personal por el bien de sus compatriotas. “Venero este lugar, pero quiero más a mi país. La defensa de la democracia, que está en juego, es más importante que ostentar cualquier cargo”, dijo Biden en un sentido discurso a la nación televisado desde el Despacho Oval en el que también defendió los logros de su presidencia y fijó los objetivos para los seis meses que aún le quedan por delante en la Casa Blanca. “Me da fuerza y alegría trabajar por el pueblo estadounidense”, agregó. “Pero la sagrada tarea de continuar perfeccionando nuestra Unión no puede ir sobre mí. Trata de usted. De su familia. De su futuro. De ‘Nosotros, el pueblo”.

Biden presentó su relato de superación como la expresión del sueño americano de “un chico tartamudo de humildes orígenes” que en una de sus noches más difíciles traía un mensaje urgente: “Estados Unidos tendrá que elegir entre avanzar o retroceder, entre la esperanza y el odio, entre unidad y división”. “La historia está en vuestras manos”, afirmó. “El poder está en vuestras manos. La idea de América queda en vuestras manos. Sólo tenemos que mantener la fe, mantener la fe y recordar quiénes somos”.

Fueron poco más de 10 minutos llenos de referencias históricas, en los que quiso mirarse en el espejo de Roosevelt y Washington y no faltó la famosa definición de América de Benjamin Franklin: “Una república, siempre que sepamos mantenerla”. Si se echa a un lado, les dijo a sus compatriotas, lo hace precisamente con ese objetivo y con el de unir al país y no porque no se crea capaz de un segundo mandato. “Ha sido el gran privilegio de mi vida servir a esta nación durante más de 50 años”, sentenció sobre su larga carrera política.

Era la primera intervención formal del presidente desde que el pasado domingo anunció en la red social X su doble decisión de no empeñarse en mantener su candidatura a la presidencia y de elegir como su sucesora a la vicepresidenta Kamala Harris, a la que definió como una compañera de viaje “experimentada, dura y capaz”.

El discurso cerró uno de los capítulos más complicados de la larga trayectoria política de Biden. La renuncia-bomba había llegado al término de las larguísimas semanas que siguieron a su desastroso debate presidencial con el aspirante republicano, Donald Trump, tras el que arreciaron las dudas sobre las aptitudes físicas y mentales de un hombre de 81 años para salir reelegido en las urnas y desempeñar el que tal vez sea el oficio más difícil del mundo durante cuatro años más. Aquel 27 de junio en Atlanta se abrió también la veda para que destacados miembros de su partido, viejos aliados, medios de comunicación y analistas empezaran a sugerirle, primero, para exigirle, después, que reconsiderara su decisión. Finalmente, hicieron falta 24 agónicos días antes de que se rindiera a la evidencia.

“He decidido que la mejor manera de avanzar es pasar el testigo a una nueva generación”, dijo este miércoles Biden en un discurso de tono grave en horario de máxima audiencia para el que se hizo acompañar de su familia en el Despacho Oval. “Es el momento de dejar que se escuchen nuevas voces, voces mas jóvenes”.

El recurso a la “defensa de la democracia” fue constante, y una y otra vez pudo interpretarse como una referencia poco velada Trump; el presidente lleva un par de años identificando insistentemente a su contrincante como una amenaza existencial para el experimento estadounidense. Poco antes de la intervención presidencial desde la Casa Blanca, su contrincante presumió de haberlo echado. “Hace tres días derrotamos oficialmente al peor presidente de la historia de nuestro país, el corrupto Joe Biden”, afirmó el candidato republicano.

El demócrata trabajó en el texto durante los últimos tres días, 72 horas vertiginosas en las que Harris se aseguró los apoyos necesarios para ser designada como candidata presidencial en medio de una oleada de entusiasmo y de una lluvia de millones en donaciones. Al fervor que siguió a su renuncia, Biden ha asistido, como quien tiene el privilegio de presenciar su propio funeral político, desde su casa en la playa en Rehoboth, en su Delaware natal. Allí se refugió la semana pasada tras infectarse con covid, enfermedad de la que dio negativo este martes. Durante el que no cuesta imaginar como uno de los fines de semanas más duros de trayectoria, Biden estudió las encuestas desfavorables y ultimó su decisión, que mantuvo en secreto un reducido círculo, mientras escribía con la ayuda de dos de sus más estrechos asesores el texto de su adiós. De todo ese proceso no ofreció más detalles este miércoles.

Con su renuncia, Biden ceja en su empeño de perseguir su reelección, pero cumplirá con las obligaciones del resto de su presidencia, una decisión que ha recibido las críticas de los republicanos, que consideran que si no está para ganar unas elecciones, tampoco lo está para seguir ejerciendo ni un día mas como Comandante en Jefe.

“Durante los próximos seis meses me concentraré en hacer mi trabajo”, prometió Biden en el Despacho Oval. “Eso significa que continuaré reduciendo los costos para las familias trabajadoras y haciendo crecer nuestra economía. Seguiré defendiendo nuestras libertades personales y nuestros derechos civiles, desde el derecho a votar hasta el derecho a elegir”, añadió, en referencia al aborto.

Biden lo ha sido casi todo y durante casi todo el tiempo posible en Washington: senador, vicepresidente y, finalmente, tal y como fue su sueño desde niño, presidente de Estados Unidos, cargo al que llegó aupado por 81 millones de votos en un momento de extrema desunión y en mitad de una pandemia. Tal vez ninguno de esos encargos fue tan ingrato como el que le toca ahora. Biden ya es un lame duck president, un pato cojo que sabe que tiene los días contados, pero aún pelea por resultar relevante mientras el mundo ya ha pasado su página. No solo eso: todavía le queda un último empujón para asegurar su legado. Este miércoles prometió usar ese tiempo de descuento en combatir la epidemia de la violencia armada, en perseguir la reforma del Tribunal Supremo y en continuar trabajando en su iniciativa para acabar con el cáncer y en contribuir a la fortaleza de la OTAN.

Escenario trascendental

Históricamente, los discursos presidenciales desde el Despacho Oval marcan momentos trascendentales en los que los mandatarios hablan a sus compatriotas en mitad de serias crisis nacionales o para hacer anuncios de gravedad. Era la cuarta vez que Biden escogía ese solemne escenario para dirigirse al pueblo estadounidense. Dice mucho del extraordinario momento que está viviendo el país en este verano del descontento que dos de esas ocasiones hayan sido en el espacio de una semana y media: la anterior fue el 14 de julio, al día siguiente del atentado contra Donald Trump en un mitin en Pensilvania. Las otras dos veces fueron para hablar del ataque de Hamás en Israel del pasado 7 de octubre y para elogiar la aprobación de un acuerdo presupuestario entre ambos partidos que prolongó el techo de deuda hasta enero de 2025.

En 248 años de historia de Estados Unidos, cuatro presidencias acabaron prematuramente por asesinato. Otra, la de Richard Nixon, cayó bajo el empuje del escándalo del Watergate. La de Lyndon B. Johnson, la inmediatamente anterior, terminó por su propia renuncia. Es el precedente más directo en la memoria reciente al caso de Biden; Johnson también decidido no presentarse a un segundo mandato. Lo hizo acosado por la desastrosa guerra de Vietnam, por sus problemas de salud y por la sensación de desconexión con una nueva generación de votantes.

Tomó la decisión antes que Biden. El 31 de marzo de 1968, a poco más de siete meses de las elecciones, se la comunicó a sus compatriotas en un discurso televisado de 40 minutos que se les dijo que trataría sobre la marcha de la guerra. El bombazo que contenía en su interior llegó sin previo aviso. Johnson empezó acordándose de los “hijos de Estados Unidos en los lejanos campos de batalla”, se refirió a la convulsión interna del país y avanzó que había decidido dedicarse a “los maravillosos deberes de la presidencia”. Hizo una pausa, y, por un momento, decenas de millones de personas no supieron bien qué pensar. Entonces, añadió: “En consecuencia, no buscaré ni aceptaré la designación de mi partido para otro mandato”.

A esas palabras siguieron algunos de los meses más convulsos de la historia política estadounidense: los asesinatos del senador Robert Kennedy y del reverendo Martin Luther King, la agitada Convención Demócrata de Chicago, en la que los delegados se sacaron los ojos mientras a las puertas los manifestantes protestaban por la guerra y los antidisturbios se empleaban a fondo y, finalmente, la rotunda victoria de Richard Nixon sobre Hubert Humphrey en las urnas.

Parecen los demócratas decididos a evitar la repetición de ese precedente, invocado una y otra vez durante este año, en el que otra guerra, la de Israel en Gaza, dañó seriamente la imagen de Biden entre los votantes jóvenes y los electores árabes. El rápido cierre de filas en torno a Harris, que consiguió los delegados necesarios en poco más de 24 horas tras recibir el apoyo inmediato del presidente, hace pensar que la convención de este mes de agosto, que también se celebra en Chicago ―cosas de la historia que rima―, no será tan convulsa como aquella.

Este jueves, Biden amanecerá en la Casa Blanca en una posición a la que se resistió todo lo que pudo y tras dar un discurso que nunca quiso escribir. En el primer día del resto de su vida presidencial, tiene previsto verse con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, antes de marcharse a pasar el fin de semana a Camp David. No deja de ser paradójico que esa sea su primera tarea tras la histórica renuncia: un alto el fuego en Gaza es uno de los objetivos más urgentes de los seis meses que tiene por delante. Y lograrlo o no será clave para definir el lugar que la historia de Estados Unidos le tiene reservado al chico tartamudo de origen humilde que llegó a presidente.

Caravan de Migrantes Viene a EEUU Para Llegar Antes de Elecciones

Una caravana de unos 1.500 migrantes se dirige lentamente hacia la frontera entre México y Estados Unidos.

El grupo, formado en su mayoría por ciudadanos centroamericanos y sudamericanos, comenzó su viaje el domingo en Suchiate, un pueblo en el estado de Chiapas, en el sur de México, que hace frontera con Guatemala.

“Espero que Estados Unidos nos abra una puerta de bendiciones y nos ayude”, dijo a CNN en Español David Martínez, ciudadano hondureño.

“Somos personas que queremos vivir, mejorar nuestra familia, buscar un futuro mejor para nuestra familia. Pero no vamos por pereza ni nada”, dijo Martínez.

Entre el grupo de migrantes se encuentran bebés y niños, según un reporte.

“Nuestra gente es muy trabajadora; no somos criminales. Soy auxiliar de enfermería y en mi país no hay trabajo, no puedo estar en mi país haciendo nada. Mis hijos necesitan estudiar, ellos son el futuro”, dice Carmen Enríquez, migrante de Honduras.

Desde el martes por la mañana, el grupo se encuentra en Tapachula, ciudad del mismo estado que se ubica a unos 40 kilómetros del punto de partida.

Como forma de evitar tener que pagar a los contrabandistas, los migrantes a veces optan por viajar en grupos grandes, conocidos como caravanas, mientras caminan hacia el norte de México con el objetivo final de ingresar a Estados Unidos.