Se Acaba el Título 42, ¿Qué es?

Desde el próximo jueves se aplicarán las normas del Título 8 para las personas que llegan a la frontera sur del país.

El Titulo 42 fue invocado en marzo del 2020 cuando comenzaron a reportarse los primeros contagios por coronavirus.

Últimamente se habla mucho del «Título 42», que suele venir con imágenes de multitudes de personas cruzando o en las orillas del Río Grande, que divide a Estados Unidos y México. Como se espera que termine este jueves, podría ser un buen momento para entender de qué se trata.

¿QUÉ ES EL TÍTULO 42?

El Título 42 es parte de la ley de EEUU que se ocupa de la salud pública, el bienestar social y los derechos civiles. Otorga al gobierno federal la autoridad para tomar medidas de emergencia para mantener las enfermedades transmisibles fuera del país. Antes de que el presidente Donald Trump lo aplicara en 2020, solo se había usado en 1929 para evitar que los barcos de China y Filipinas ingresaran a los puertos de EEUU durante un brote de meningitis.

Trump invocó la ley cuando estalló la pandemia del coronavirus, aparentemente para evitar la propagación del COVID-19, pero su implementación permitió a la administración de Trump expulsar a los migrantes más rápidamente sin tener que considerarlos para asilo y ha continuado bajo la administración de Biden.

Biden Envía 1,500 Elementos Militares a la Frontera

La Casa Blanca movilizará a 1.500 soldados para tareas administrativas en vísperas del fin de la emergencia sanitaria

Tensión en la frontera con México. El Gobierno de Joe Biden movilizará a 1.500 soldados en activo a la zona ante el inminente fin de la emergencia sanitaria, el próximo 11 de mayo. La Administración cree que la desaparición del título 42, que expira con la declaratoria de emergencia de la pandemia, incrementará los cruces ilegales a más de 10.000 cada día, según cifras oficiales. Funcionarios de la Casa Blanca argumentan que los militares se encargarán de tareas administrativas para descargar a la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CPB, por sus siglas en inglés), que actuará sobre el terreno para contener el flujo migratorio. Las fuerzas armadas estarán en la zona por 90 días, aunque la estancia puede ser extendida de ser necesario.

La noticia se ha dado a conocer a través de funcionarios de la Administración que han solicitado el anonimato. Las fuentes han asegurado a la agencia Associated Press que las tropas no arrestarán a inmigrantes. El Departamento de Seguridad Interior (DHS, por las siglas en inglés) ha insistido en esto en un comunicado. “El personal del Departamento de Defensa no ha llevado a cabo jamás acciones de cuerpos de seguridad y no lo hará, ni interactuará con migrantes o personas bajo la custodia de DHS”, indica el mensaje.

Los militares se enfocarán en procesar los datos de los detenidos, detectar los puntos que necesitan atención de la Patrulla Fronteriza y dar apoyo en almacenes de CBP. Seguridad Interior afirma que soldados han trabajado en la región binacional desde 2006. El anuncio de esta mañana, no obstante, eleva el perfil militarizado de la frontera. Unos 2.500 integrantes en activo de la Guardia Nacional ya se encuentran desplegados a lo largo de los nueve sectores de la línea. Un total de 4.000 elementos militares estarán en la zona durante el próximo mes y medio hasta que sean sustituidos por contratistas civiles.

La medida ha provocado críticas de los sectores simpatizantes del partido demócrata. “Desplegar tropas sugiere una preocupante falta de preparación para esta transición. DHS tuvo más de dos años para planear la extinción del título 42. En cambio, esta situación ha escalado en una emergencia mayor que llevará, de nuevo, tropas a nuestras comunidades”, aseguró Andrea Flores, una abogada experta en política migratoria que trabajó en el equipo de transición de Biden y la vicepresidenta Kamala Harris. La organización no gubernamental Al Otro Lado considera que el Ejecutivo, en lugar de militarizar, debería incrementar los recursos a las comunidades “para dar la bienvenida con dignidad a los solicitantes de asilo”.

La asesora de Seguridad Nacional del Gobierno de Biden, Elizabeth Sherwood, sostuvo una reunión para discutir las implicaciones del fin del título 42 con el presidente, Andrés Manuel López Obrador, así como los secretarios de Gobernación (Interior), Relaciones Exteriores, Defensa y Marina. “El presidente Biden tuvo la cortesía de enviar una gente cercana para explicarle esto directamente al presidente de México”, dijo el titular de Exteriores, Marcelo Ebrard, a los medios.

Ebrard dijo que Estados Unidos tiene contemplado conceder más de 300.000 visas por razones humanitarias a personas de Venezuela, Nicaragua y Haití, así como 100.000 permisos para ciudadanos de Guatemala, El Salvador y Honduras. El funcionario no precisó si México asumió nuevos compromisos para la contención de los flujos migratorios a cambio del acuerdo. Sí dijo que el país latinoamericano pidió que se mantuvieran abiertos los canales para la inmigración regular y que continuara la apuesta de invertir en Centroamérica para aminorar los factores de expulsión. “No se puede decir nomás ‘vamos a contener que lleguen migrantes’ y no tener opciones”, comentó el funcionario, informa Elías Camhaji desde Ciudad de México.

El Ejército ya había sido enviado a la frontera en tiempos de Donald Trump. El expresidente republicano, quien hizo del control fronterizo una de sus banderas, desplegó a 800 elementos de la Guardia Nacional en octubre de 2018. El anuncio se hizo una semana antes de las elecciones intermedias del 6 de noviembre, con la esperanza de cosechar votos de la base republicana y ante el incremento de las caravanas de miles de migrantes que salían de Honduras y Centroamérica. La zona ya tenía presencia de fuerzas militares. Más de 2.000 uniformados ya realizaban trabajos de vigilancia.

La decisión de Biden se da en medio de una preocupación creciente por lo que puede ocasionar el fin del título 42. Este, una herramienta instaurada por Trump en la pandemia, permitía al Ejecutivo deportar rápidamente a los inmigrantes ilegales. El ocaso de la norma, que no tiene viabilidad sin la emergencia sanitaria, hace que el Gobierno vuelva a depender del título 8. La medida endurece las consecuencias tras las deportaciones, que pueden acarrear a los detenidos cargos penales o una prohibición de hasta cinco años para entrar a Estados Unidos. Alejandro Mayorkas, el encargado de Seguridad Interior, ha insistido en que el tránsito al norte debe hacerse solicitando un permiso a través de una aplicación y esperando en otros países, como Guatemala o Colombia, la luz verde para continuar el trayecto.

El fin del título 42 ha hecho que varias poblaciones fronterizas lleven a cabo asambleas para discutir cómo prepararse ante el eventual incremento de inmigrantes en sus comunidades. La ciudad de El Paso, en Texas, decretó el domingo el estado de emergencia y abrió dos albergues ante la expectativa. El alcalde, el demócrata Oscar Leeser, se ha encargado de impulsar el mensaje que sale de Washington: “No vamos a abrir la frontera. No está abierta hoy y no lo estará el 12 de mayo”.

El republicano Greg Abbott, el gobernador de Texas y uno de los más radicales en materia de migración, ha endurecido la vigilancia fronteriza. La Guardia Nacional de Texas ha puesto más barreras y alambre de púas para frenar el paso de los inmigrantes. También han enviado a la ciudad de Brownsville medio centenar de vehículos tácticos militares tipo Humvee.

Cientos Intentan Cruzar Frontera en Estampida

Grupos de migrantes se aglutinaron en un puente que une a Paso del Norte con Santa Fe en espera que les dieran paso libre.

Cientos de personas migrantes, mayoritariamente venezolanas, intentaron cruzar este domingo (12.03.2023) en estampida hacia territorio de Estados Unidos por uno de los puentes fronterizos ubicados en la mexicana Ciudad Juárez (norte), desesperadas por conseguir asilo en ese país.

Los grupos sudamericanos se congregaron alrededor del mediodía (18H00 GMT) en el puente internacional Paso del Norte-Santa Fe, uno de los cinco que comunican Juárez con suelo estadounidense, atraídos por el rumor de que se les daría paso libre por la celebración de un supuesto «Día del Migrante».

«Cientos de personas ingresaron hasta la mitad del puente donde cerró desde luego, por protocolo, la autoridad americana [estadounidense]», relató Enrique Valenzuela, coordinador del Consejo Estatal de Población de Chihuahua, estado donde se ubica Ciudad Juárez, quien presenció el incidente.

«Insistían en ingresar y (…) agentes de seguridad americana salvaguardaron esa línea», añadió Valenzuela, quien atiende a la numerosa población migrante que llega hasta esta ciudad, vecina de las estadounidenses El Paso, en Texas, y Santa Teresa, en Nuevo México.

Imágenes difundidas en redes sociales muestran el momento en que un grupo de migrantes -incluidas madres con niños- corren a toda prisa por el puente dando gritos como «¡A USA!».

«Todos corrimos y nos habían puesto una barrera ahí con alambres. Nos tiraron gases lacrimógenos y todo. Y bueno bajaron muchos [del puente]», dijo Jackson Solís, un venezolano de 23 años, parado del lado mexicano del puente que cruza sobre el río Bravo.

El joven ya lleva seis meses esperando conseguir una cita para solicitar asilo en Estados Unidos, donde quiere ir a trabajar, y que solo pueden tramitarse mediante la aplicación móvil llamada CBP One. Solís contó a la agencia AFP que duerme en la calle pues no tiene dinero para pagar un alojamiento y que, para comer, depende de la caridad de las personas.

Algunas madres con niñas y niños expresaron desesperación pues aseguran que hubo quienes sí lograron cruzar, pero que se trató en su mayoría de hombres viajando solos.

El Gobierno de Joe Biden propuso en febrero de 2023 nuevas restricciones al asilo de personas migrantes que lleguen por la frontera con México, y que las obligarían a solicitarlo en países por los que transitan o mediante las citas en línea.

Estas medidas se anuncian en momentos en que el mandatario demócrata es acusado por la oposición republicana de haber perdido el control de la frontera, con más de 4,5 millones de personas migrantes interceptadas en esa región desde que asumió el cargo.

Gobierno de Biden Considera Detener a Familias al Cruzar Frontera

Los funcionarios citados por diversos medios señalan que los funcionarios de la administración están considerando varias opciones mientras se preparan para el fin del Título 42.

El gobierno de Biden está considerando reactivar la política para detener a las familias migrantes que cruzan la frontera de forma ilegal, según publicaron diversos medios citando a funcionarios del gobierno.

Los funcionarios citados por la cadena CNN señalan que se trata de una de varias opciones que los funcionarios de la administración están considerando mientras se preparan para el fin del Título 42, la orden que, con motivos de salud pública, permite deportar de forma inmediata a ciertos inmigrantes.

“No se han tomado decisiones. La Administración continuará priorizando el procesamiento seguro, ordenado y humano de los migrantes”, dijo un portavoz de Seguridad Nacional a CNN.

El funcionario citado por CNN dijo que la administración está analizando múltiples opciones sobre cómo manejar a las familias migrantes y no todas involucran la detención familiar.

Otra fuente citada por la cadena de televisión dijo que de realizarse las detenciones familiares, solo se limitarían a una pequeña cantidad de días.

Uno de los funcionarios citados por el diario The New York Times señaló que que la administración seguiría el acuerdo judicial que establece un límite de 20 días para detener a las familias, en lugar de retenerlas durante semanas o meses.

Otra opción sería continuar con la práctica vigente ahora: liberar a las familias en el país, donde serían rastreadas y requeridas para presentarse ante una oficina de campo de Inmigración y Control de Aduanas, dijo el funcionario.

La decisión podría tomarse a pesar de que fue una práctica a la que el presidente Joe Biden puso fin cuando asumió el cargo porque aseguró que buscaba un sistema más humano y criticaba las «duras políticas» de su predecesor, el expresidente Donald Trump.

De elegir esa opción, la administración de Biden enfrentaría serios obstáculos logísticos como por encontrar espacio para albergar a las familias. También sería necesario configurar las instalaciones para proporcionar programas educativos y áreas de juego. Los espacios que antes albergaban familias ahora se utilizan para adultos solteros.

Los funcionarios temen un aumento en el flujo de migrantes en la frontera después del 11 de mayo, cuando expire una medida.

Fracasa intento republicano por debatir un plan migratorio duro de seguridad fronteriza

El controvertido proyecto de ley requiere que el DHS “suspenda la entrada de cualquier indocumentado (ciudadano no estadounidense sin documentos de entrada válidos)» durante cualquier período en el que el este departamento no pueda detener a dicha persona o deportarla a un país extranjero contiguo a Estados Unidos.

La bancada republicana de la Cámara de Representantes no logró los votos necesarios la semana pasada para avanzar una iniciativa que, de ser aprobada, ordenaría al secretario del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) prohibir unilateralmente la entrada de indocumentados a través de cualquier punto de entrada al país.

El proyecto, denominado Ley de Seguridad y Protección Fronteriza (Border Safety and Security Act) y liderado por el representante Chip Roy, republicano por Texas, fue presentado sin éxito el año pasado y esta vez contaba con el respaldo de otros 58 republicanos.

El intento se desplomó “después de la reacción violenta” del ala moderada republicana en la Cámara Baja, reportó el diario The Washington Post. La caída del proyecto puso en compás de espera la promesa del presidente de la Cámara Baja, Kevin McCarthy, quien durante su campaña de reelección y durante las negociaciones para ocupar el liderazgo, prometió endurecer las leyes de inmigración.

Qué dice el plan migratorio

El controvertido proyecto de ley requiere que el DHS “suspenda la entrada de cualquier indocumentado (ciudadano no estadounidense sin documentos de entrada válidos)» durante cualquier período en el que el DHS no pueda detener a dicha persona o devolverla a un país extranjero contiguo a Estados Unidos.

El plan agrega que, un estado (de Estados Unidos) puede demandar al DHS para hacer cumplir este requisito.

La ley actual, excepto en el caso de ciudadanos originarios de Cuba, Haití, Nicaragua, Venezuela y Ucrania (quienes solo pueden entrar por medio de un patrocinador autorizado), estipula que los extranjeros que llegan a la frontera sin documentos de entrada generalmente están sujetos a una expulsión expedita.

Sin embargo, si se determina que dicha persona tiene un temor creíble de persecución, por lo general está sujeta a detención mientras se procesa su solicitud de asilo en la Corte de Inmigración. Y en muchos casos quienes no representan una amenaza a la seguridad pública o nacional de Estados Unidos son liberados bajo el Programa Alternativo e Detención (ATD).

El proyecto de ley también autoriza al DHS a suspender el ingreso de indocumentados si el DHS determina que dicha suspensión es necesaria para lograr el control operativo sobre dicha frontera. Las dos herramientas disponibles por el gobierno para expulsar son el Título 42 (por razones de seguridad sanitaria debido a la pandemia del COPVID-19) y el Título 8 de la Ley de Inmigración (por razones de inadmisibilidad).

El quiebre de las negociaciones migratorias

El fracaso en las negociaciones dentro de la bancada republicana se debe a las preocupaciones expresadas por el ala moderada, quienes han expresado que la ley procura proteger a aquellos inmigrantes y menores no acompañados que huyen de sus países de origen para proteger sus vidas.

Entre quienes rechazan el plan de Roy se encuentra el congresista Tony González (Texas), dice The Washington Post. Y advierte que, en el caso que el proyecto vuelva a ser presentado y enviado al pleno, la mayoría republicana comandada por McCarthy cuenta con un estrecho margen de solo cuatro votos para aprobar una ley, una ventaja que por ahora se limita a dos debido a que otro republicano, Greg Steube (Florida), se reportó enfermo tras una caída la semana pasada, indicó el periódico.

El plan de Roy, además de sortear los votos de los comités de inmigración y seguridad nacional de la Cámara Baja, debe contar con al menos 218 votos en el pleno, donde los republicanos tienen 222. Sin el respaldo del ala moderada o los demócratas, el proyecto será desestimado. Hasta ahora ningún demócrata ha mencionado su apoyo.

El ala dura republicana de la Cámara de Representantes presiona para que el Congreso revierta la política migratoria del presidente Joe Biden y restablezca la política migratoria de ‘tolerancia cero’ del expresidente Donald Trump, basada en la prohibición total de ingreso de indocumentados, incluyendo a quienes vienen en busca de asilo, hasta la criminalización de la estadía indocumentada.

Un plan migratirio “antiético”

No solo republicanos moderados y demócratas rechazan el plan encabezado por Roy. El diario dijo que el obispo católico de El Paso, Texas, Mark J. Seitz, quien preside del comité de migración de la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos (USCCB), envió una carta al presidente de la Cámara indicando que el proyecto de ley “es antiético a la moral de los principios de nuestra nación”.

“Si se promulga esta legislación impediría el acceso a la protección de las personas vulnerables en movimiento, incluidos los solicitantes de asilo, los niños no acompañados, las víctimas de tortura y las víctimas de la trata de personas que huyen de situaciones que amenazan sus vidas”, escribió el religioso.

Una semana antes, Seitz se reunió en El Paso con el presidente Biden durante el viaje del mandatario a esa zona, la primera desde que asumió el control de la Casa Blanca. En ese encuentro el obispo le dijo al mandatario que era importante que entendiera que “realmente podemos enfrentar los desafíos de la migración de una manera que sea fiel a nuestros valores, y que podemos hacerlo con compasión y dignidad”.

Durante una entrevista con la revista Commonweal respecto al Título 42 y la reciente ampliación de la herramienta para deportar de manera expedita a ciudadanos originarios de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela que traten de entrar indocumentados y no bajo un programa humanitario de patrocinio, Seitz dijo que la ampliación de una regla “implementada por la Administración anterior con el pretexto de que los inmigrantes traen enfermedades es injustificable”.

“Probablemente sea ilegal, y espero que la Corte Suprema lo vea de esa manera. Pero como sacerdote, debo ser claro: el Título 42 y políticas como esta son despiadadas y literalmente están matando a las personas al obligarlas a cruzar el desierto y ahogarse en el río. Los niños se están muriendo. La muerte no puede ser una parte aceptable de los gastos generales de nuestra política de inmigración. ¿Nos hemos vuelto tan insensibles? Hay alternativas”, indicó.

Procedimiento anormal

Una de las razones argumentadas por el ala moderada republicana para rechazar el proyecto de Roy se debe al proceso utilizado esta vez para debatir y aprobar proyecto de ley. El liderazgo intentó llevarlo de inmediato a votación en vez de someterlo a la consideración de comités, de acuerdo con el orden regular de debates.

El Post dijo que los republicanos inconformes indicaron que el Comité de Reglas debe establecer primero los parámetros de debate para un proyecto de ley antes de que llegue al pleno. Pero que el plan de Roy no pasó por este requisito. Y señalaron además que la iniciativa debería pasar ahora al Comité de Seguridad Nacional antes de ser nuevamente debatido.

Mientras el plan de Roy trata de recuperar terreno y regresar, esta vez por medio de un comité, otro grupo de republicanos moderados de la Cámara, entre ellos la congresista María Elvira Salazar (Florida), buscan el momento y el espacio para reintroducir un plan migratorio que fue rechazado en 2021 por falta de apoyo bipartidista.

Una fuente de la oficina de Salazar dijo a Univision Noticias que estaban “trabajando” en el tema para realizar modificaciones. “Aún estamos esperando el texto final del proyecto de ley”, indicó.

El plan original, denominado ‘Dignidad’, fue respaldado esa ocasión por el senador republicano Lindsey Graham (Carolina del Sur). La iniciativa incluye una ruta para que inmigrantes indocumentados que llevan al menos cinco años en el país, carezcan de antecedentes criminales y paguen una multa, reciban una «visa de dignidad» por 10 años.

El permiso de estadía legal les permitirá trabajar en el país, pero no especificó si al final de ese tiempo de permanencia incluirá un camino a la green card o la ciudadanía.

La principal diferencia entre el proyecto de Roy y el de Salazar es que el primero se enfoca en aquellos inmigrantes que no están en Estados Unidos y buscan entrar al país. El segundo se refiere a los 12 millones de indocumentados que viven en Estados Unidos, algunos desde hace décadas y carecen de antecedentes criminales.

Conservadores no pierden la esperanza

Mientras las distintas facciones republicanas se ponen de acuerdo en el tema, los moderados insisten en que cualquier cambio no debe dejar de lado el alma de Estados Unidos como una nación de inmigrantes.

“Nosotros opinamos que bajo las leyes actuales de asilo, refugio o de Estatus de Protección Temporal (TPS), por ejemplo, los individuos tienen derecho a presentarse y hacer su caso”, dice Wadi Gaitán, un analista conservador. “Quitarle esa oportunidad va en contra de lo que nosotros somos”.

Gaitán dijo además que “los conservadores opinamos que uno puede ser proseguridad fronteriza y proinmigrante, no tenemos que ser de uno u otro bando. Queremos orden, pero no queremos cambiar la ley y aprobar otra donde no se permite que un individuo pueda venir huyendo para salvar su vida y cerrarle la puerta sin escucharlo. Creemos que debe dejarse continuar el actual proceso de asilo en la frontera”, agregó.

Los conservadores también recordaron que en el Senado está pendiente de debate un proyecto de ley bipartidista encabezado por los legisladores Kyrsten Sinema (independiente, exdemócrata por Arizona) y Thomas Tillis (republicano por Carolina del Norte).

El plan, que iba a ser incluido en la ley de gastos que se conoce como ‘ómnibus’, propone invertir en la contratación de nuevos agentes fronterizos, continuar con la construcción del muro iniciado durante el gobierno de Trump, aumentar los salarios de los agentes actuales para evitar renuncias, aumentar la dotación de agentes de asilo del servicio de inmigración en la frontera, destinar nuevos fondos a la seguridad fronteriza, clarificar el proceso de asilo y legalizar la permanencia de unos 2 millones de dreamers.

El plan, sin embargo, advierte que “no recompensará a las familias de los beneficiarios”. Es decir, los dreamers que regularicen sus permanencias no podrán patrocinar a sus padres y otros para los beneficios de inmigración, excepto en el caso de un cónyuge o hijos menores de edad solteros.

Fuente: JORGE CANCINO

Migrantes Venezolanos son Desalojados en Frontera Mexicana

Las autoridades de México desalojaron este domingo el campamento improvisado de migrantes venezolanos a orillas del río Bravo, en Ciudad Juárez.

Las centenares de carpas estaban instaladas en la zona de frontera entre México y Estados Unidos y alojaban a los migrantes que querían cruzar a suelo estadounidense.

Según prensa local, la razón detrás de la decisión del desalojo fue el riesgo de incendio que, para la Protección Civil Estatal de México, existía debido a las fogatas que los migrantes encienden cerca de las casas de campaña para mitigar el frío.

Pero no fue un proceso sencillo, tal y como se ve en las imágenes de agencias. Se observa fuego en las carpas, algunas personas resultaron heridas y se presentaron así forcejeos entre migrantes y agentes de policía.

El campamento

El campamento estaba instalado a orillas del río hace más de un mes después de que el gobierno del presidente estadounidense, Joe Biden, anunciara el cierre de la frontera con México para los venezolanos, con el objetivo de «abordar la migración irregular más aguda y ayudar a aliviar la presión sobre las ciudades y estados que reciben a estas personas».

Ciudad Juárez es uno de los cinco puntos de la frontera mexicana que recibe a los venezolanos expulsados por las autoridades estadounidenses desde el miércoles 12 de octubre de 2022, cuando se anunció la nueva medida migratoria.

Más de 150.000 venezolanos ingresaron a territorio estadounidense a través de la frontera con México durante el último año fiscal, un aumento de 293% con respecto al año anterior.

Se visitó este campamento a principios de noviembre en el cual los migrantes aseguraron que volver a Venezuela era impensable.

«Uno no puede extrañar algo que no existe. Y el país que yo dejé ya no existe», dijo uno de ellos.

«Tenemos la esperanza de que el presidente Joe Biden recapacite la decisión que tomó y nos dé una oportunidad a los que estamos aquí. Tengo el temor de que si cruzo, tenga esa mancha y eso me impida cumplir mi sueño», añadió.

Texas Enviará Tanques Militares a Frontera

El estado busca aumentar los controles y la seguridad para evitar el cruce ilegal de inmigrantes

Las autoridades de Texas confirmaron este lunes que desplegarán vehículos blindados en la frontera con México, además de aumentar los vuelos de aeronaves y aumentar la seguridad, para controlar la inmigración ilegal en ese estado.

La orden, emitida el pasado jueves por el Departamento Militar de Texas, señaló que la Guardia Nacional pronto desplegará 10 vehículos blindados de transporte de personal M113 en la frontera con México, Informó Texas Tribune.

De acuerdo con la orden, los vehículo blindados estarán ubicadas en varias posiciones a lo largo de la frontera que tiene Texas con México y alrededor de 50 soldados serán capacitados para operarlos.

“La Guardia Nacional de Texas está tomando medidas sin precedentes para salvaguardar nuestra frontera y para repeler y hacer retroceder a los inmigrantes que intentan cruzar la frontera ilegalmente”, dijo el Departamento Militar de Texas en un comunicado.

Además de los vehículos blindados, las autoridades en Texas aumentarán los “vuelos de aeronaves y los esfuerzos de seguridad” en la frontera.

“Estas acciones son parte de una estrategia más amplia para usar todas las herramientas disponibles para luchar contra el nivel récord de inmigración ilegal”, agregó el Departamento Militar de Texas.

Los M113 están diseñados para transportar tropas de infantería en el campo de batalla. Estos vehículos blindados pueden equiparse con cañones grandes como los de un tanque o con ametralladoras, lanzagranadas y misiles antitanques. Las autoridades del estado no han determinado si los vehículos vendrán con armas pesadas.

Los M113 son a prueba de balas y pueden soportar pequeñas explosiones. En las ciudades a veces este tipo de vehículo que vienen equipados con ruedas más ligeras para transportar equipos especiales de la policía, como los SWAT en EEUU.

Conocidos como los taxis de los campos de batalla, los M113 son confundidos con tanques porque no tienen ruedas sino tracción de orugas, estas le permiten al vehículo atravesar todo tipo caminos.

Estados Unidos ha enviado unos 200 de estos vehículos militares a Ucrania para ayudar a sus fuerzas a luchar contra la invasión rusa.

El pasado 15 de noviembre, el gobernador Greg Abbott invocó las cláusulas de invasión en las constituciones de Estados Unidos y de Texas para tomar “medidas sin precedentes en defensa de nuestro estado contra una invasión” de inmigrantes.

Estas medidas anunciadas por el gobernador de Texas incluyen el desplazamiento de soldados de la Guardia Nacional de Texas, según él, para “proteger” la frontera, “repeler y expulsar a los inmigrantes que tratan de cruzar la frontera ilegalmente”.

Desde marzo de 2021, el gobernador ha movilizado a decenas de miles de miembros de la Guardia Nacional de Texas para la operación Lone Star de apoyo a las autoridades de inmigración en la frontera de ese estado con México.

El pasado 17 de noviembre, Human Rights Watch le pidió al Gobierno del presidente Joe Biden cesar de inmediato todo apoyo operativo y financiero a la “militarización” de la frontera que emprendió Abbott.

La organización recordó que la oficina del gobernador republicano y muchas de las agencias, condados y alguaciles involucrados en esa iniciativa reciben regularmente fondos federales a través de una variedad de programas, muchos de los cuales son anteriores al lanzamiento de Lone Star en 2021.

La Oficina de Aduanas y Protección de Fronteras (CBP) ha informado que en todo el período fiscal 2022 efectuó en todo el país más de 2,7 millones de detenciones de migrantes indocumentados, de las cuales cerca de 1,4 millones ocurrieron en Texas.

¿De verdad está ‘abierta’ la frontera para que pasen los inmigrantes? Esto es lo que está pasando

¿Todo el mundo puede pasar por la frontera entre México y Estados Unidos? La última vez que el Departamento de Seguridad Naconal (DHS) estimó el ingreso ilegal exitoso al país fue a finales del año fiscal del 2018, durante el gobierno de Donald Trump. Pero, ¿cuál es la situación ahora?

Las cifras de detenciones (hallazgos) en la frontera con México registradas en abril por la Patrulla Fronteriza preocupan no solo al gobierno, sino también a los detractores de la política migratoria del presidente Joe Biden.

Pero falta un dato clave para que una de las partes esté en lo correcto en lo que afirma y alega: el número de extranjeros que cada año ingresa de manera ilegal exitosamente a Estados Unidos (Undetected Unlawful Entries).

El número que ayudará a definir quién tiene la razón en esta disputa, que se agiganta cada día mientras se acerca la fecha de la elección de medio término del primer martes de noviembre, lo registró el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) hasta finales del año fiscal 2018.

Después de esa fecha “desafortunadamente no hay cifras”, dijo a Univision Noticias Roger Maier, especialista en Asuntos Públicos de la Oficina de Aduanas y Control Fronterizo (CBP).

Si en los últimos tres años fiscales (FY 2010, 2020 y 2021) no existen datos respecto al cruce indocumentado exitoso, ¿por qué hay quienes aseguran que la frontera está abierta? ¿Por qué no se habla de una frontera ‘congestionada’ o la ‘numerosa’ llegada de extranjeros en busca de asilo a Estados Unidos a pesar de que está ‘cerrada’?

Guerra de palabras por la frontera con México

Para los republicanos la situación en la frontera con México es crítica y la política migratoria de Biden la empeora. Pero no mencionan que la llegada de miles de extranjeros en busca de asilo también se registró durante el gobierno de Donald Trump, aunque la respuesta fue diferente.

Trump usó la herramienta de separaciones forzadas de familias, un recurso que hasta el día de hoy tiene a cientos de padres separados de sus hijos.

Un ejemplo. El sábado 21 de mayo el líder de la minoría republicana de la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy, dijo en su cuenta de Twitter que “si alguien cruza la frontera ilegalmente y es atrapado por la Patrulla Fronteriza, debe regresar a su país. Eso es sentido común”.

Pero la ley no habla de ‘sentido común’. Para el abogado de inmigración Alex Gálvez, quien ejerce en Los Ángeles, California, McCarthy no explica que el asilo es un derecho vigente autorizado por el Congreso al que tienen derecho los extranjeros que se presentan en la frontera.

“Algunos pintan la situación como si todas las personas que vienen en busca de asilo son ilegales criminales, olvidando que el derecho de pedir asilo está protegido por la Ley de Inmigración”, agrega.
Gálvez también explica que, de los miles de casos que cada mes registra la Patrulla Fronteriza, unos son devueltos bajo el Título 42, otros son procesados bajo el Título 8, un grupo importante es devuelto a México bajo el Programa de Protección del Migrante a esperar en ese país la resolución de sus casos en tribunales de Estados Unidos.

También hay Menores No Acompañados procesados en el marco del Acuerdo Judicial Flores de 1997 y hay quienes entran y esperan en Estados Unidos sus casos de asilo porque se trata de casos graves, de acuerdo con la discrecionalidad de los agentes fronterizos.

“Eso no aclaran quienes condenan la actual política fronteriza”, señala.

Situación compleja en la frontera

La situación en la frontera es más compleja que los discursos de campaña. Y uno de los actores clave en la solución de la crisis, el Congreso, no está colaborando en encontrar respuestas para solucionarla, ni en el corto, mediano o largo plazo.

Estas son las claves de un problema que se viene gstando desde hace casi una década.

Cuándo se inició la crisis

La primera advertencia fue hecha en 2013 por un grupo de investigadores de la Universidad de California en un informe entregado a las Naciones Unidas (ONU). Advirtió del comienzo de un éxodo de migrantes centroamericanos hacia el norte en busca de un mejor futuro en Estados Unidos, donde viven millones de centroamericanos (muchos de ellos familiares) que huyeron en la década de los 80.

En 2014 el número de Menores No Acompañados provenientes de Centroamérica que fueron procesados fue de 57,478. Al año siguiente las cifras disminuyeron a 26,685 (un descenso del 54%, según datos de la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE). Pero ello no fue sinónimo de que la crisis había descendido, sino que el gobierno demostró capacidad de contención y de respuesta.

La totalidad de detenidos fueron procesados de acuerdo con las herramientas que proporciona el debido proceso migratorio y la mayoría fueron deportados conforme el Título 8 de la Ley de Inmigración (muchos no tenían una causa de asilo válida).

Qué pasó con los primeros deportados

La investigadora Elizabeth Kennedy, quien participó en el primer informe de 2013, dijo en marzo de 2021 a Univision Noticias que la mayoría de los expulsados “lo intentaron e intentan de nuevo, y lo intentarán otra vez (entrar a Estados Unidos). Hay varias razones: familia, han pagado mucho por tres chances (oportunidades que les dan los traficantes de personas por traerlos a la frontera sur), la violencia, el miedo y los altos índices de desempleo. Por eso persisten”.

A su vez, las condiciones de vida en Guatemala, El Salvador y Honduras, los tres principales países exportadores de asilados no eran las mismas que prevalecían en 2014 y tampoco son las mismas que existen en 2022. “Han empeorado”, puntualiza Kennedy. “Y esta situación genera un mayor flujo de migrantes hacia Estados Unidos”.

Kennedy reitera una vez más que la crisis no se encuentra en la frontera con México, está en toda la región de Centroamérica, principalmente.

¿Qué ha cambiado desde el 2013?

Kennedy dice que en países como Honduras y Guatemala los problemas que generaron la huida de migrantes en 2013 ahora son más graves “porque las tasas de varios delitos no han bajado”.

Entre los factores que siguen alimentando el éxodo se menciona la falta de inversión extranjera para generar nuevos empleos, gobiernos autoritarios, ataque a opositores y periodistas, las pandillas organizadas (maras), inflación, pandemia, pobreza y violencia doméstica.

“El problema es el siguiente: aquí en la región los problemas de raíz han existido por décadas, aun por siglos. Entonces, pensar que cualquier acción o administración en cuatro años pueda cambiar una realidad que se formó en décadas, siglos, sería incorrecto porque así no es. Si Estados Unidos o cualquier otro país quiere ayudar a cambiar la realidad de los países centroamericanos, tienen que estar pensando en el largo plazo, tienen que estar dedicando programas y proyectos para por lo menos 10 años, porque al menos eso es lo que va a tomar para que haya un cambio. Y mientras ese tiempo va avanzando, necesitan tener un plan para proteger a esa gente que huye porque hasta que la realidad no cambie, esas personas necesitan protección y no la tienen aquí en la región”, advierte.

¿Todos los detenidos se quedan en EEUU?

Los detractores de la política de Biden hacen creer que los extranjeros hallados en la frontera con México se estarían quedando ilegalmente en el país debido a la existencia de una ‘política de puertas abiertas’. Y que para detener esta crisis el gobierno no debe desmantelar el Título 42, porque gracias a esa herramienta heredada del gobierno de Trump, se evita una crisis de mayor envergadura.

El gobierno de Biden responde que:

1. El Título 42 no se trata de una política de inmigración sino de una política de salud pública cuyo objetivo es frenar la propagación del coronavirus. Y que debido al buen manejo de la crisis sanitaria (vacunas, mascarillas y distanciamiento social, entre otras medidas), es tiempo de levantar la controversial medida y recuperar el debido proceso migratorio;

2. Que sin el Título 42 el gobierno seguirá deportando bajo el Título 8 de la Ley de Inmigración, tal y como se hacía antes de la pandemia;

3. Que en abril, el mayor número de deportaciones no se hizo bajo el Título 42 sino bajo el Título 8;

4. Que la frontera no está abierta y tampoco lo estará en el caso que se logre el desmantelamiento del Título 42, por ahora vigente por mandato judicial.

Ahora bien. De los 234,088 extranjeros detenidos en abril en la frontera por la Patrulla Fronteriza (4% menos que las detenciones de marzo), el 41% fue expulsado bajo el Título 42. Y el 59% restante, es decir 137,180 encuentros, fueron procesados bajo el Título 8.

¿Dónde está la invasión de ilegales?

Para entender el discurso de la oposición, hay que revisar las cifras correspondientes al cruce ilegal exitoso (Undetected Unlawful Entries). Sólo así se puede hablar de invasión, la entrada de extranjeros libremente al país sin ningún tipo de control y proceso. De lo contrario sería una frontera altamente congestionada con un alto número de solicitantes de asilo en proceso para ser determinados por un juez de inmigración.

“Una frontera abierta es cuando no hay límites. Es una expresión que no necesariamente es correcta en el sentido literal”, dice Lilia Velásquez, profesora adjunta de la facultad de leyes en la Universidad de California en San Diego.

“Estamos viendo a miles de personas que están cruzando la frontera para entregarse, son procesadas, algunas son expulsadas rápidamente y a otras se les permite entrar para que luego un juez decida sus futuros en el país. Eso significa que hay control en la frontera. Desde ese punto de vista, estos extranjeros no han burlado los sistemas de vigilancia y control fronterizo”, agregó.

Velásquez dijo además que el discurso de ataque a la política migratoria del gobierno “es una manera ficticia de referirse para hacer creer que no está funcionando, que no hay frenos, que las personas están entrando sin ser detenidas, como que cruzaron fácilmente y se quedaron ilegalmente en el país”.

Cuántos cruces ilegales exitosos se registran

En 2016 el DHS comenzó a utilizar un nuevo sistema más preciso de metodología de medición para calcular los ingresos ilegales exitosos, dato clave que permite conocer que tan efectiva es la política migratoria de un gobierno.

El DHS comenzó entonces a publicar datos sobre métricas de seguridad fronteriza. En 2018 un reporte del ministerio publicado en el Informe del Año Fiscal de ese año, señaló que el número de cruces no detectados había caído casi tan rápidamente como el número de aprehensiones realizadas por la Patrulla Fronteriza en la frontera sur.

De 851,000 en el Año Fiscal 2,000, la cifra pasó a 62,000 en el Año Fiscal 2016.

Tres años más tarde, en el Informe del Año Fiscal 2020 del Departamento de Seguridad Nacional (DHS), el último de la presidencia de Trump, el DHS estimó que, de acuerdo con datos disponibles sobre entradas ilegales exitosas entre los años fiscales 2017 y 2018, experimentaron un incremento.

Y que la efectividad por encima del 95% en la capacidad de detención registrada entre los años 2006 y 2016 (de más de 1 millón a menos de 56,000 por año al final del gobierno de Obama) se estaba revirtiendo.

De acuerdo con el reporte, la metodología utilizada para estimar el ingreso indocumentado exitoso mostró un aumento entre 2017 y 2018, los dos primeros años del gobierno de Trump, de al menos 11 puntos porcentuales con respecto a 2016.

No hay datos en cuanto a las estimaciones de cruces ilegales exitosos durante el Año Fiscal 2020, y tampoco de los datos del Año Fiscal 2021 y lo que va del año fiscal 2022.

“Desafortunadamente no hay cifras”, dijo a Univision Noticias Roger Maier, especialista en Asuntos Públicos de la Oficina de Aduanas y Control Fronterizo (CBP).

Los que se quedan más tiempo del permitido

Otro dato relevante para comprender la compleja situación en la frontera es el que corresponde al número de extranjeros que entra legalmente al país con una visa y se queda más tiempo del permitido (Overstay).

Durante el aó fiscal 2016 el DHS revela que hubo 50,437,278 admisiones de no inmigrantes por vía aérea o marítima “que se esperaba que salieran del país durante ese año”. De ese número, el DHS calculó una tasa de incumplimiento del tiempo de permanencia autorizado (Overstay) de 1,47% (equivalente a 739,478 individuos), y celebró un 98.53% de cumplimiento de los tiempos de admisión de extranjeros permitidos.

Ahora bien, al término del año fiscal 2016 el número de personas que supuestamente se quedaron sin estatus (sospechosos) era de 628,799 y la tasa general de sospechosos fue de 1.25%. Pero en el año fiscal 2017 el número de violaciones se redujo a 544,676, “lo que hizo que la tasa de incumplimiento bajara al 1.07%”.

“En otras palabras”, se lee en el informe, al 10 de enero de 2017 (diez días antes de la llegada de Trump a la Casa Blanca o los últimos diez días de Barack Obama como presidente), el DHS verificó que el 98.90% de las entradas legales salieron del país.

El último informe, correspondiente al Año Fiscal 2020, revela que el CBP determinó que hubo 46,195,116 admisiones de no inmigrantes dentro a Estados Unidos a través de puntos de entrada aéreos o marítimos con salidas previstas para el año fiscal 2020, lo que representa la mayoría de las admisiones anuales de no inmigrantes por aire y mar.

De este número, la CBP calculó una tasa total de estadías más allá del tiempo permitido (overstay) de 1.48% o 684,499 eventos. En otras palabras, dice, el 98,52% de las

las entradas de no inmigrantes dentro del permiso concedido salieron del país a tiempo y de acuerdo con los términos de su admisión.

El reporte indica además que al final del año fiscal 2020 había 584,885 sospechas de estadías excesivas en el país y que la tasa general de sospecha de Overstay para este grupo de viajeros es del 1.27%. Y que, debido a las continuas salidas y ajustes de estatus de los individuos de esta población, a finales de diciembre de 2020 el número de sospechas de estadías excesivas disminuyó a 566,993, lo que da como resultado una tasa de sospecha de Overstay del 1.23%.

El DHS ha podido confirmar las salidas o ajustes de estatus de más del 98.77% de los no inmigrantes programados para partir en el año fiscal 2020 a través de puntos de entrada aéreos y marítimos, añade.

A pesar de los sistemas de control desarrollados por el DHS, más de medio millón de extranjeros que cada año ingresan legalmente a Estados Unidos de quedan más allá del tiempo permitido en sus visas y se convierten en inmigrantes indocumentados.

Fuente: JORGE CANCINO

Juez Impide Terminar Rechzo por Salud a Migrantes

Un juez federal impidió temporalmente que la administración de Joe Biden en EE.UU. pusiera fin a una restricción pandémica de la era Trump en la frontera entre Estados Unidos y México, según un expediente judicial del lunes.

La administración de Biden había estado en camino de poner fin a la autoridad de salud pública, conocida como Título 42 e invocada en marzo de 2020, este 23 de mayo. Mientras tanto, los funcionarios fronterizos han seguido usando la autoridad para rechazar a los migrantes en la frontera entre EE. UU. y México.

Es poco probable que la decisión del lunes cambie la situación en el terreno, dado que la autoridad de salud pública permanece en su lugar, pero puede afectar los planes de la administración.

Más de 20 estados habían pedido a la corte que impidiera que la administración terminara con el Título 42 y la semana pasada le pidieron a la corte que interviniera de inmediato. El Departamento de Justicia, en respuesta, le dijo al tribunal que debería denegar la solicitud. El Departamento de Justicia no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios de CNN.

“El Tribunal discutió la Moción de Orden de Restricción Temporal [ECF No. 24] presentada por los demandantes. Por las razones expuestas en el expediente, el Tribunal anunció su intención de conceder la moción. Las partes consultarán sobre los términos específicos que se incluirán en la orden de restricción temporal e intentarán llegar a un acuerdo”, se lee en el documento del lunes.

«Aplaudimos a la Corte por aprobar nuestra solicitud de una Orden de Restricción Temporal para mantener el Título 42», dijo el fiscal general de Arizona, Mark Brnovich. “La administración de Biden no puede continuar en flagrante desprecio por las leyes existentes y los procedimientos administrativos requeridos”.

“En una demanda presentada originalmente por Missouri, Louisiana y Arizona, nuestra Oficina acaba de obtener una orden de restricción temporal para mantener el Título 42 en vigor. Esta es una gran victoria para la seguridad fronteriza, pero la lucha continúa”, tuiteó el lunes el fiscal general de Missouri, Eric Schmitt.

Texas presentó un caso separado que también busca bloquear el fin de la autoridad. El juez federal de Texas aún no se ha pronunciado sobre esa moción.

Abbott Pone fin a Bloqueo en la Frontera

Las medidas que Abbott tomó en respuesta a la finalización del Título 42 le costó críticas bipartidistas y de comerciantes texanos.

El gobernador de Texas, Greg Abbott, puso fin a las inspecciones de camiones en los puntos fronterizos de Texas luego que sus medidas, en respuesta a la finalización del Título 42, le costara críticas bipartidistas y comerciales. Abbott lanzó el anuncio del fin de las inspecciones en Weslaco el 16 de abril.

“Mientras hablamos en este momento, todos estos puentes se abren nuevamente al tráfico normal”, dijo el gobernador.

Durante poco más de una semana, Abbott hizo que el Departamento de Seguridad Pública de Texas (DPS) detuviera todos los camiones comerciales que pasaban por los puertos de Texas para realizar inspecciones de seguridad

El primer ejecutivo del estado llamó a este orden “inspecciones de seguridad mejoradas” en la frontera como respuesta a la eliminación del Título 42 por parte del presidente Joe Biden.

Lo que propuso Abbott fue intensificar su programa de seguridad fronteriza » Operation Lone Star» con más de 10 mil soldados de la Guardia Nacional de Texas.

Y en la rueda de prensa dijo que seguirá con sus propias estrategias en la frontera hasta que el Presidente Biden envié más elementos de seguridad a la frontera.

Retrasos comerciales por “inspecciones de seguridad mejoradas” en la frontera

La medida del gobernante provocó retrasos en el tráfico en la frontera. Camioneros provenientes de México quedaron varados por más de 6 horas en los puntos de control fronterizos.

La tardanza dejó como consecuencia una reducción en los suministros que se compran en México cuyo destino son, entre otros lugares, supermercados en Texas como H-E-B.

Abbott había llegado a un acuerdo con el gobernador de Nuevo León, Samuel Alejandro García Sepúlveda, de no inspeccionar los camiones provenientes de ese estado mexicano. Luego hizo un acuerdo con la gobernadora de Chihuahua, María Eugenia Campos Galván, y el gobernador de Coahuila, Miguel Ángel Riquelme Solís y Francisco Javier García, Tamaulipas.