Estados Unidos Advierte a Migrantes

Los migrantes deben llegar por la vía legal o serán «devueltos», dijo el secretario de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Alejandro Mayorkas.

Estados Unidos busca ampliar las «vías seguras, ordenadas y legales» para la migración, dijo el martes (11.04.2023) en Panamá el secretario de Seguridad Nacional estadounidense, Alejandro Mayorkas, aunque los que lleguen ilegalmente sufrirán las consecuencias, como la deportación.

Mayorkas tuvo una reunión de trabajo con los cancilleres de Panamá, Janaina Tewaney, y de Colombia, Álvaro Leyva, mientras alcanza un nuevo récord la cifra de migrantes irregulares que cruzan la inhóspita selva del Darién, en la frontera colombo-panameña, en busca del sueño americano.

«Aquellos que buscan venir a los Estados Unidos deben aprovechar las vías seguras, ordenadas y legales que les estamos presentando», dijo Mayorkas a la prensa al cierre de la reunión en Ciudad de Panamá.

Restricciones se mantienen

Sin embargo, Mayorkas advirtió que «las personas que ingresan ilegalmente a los Estados Unidos continuarán enfrentando consecuencias, incluida la expulsión. «Estados Unidos sigue aplicando nuestras leyes de inmigración», añadió.

Unas 100,000 personas han cruzado este año la selva de Darién en su travesía hacia Estados Unidos, seis veces más que en igual periodo de 2022, según el Sistema Nacional de Migración panameño.

Durante la reunión, Mayorkas y los dos cancilleres hablaron sobre posibles medidas para enfrentar la migración irregular. También se analizaron posibles «vías legales y flexibles para los migrantes y refugiados como alternativa al cruce por el Darién», afirmó Tewaney.

La cifra de migrantes en el Darién ha subido exorbitantemente en la última década, al pasar de 3,140 en 2013 a 100,000 en los primeros cien días de 2023.

La mayoría de los migrantes que atraviesan el Darién son venezolanos, haitianos y ecuatorianos, aunque también hay asiáticos, principalmente de China e India, y africanos, sobre todo de Camerún y Somalia.

Permisos de Admisión que Sirven Para Entrar Legalmente

Cada vez más extranjeros se acogen a los diversos tipos de permisos de admisión bajo la Ley de Inmigración conocida popularmente como el “immigration parole”, que se ha convertido en una puerta de entrada a Estados Unidos.

Esta es una vía legal que permite el ingreso de extranjeros en el país que de otro modo no son considerados admisibles bajo las leyes migratorias en el territorio estadounidense.

“Todas esas categorías o tipos de permisos de admisión en forma de parole significan que hay una condición preexistente a las personas a las que se va a otorgar el beneficio y significa que esa persona va a ser admitida en EEUU como si fuera una entrada legal”, explica el abogado de inmigración del sur de Florida Santiago A. Alpízar.

“El parole o misión bajo palabra es sin ninguna condición. La única condición es la preexistente de considerar a las personas de interés público. Lo que estamos es ‘parolizando’ a las personas para que entren en EEUU”, ahonda.

Este permiso que permite entrar y permanecer temporalmente en el país de forma legal es “una dispensación especial que concede a su discrecionalidad la administración de admitir a personas de interés público en el país”, añade Alpízar.

El permiso de admisión o parole puede ser solicitado por ciudadanos extranjeros dentro o fuera de EEUU en una gran variedad de circunstancias.

Según establece la ley migratoria, este permiso oficial posibilita solicitar la autorización de trabajo y es otorgado por “por razones humanitarias urgentes o por razones consideradas estrictamente de beneficio público significativo, caso por caso” a través de las tres agencias dentro del departamento Seguridad Nacional (DHS): Servicios de Ciudadanía e Inmigración de EEUU (USCIS), el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) y Protección de Aduanas y Fronteras (CBP).

Aunque las personas con permiso de admisión temporal no son admitidas formalmente en el país, sí que pueden permanecer temporalmente en EEUU por razones humanitarias o de beneficio público.

Y, aunque no tienen un camino establecido hacia un estatus migratorio de residente permanente (LPR), sí pueden acceder a este dependiendo de la nacionalidad y las circunstancias personales.

De hecho, a lo largo de los años, este permiso de admisión temporal se ha utilizado para traer a varios grupos de ciudadanos extranjeros que buscan admisión a largo plazo, incluidos ciudadanos cubanos, refugiados indochinos y menores centroamericanos estadounidenses que no reúnen los requisitos para el estatus de refugiados, entre otros.

También, se ha concedido este permiso de admisión a personas que ya están dentro del territorio estadounidense, incluidos ciertos familiares no autorizados de miembros y veteranos de las fuerzas armadas de EEUU.

Una persona con estos tipos permisos es un solicitante de admisión que debe abandonar EEUU antes de que expire el periodo del permiso legal. La duración varía dependiendo de la categoría, aunque generalmente no dura más de una año.

Cuando una persona con cualquiera de los tipos de parole necesita permanecer más allá del periodo autorizado, puede solicitar un nuevo permiso de admisión legal temporal.

Según USCIS, el permiso de admisión temporal finaliza en la fecha en que expira su permiso o cuando el beneficiario sale de EEUU o adquiere un estatus migratorio, lo que suceda primero.

Este permiso de admisión se puede comparar a otros mecanismos legales que brindan a los ciudadanos extranjeros una autorización temporal para entrar en EEUU.

Con estos permisos de admisión temporal pueden vivir y trabajar en EEUU durante un periodo específico al igual que los beneficiarios del Estatus de Protección Temporal (TPS) y la Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA).

Sin embargo, el parole está sujeto a menos requisitos elegibles que el TPS o DACA, que están limitados a a personas dentro de EEUU.

Requisitos

▪ Cada agencia del DHS sigue su propia metodología para tomar decisiones sobre el permiso de admisión temporal. Además, los factores a considerar varían según el tipo de permiso solicitado.

“Todas las razones se resumen en el criterio discrecional de la administración de EEUU de conceder la entrada admitida legalmente bajo las condiciones preexistentes que son las ocho categorías de parole , insiste Alpízar. “Es una admisión extraordinaria en EEUU fuera de los casos de categoría clásicos que son la visa o los programas de intercambio de inmigrantes sin necesidad de visa como el caso de los europeos”.

▪ En general, como se trata de un beneficio discrecional, todas las decisiones se toman caso por caso. Todo depende del funcionario de inmigración quien evalúa los siguientes factores:

Motivo de la solicitud.

Si hay evidencia de antecedentes penales o violación de inmigración.
Si hay evidencia de haber participado en fraude.
Si la presencia del extranjero beneficiará al ciudadano estadounidense o residente permanente legal.
Evidencia de carácter
Si hay otros medios disponibles para que ingrese en EEUU como una visa.

▪ USCIS indica que pueden poner condiciones a los permisos como requisitos de presentación de informes y que puede revocarlos en cualquier momento y sin previo aviso cuando determine que ya no se justifica o cuando el beneficiario no cumple con las condiciones.

Permiso de Admisión de Puerto de Entrada

▪ Conocido en inglés como “Port-of-Entry Parole” se autoriza en el puerto de entrada a residentes permanentes que regresan a EEUU y no disponen de los documentos adecuados.

▪ Las autoridades pueden proporcionar esta admisión a los ciudadanos extranjeros que ingresen por estadías cortas para un funeral familiar o ayudas para un desastre natural.

▪ En estos casos USCIS cuenta con programas particulares.

Permiso de Admisión de Inspección Diferida

▪ Esta forma se conoce en inglés como “Deferred Inspection Parole”. Se usa cuando un extranjero se presenta en un puerto de entrada con documentación, pero quedan dudas sobre su admisibilidad en EEUU.

▪ Más tarde la persona se presenta en otra oficina de inmigración para resolver la situación migratoria.

Permiso de Admisión Anticipada

▪ Llamada en inglés “Advance Parole”, es un permiso autorizado antes de llegar al puerto de entrada a EEUU. Se trata de un documento para ciudadanos extranjeros —no residentes permanentes— que viven en EEUU, pero que necesitan partir y quieren regresar a territorio estadounidense, y cuyas condiciones de estadía no permiten el reingreso en EEUU.

▪ Este documento autoriza al extranjero a presentarse en el puerto de entrada de EEUU para solicitar este permiso después de viajar al extranjero.

▪ Pero, no da derecho al portador a entrar a EEUU. Es una decisión discrecional del funcionario en el puerto de entrada.

▪ Necesitan esta categoría los solicitantes de LPR, titulares y solicitantes de TPS y las personas con parole que quieren ingresar en el país después de viajar al extranjero.

Permiso de Admisión Humanitario para personas fuera de EEUU

▪ Las oficinas del DHS generalmente han interpretado este permiso de admisión, conocido en inglés como Humanitarian Parole for Persons Outside the United States relacionado con necesidades médicas, familiares y por razones humanitarias urgentes.

▪ No hay una definición legal o reglamentaria para establecer el término “razón humanitaria urgente”, pero USCIS ha declarado que considera tales factores como la sensibilidad temporal de las circunstancias y el grado de sufrimiento que puede resultar si no se autoriza la libertada condicional.

▪ Según la USCIS, se consideran circunstancias humanitarias urgentes:

Recibir tratamiento clínico en EEUU.
Convertirse en un donante de órganos de una persona en EEUU.
Visitar o cuidar a un pariente enfermo en EEUU.
Asistir a un funeral o arreglar los asuntos de un pariente fallecido en EEUU.
Venir a EEUU para recibir protección contra daños específicos o individualizados.

Permiso de Admisión por Beneficio Público Significativo para Personas de EEUU

▪ Esta categoría, conocida en inglés como “Significant Public Benefit Parole for Persons Outside the United States” (SPBP) es para las personas que residen fuera de EEUU y solicitan la libertada condicional para ingresar en el país temporalmente para un beneficio público importante, como participar en un procedimiento legal civil o penal.

▪ El DHS considera este permiso de admisión limitado a las personas de interés policial como testigos de actuaciones policiales. Se podría otorgar este tipo a un testigo clave sin medios legales para ingresar en EEUU para testificar en un proceso penal por trafico de drogas.

Permiso de Admisión en el Lugar

▪ Llamado en inglés “Parole-in-Place”, es para personas que están físicamente en EEUU, pero que no han sido admitidas legalmente para permanecer en el país.

▪ Se le concede a ciertos miembros de la familia —cónyuges, hijos y padres — de miembros en activo y ex miembros de las Fuerzas Armadas de EEUU o Selected Reserve of the Ready Reserve (también llamados SELRES, SR).

Permiso de Admisión relacionada con la eliminación

▪ Esta categoría conocida en inglés como “Removal-Related Parole” se aplica a los extranjeros en proceso de deportación o a los extranjeros que tienen órdenes definitivas de deportación.

▪ También, a los extranjeros a los que ICE les otorgó acción diferida en cualquier momento después del inicio de los procedimientos de deportación.

Programas Especiales de Admisión para personas fuera de EEUU

▪ Son conocidos en ingles como Programas “Categorical Parole” para poblaciones particulares en el extranjero en respuesta a circunstancias específicas. En esta categoría entra la lotería cubana y los programas establecidos en relación a acuerdos internacionales.

▪ Estos programas tienen en común que se agrupan bajo tres encabezados: programas de permisos de admisión relacionados con refugiados, programas de permisos de admisión para reunificación familiar y programas de permisos de admisión para cubanos.

▪ También, hay un programas de permisos de admisión para empresarios internacionales (IEP), para aumentar y mejorar el espíritu empresarial, la innovación y la creación de empleo en EEUU. Los empresarios tienen que demostrar que esta nueva empresa tiene potencial significativo para crecer rápidamente y crear empleo.

Suspenderán la Migración Legal Durante 60 Días

La orden ejecutiva, de la que se conocen aún pocos detalles, no vetará la llegada de profesionales de la salud y de otras áreas que ahora mantienen el país en marcha. Activistas y sindicatos han criticado la medida, que podría ser contestada ante la justicia.

El presidente, Donald Trump, prevé firmar esta semana una orden ejecutiva que, ante la pandemia del COVID-19, suspenderá por un plazo inicial de 60 días la inmigración legal a Estados Unidos.

Trump anunció la medida la noche del lunes en su cuenta en Twitter, y durante una rueda de prensa en la Casa Blanca, dijo este martes que evaluará una posible extensión «según las condiciones económicas en el momento».

El mandatario prevé firmar la medida probablemente mañana, «una vez que la completen los abogados», y adelantó que la orden ejecutiva incluirá una exención para los agricultores.

«Al hacer una pausa en la inmigración, estaremos ayudando a que los estadounidenses queden de primeros en la línea para los trabajos cuando Estados Unidos reabra», explicó.

«Esto es muy importante, sería injusto y equivocado que los estadounidenses despedidos por el virus sean reemplazados con una nueva fuerza laboral traída del exterior. Tenemos que cuidar primero del trabajador estadounidense», enfatizó.

Pero la medida ya ha provocado el rechazo de los defensores de los derechos civiles y de los inmigrantes, y podría ser impugnada en los tribunales.

Trump anunció este martes que la medida temporal durará 60 días e incluirá exenciones para refugiados, trabajadores esenciales, profesionales de salud y sus familias, y extranjeros considerados “en el interés nacional”.

Aunque Trump había amenazado con suspender todo el sistema de inmigración ilegal, su gobierno afrontó una fuerte condena del empresariado, por lo que ahora la orden ejecutiva se centrará en frenar la concesión de nuevas green cards y mantendrá en pie los programas de visas para trabajadores temporales.

Sin embargo, Trump no descartó implementar una segunda orden ejecutiva para restringir más las visas legales en otra oportunidad.

“Debido al ataque del enemigo invisible, así como la necesidad de proteger los trabajos de nuestros GRANDES ciudadanos estadounidenses, ¡firmaré una orden ejecutiva para suspender temporalmente la inmigración!”, tuiteó Trump el lunes.

La portavoz de la Casa Blanca, Kayleigh McEnany, aseguró este martes que Estados Unidos afronta “tiempos sin precedentes”, y el objetivo del presidente es “proteger la salud y bienestar económico de los ciudadanos estadounidenses”.

McEnany repitió el argumento de Trump de que décadas de niveles históricos de inmigración han deprimido los salarios y provocado un alza en el desempleo, “especialmente entre trabajadores afroamericanos y latinos”.

La campaña de reelección de Trump mantuvo esa línea populista en un mensaje enviado a sus partidarios, en el que señaló que el mandatario quiere proteger la salud y el bienestar económico de los estadounidenses.

«En unos momentos en que un virus ha interrumpido artificialmetne nuestra economía, el introducir más competencia por los trabajos agravaría el desempleo y deprimiría los salarios, especialmente en las comunidades negra y latina», advirtió Tim Murtaugh, un portavoz de la campaña de reelección.

En los meses anteriores a la pandemia, sin embargo, el desempleo estaba en su mínimo histórico; desde entonces, más de 22 millones de ciudadanos han perdido su trabajo.

“En unos momentos en que los estadounidenses quieren regresar a trabajar, se necesita actuar”, dijo McEnany.

El argumento de Trump y conservadores afines –de que los extranjeros “roban” empleos y deprimen salarios– contradice la mayoría de estudios que demuestran sus contribuciones al crecimiento económico en el país.

En ese sentido, el presidente de la principal federación sindical, AFL-CIO, Richard Trumka, ha sido contundente: la medida “no creará ni un solo puesto de trabajo, no salvará una sola pensión, ni protegerá a ninguna comunidad, y privará al país de lo que verdaderamente lo hace grande: nuestra diversidad”.

Estados Unidos ha registrado por ahora casi 800,000 contagios de COVID-19 y más de 42,000 muertes, según el recuento de NBC.

El presidente ha insistido en que la evolución de la pandemia permite ya reabrir la economía del país, muy golpeada por las órdenes de cuarentena para contener la enfermedad.

Su mensaje, por un lado, es que el país tiene que cerrar su sistema de inmigración debido a la pandemia pero, por otro, destaca la urgencia de reabrir al país para evitar un mayor desplome económico.

Ante la escasez de trabajadores esenciales (desde médicos hasta agricultores o transportistas), el Departamento de Seguridad Nacional ha intentado relajar sus reglamentos para atraer a más inmigrantes que cultiven el campo y aseguren el suministro de alimentos a ciudadanos encerrados en sus casas. Y el Departamento de Estado ha autorizado visas de emergencia para profesionales de salud.

Posibles afectados

En declaraciones a Noticias Telemundo, Doug Rand, experto en inmigración en la Administración de Barack Obama y cofundador de la empresa Boundless Immigration, vaticinó que la medida probablemente no afectará a los extranjeros que ya viven y trabajan aquí con permisos permanentes o visas temporales.

Funcionarios de la Administración Trump dijeron este martes que los ciudadanos estadounidenses que tramiten visas para traer a sus cónyuges e hijos podrán hacerlo, pero la opción quedaría cerrada para familiares de residentes legales y aquellos que soliciten la «tarjeta verde» a través de un contrato laboral.

En la actualidad, aquellos con trámites pendientes ya sufren la cancelación de entrevistas y enormes retrasos en la Oficina de Servicios de Inmigración y Ciudadanía (USCIS, en inglés) por la pandemia.

La medida afectaría además a aquellos con permisos temporales para estar en el país, aunque, explica Rand, “debido a la encerrona del mundo durante la pandemia, esa cifra no es muy grande”.

Las autoridades migratorias han frenado el paso a solicitantes de asilo desde que Trump declaró la emergencia nacional por la pandemia: la frontera está cerrada, y son devueltos a México independientemente del mérito de sus casos o el riesgo para sus vidas.

Un terreno hostil para migrantes

La Administración Trump mantiene en pie otras restricciones en el sistema, entre ellas la veda a inmigrantes de países musulmanes; la regla de carga pública, que limita la emisión de tarjetas de residencia permanente; la drástica reducción en el reasentamiento de refugiados; y el retraso en visas temporales y procesos de ciudadanía.

Según Tim Young, portavoz del grupo Lutheran Immigration and Refugee Service, bajo la Administración Trump el país ha registrado un declive histórico en el ingreso de refugiados, tomando en cuenta que el promedio anual ha sido de 95,000 desde la puesta en marcha del Acta sobre Refugiados de 1980.

Para el año fiscal 2020, el límite anual es de 18,000, pero el gobierno solo ha procesado a un 41% del total, y muchos no han podido ingresar al país debido a la cancelación de vuelos.

EEUU registra el mayor declive histórico en el ingreso de refugiadosEl nuevo tope anual para el ingreso de refugiados en el año fiscal 2020 es de 18,000, su mayor déclive en la historia de EEUU, pero muchos no han podido ingresar debido a la cancelación de vuelos en plena pandemia del COVID-19. Lutheran Immigration and Refugee Service / Noticias Telemundo
La inminente orden ejecutiva, coordinada con la ayuda de Stephen Miller, un asesor político de Trump conocido por su ideología «anti-inmigrante», ha generado el rechazo de la oposición demócrata, y de grupos cívicos, religiosos, empresariales y sindicalistas.

Algunos activistas ya bautizaron a Trump con el mote de “xenófobo en jefe”.

Andrea Flores, de la Unión de Libertades Civiles (ACLU, en inglés) acusó a Trump de interesarse más en atizar el sentimiento anti-inmigrante que en salvar vidas.

“No podemos permitir que el presidente Trump explote esta pandemia para avanzar su racismo y xenofobia”, agregó.

Aprueban Propuesta de Apoyar Legalmente a Indocumentados en Houston

Tras una votación de tres votos a favor y dos en contra, la junta de Comisionados del condado Harris adopta la propuesta de la juez Lina Hidalgo que ofrece apoyo a aquellas personas que tienen razones para permanecer en los Estados Unidos y que no cuentan con los recursos económicos necesarios para pagar por asistencia jurídica.

La junta de Comisionados del condado Harris aprueba con tres votos a favor y dos en contra, la propuesta que presentó la juez Lina Hidalgo que otorga ayuda para pagar representación legal a los inmigrantes.

El objetivo de esta propuesta, la primera aprobada en un condado, es crear una política que apoye a las personas que tienen razones para permanecer en los Estados Unidos y no tienen un abogado que los represente.

De acuerdo con Hidalgo, que el 97% de los extranjeros que cuentan con un representante legal en sus casos migratorios, son más exitosos.

Cuando los niños y mujeres no tienen un abogado, solamente el 2% logra tener éxito y permanecer en el país, señala la juez.

“Con esta propuesta se busca ofrecer algo de justicia a los inmigrantes que son parte del sistema migratorio del condado Harris y de los Estados Unidos, muchos de los inmigrantes que finalmente son deportados son personas que son necesarias para la economía del estado”, indicó Hidalgo.

Los detalles del programa serán desarrollados una vez que se haya aprobado.

“No podemos representar a todo el mundo, pero esperamos poder forjar compromisos con organizaciones sin ánimo de lucro para que puedan invertir al igual que el condado”, agregó Hidalgo.

La implementación de dicho programa se podría llevar algunos meses, aseveró la juez Hidalgo.

“Lo debemos hacer como condado, como comunidad atacar estos retos que afectan a nuestra economía y afectan a nuestras familias”, concluyó la juez.

¿Usted Estaría Dispuesto a Mencionarle su Estatus Legal al Gobierno?

Hay una polémica sobre el Censo de 2020: ¿Se les debe preguntar a todos los miembros de la población de Estados Unidos sobre el estatus de su ciudadanía?

Tanto críticos como defensores de esta cuestión dicen que su posición producirá una contabilidad más precisa de la población. Los críticos dicen que preguntar sobre la ciudadanía podría asustar a las minorías y hacer que no respondan, y así se dejarían de contar en el censo. Los partidarios de esta pregunta dicen que una mejor comprensión de dónde vive la ciudadanía mejorará las elecciones.

El conteo del censo decenal se usa para dividir los asientos del Congreso y distribuir millones de dólares de fondos federales.

El debate se dirige al Tribunal Supremo el martes para empezar con los argumentos orales. El tribunal superior tomó el caso después de que tres tribunales inferiores emitieran sentencias punzantes rechazando la cuestión.

¿Cómo y por qué se agregó la ciudadanía al Censo?

En marzo de 2018, el secretario de Comercio, Wilbur Ross, anunció que el Censo de 2020 preguntaría a toda la población de Estados Unidos sobre el estado de su ciudadanía, una pregunta que no se había formulado en la encuesta enviada a todos los hogares desde 1950.

Más recientemente, la pregunta apareció en las encuestas enviadas a una muestra de la población, como la Encuesta de la Comunidad Estadounidense y la llamada encuesta de largo formato.

El proceso comenzó formalmente con una solicitud del Departamento de Justicia en diciembre de 2017 “para que la Oficina del Censo restituya en el cuestionario del Censo de 2020 una pregunta relacionada con la ciudadanía”. Los datos resultantes son “críticos” para comprender a la población localizada de votantes elegibles para que pueda hacer cumplir la Ley de Derechos de Votación y prevenir la discriminación racial en las urnas, dijo el Departamento de Justicia.

La Oficina del Censo instó a Ross a encontrar una solución diferente. Escribieron que agregar la pregunta “es muy costoso, perjudica la calidad del conteo del Censo” y produciría datos menos precisos de los que el gobierno podría compilar al analizar los datos recopilados de otras maneras.

Pero Ross escribió que hacer la pregunta “del 100% de la población le da a cada encuestado la oportunidad de responder” y los vacíos de quienes no respondan pueden llenarse a través de los otros datos, conocidos como “registros administrativos”.

Los críticos acusan a Ross de ocultar los verdaderos orígenes del cambio y cuestionan sus motivaciones.

Notaron que la carta del Departamento de Justicia llegó después de que Ross se acercó al entonces secretario de Justicia Jeff Sessions, y que meses antes, el estratega de la Casa Blanca Steve Bannon había conectado a Ross con Kris Kobach, quien dirigió un panel muy criticado que investigaba el presunto fraude electoral.

En un correo electrónico, Kobach le escribió a Ross que la falta de una pregunta sobre la ciudadanía significa, entre otras consecuencias, que “los extranjeros que en realidad no ‘residen’ en Estados Unidos todavía se cuentan para fines de distribución en el Congreso”.

Y dos meses antes de eso, Ross cuestionó a un asistente por correo electrónico: “Estoy desconcertado sobre por qué no se ha hecho nada en respuesta a mi solicitud de hace meses de que incluyamos la pregunta de ciudadanía. ¿Por qué no?”.

Ross luego testificó ante el Congreso que la decisión no involucró a la Casa Blanca.

“¿Ha discutido el presidente o alguien en la Casa Blanca con usted o alguien en su equipo acerca de agregar esta pregunta de ciudadanía?”, preguntó la representante Grace Meng, demócrata de California, en una audiencia en marzo de 2018. Ross respondió: “No conozco nada de eso”.

En marzo de 2019, Ross le dijo al Congreso que él había malinterpretado su pregunta y “testificó sinceramente lo mejor que pude en respuesta a mi comprensión de cuáles eran las preguntas”.

Los abogados de la administración han argumentado en el tribunal que las motivaciones de Ross son en gran medida insignificantes, siempre y cuando en última instancia proporcionó una buena razón para tomar la decisión.

¿Qué han dicho los tribunales hasta ahora?
Tres tribunales federales de primera instancia han emitido una serie de opiniones punzantes que encuentran violaciones constitucionales y legales en la pregunta misma y en el proceso para desarrollarla.

Más recientemente, un juez federal de Maryland dijo que los datos científicos presentados en el juicio “confirman que la adición de la pregunta de ciudadanía resultará en una ciudadanía menos precisa y menos completa”. Hacer la pregunta violaría la Constitución y la precisión del censo “sin compromiso razonable”, se lee en el fallo.

Esa decisión siguió a dos fallos similares de los tribunales de Nueva York y California, que el gobierno apeló ante el Tribunal Supremo.

¿Qué sucede después del fallo de la Corte Suprema?

La Oficina del Censo dice que está lista para cualquier decisión que el alto tribunal imparta. Se han preparado dos versiones de la encuesta en papel y electrónica.

Actualmente, los funcionarios también están realizando una prueba de campo de la pregunta para determinar la mejor manera de difundir sus mensajes: que los datos son importantes y que la ley federal impide que la Oficina del Censo comparta nombres o respuestas con las autoridades de inmigración.

Dicen que tienen los recursos para realizar correos de seguimiento y visitas a hogares que no responden y dicen que no se ha aplicado la multa por no responder al censo.

Los abogados del gobierno informaron a los tribunales que necesitan una decisión para fines de junio. Las imprentas de los formularios de respuesta, dice la Oficina del Censo, están programadas para comenzar a funcionar el 1 de julio.

Nuevas Reglas Hacen más Difícil Obtener Estatus de Legal

La línea dura que el presidente Donald Trump ha aplicado desde que llegó al poder ha complicado los trámites migratorios para muchas personas que llegaron al país en busca de una mejor vida para sus familias.

La política del gobierno estadounidense ha ido disminuyendo las opciones que tienen los migrantes para obtener un estatus legal con la ayuda del Departamento de Seguridad Nacional, encargado de cumplir las leyes y el Servicio de Ciudadanía e Inmigración (USCIS), en donde se procesan las solicitudes.

Como resultado de todo el proceso, se han implementado una serie de políticas, cambios operativos y nuevas reglas que recientemente se incorporaron al proceso como forma de «mejorar la integridad del sistema de inmigración», de acuerdo a USCIS.

De acuerdo a un artículo publicado por el Miami Herald, estos son los 10 cambios que debe conocer:

-Ampliación de la política de deportaciones: la administración Trump amplió la lista de razones por la que los inmigrantes podrían ser enviados a un tribunal, específicamente a aquellos que se les ha negado una solicitud de beneficios como la residencia o una visa. Tras el negativa, su estatus en el país pasa a ser ilegal.

Según USCIS, los migrantes solían recibir una notificación de comparecencia que indicaba el inicio del proceso de deportación, pero ahora indicará que han perdido su estancia legal.

-Identificación de los estudiantes con visas expiradas: una nueva guía indica cómo calcular el tiempo en el que los estudiantes extranjeros como visas tipo F-1, M o J se quedan en el país después de que su tiempo de estudio ha concluido, sin que esto cuente como presencia ilegal.

Generalmente los estudiantes violaban el permiso de estancia y conseguían un trabajo, pero ahora, quienes desobedezcan el límite se enfrentarán a un proceso de expulsión o deberán abandonar el país de manera voluntaria.

-Mejorar la evaluación de las solicitudes de beneficios de migración: USCIS ha decidido realizar controles al azar durante el periodo de adjudicación con el objetivo de identificar posibles amenazas para la seguridad nacional de país.

Es por eso que, entre otras medidas, ha asegurado los servicios biométricos para cualquier beneficio y personalizado las entrevistas que realizan los jueces.

-Revisar a profundidad la aprobación de casos de asilo: los funcionarios ha cambiado la manera en la que se procesan las solicitudes por la excesiva acumulación de casos pendientes y un aumento de solicitudes fraudulentas.

Ahora, USCIS programa las entrevistas para los casos más recientes por encima de los viejos y asegura que los cambios han sido en parte para alertar a «aquellos que tratan de obtener un permiso de trabajo basado en su historial de asilo».

-Revisar cuidadosamente las solicitudes de extensión de visas: la agencia actualizó su protocolo y revisará con mayor escrutinio las solicitudes de visas de no inmigrante y sus extensiones. Para esto últimos, los migrantes deben presentar nuevamente evidencia que apoye su elegibilidad.

«Los oficiales de USCIS no deben tener las manos atadas al evaluar si una petición cumple con los requisitos legales», señaló la agencia.

-Combatir el abuso de la visa H-B1: un nuevo memorando detallará la relación entre los empleadores estadounidenses y los empleados extranjeros durante el tiempo que los profesionales que poseen este tipo de visa trabajan en la empresa y verificar la necesidad de que la compañía patrocinadora tiene una asignación específica para esa persona en un periodo de al menos tres años.

-Ampliar las inspecciones en los centros de trabajo: La agencia ha intensificado su programa de visitas administrativas en los lugares de trabajo en donde se comprueba que tanto el empleador como el empleado están cumpliendo con las asignaciones cubiertas por la visa, que no haya explotación y que se respetan las leyes de inmigración.

-Proteger a los trabajadores estadounidenses: una orden ejecutiva, conocida como Buy American and Hire American, ordena que se proteja a los trabajadores nacionales y que se investigue, en caso de ser necesario, la discriminación en contra de ellos por parte de los empleadores que traen a extranjeros.

-Compartir información intergubernamental: USCIS actualizó sus portales para compartir información con los departamentos de Estado, Trabajo y Justicia para prevenir el fraude de inmigración y tener una mayor eficiencia en el proceso de aprobación de visas.

-Poner en práctica regulaciones y políticas necesarias: USCIS ha implementado una serie de políticas que se ajustan a las leyes aprobadas en el Congreso, incluyendo la actualización de la visa EB-5 para inversionistas extranjeros, a la cual se le agregó un apartado en donde, si la persona pudiera convertirse en una carga pública para el país, entonces no tendrá acceso al beneficio.

Esta medida, propuesta por el Departamento de Seguridad Nacional, también sería un obstáculo para quienes apliquen para la tarjeta de residencia y hayan recibido ayuda federal como subsidios para viviendas o cupones de alimento.

Trump Pide Migración Legal

El presidente Donald Trump dice estar ahora a favor de la llegada legal de más inmigrantes debido a los logros económicos de su gobierno.

El mandatario generó asombro durante su discurso del Estado de la Unión el martes cuando dijo que quería que la gente “venga a nuestro país en las cantidades más elevadas de la historia, pero tienen que hacerlo legalmente”. Sin embargo, las políticas que ha impulsado hasta la fecha no reflejan eso.

Al preguntársele el miércoles durante una reunión con reporteros si la frase representa un cambio de políticas, respondió que sí.

Eso de acuerdo con una transcripción tuiteada por un reportero del periódico The Advocate, de Luisiana, en la que Trump afirmó: “Necesito que venga más gente porque requerimos gente para que trabaje en las fábricas y las plantas, y en las compañías que están regresando”.

Pero en su discurso del martes, Trump declaró que los inmigrantes que viven de manera ilegal en Estados Unidos les roban empleos a los estadounidenses de clase media.

Es difícil saber cuántos empleos se generarán en las fábricas recién planificadas. El gasto en construcción de fábricas todavía tiene que aumentar significativamente luego de haber disminuido entre 2016 y gran parte de 2018. En el último año, el gasto en construcción se ha mantenido estable, de acuerdo con la Oficina del Censo del Departamento de Comercio.

Trump ha propuesto varias políticas que restringirían considerablemente la inmigración legal, como la de limitar la capacidad de los inmigrantes para patrocinar a familiares para que vengan a Estados Unidos. También ha reducido en los últimos dos años el número de refugiados que Estados Unidos aceptará.

El Instituto Cato, que favorece políticas migratorias más abiertas, estimó que el plan de inmigración que Trump ha propuesto reduciría el número de inmigrantes legales hasta un 44 por ciento, el recorte más grande a la inmigración legal desde la década de 1920.

La Casa Blanca no ha contestado preguntas sobre cómo se podría traducir el nuevo enfoque de Trump a sus posturas y propuestas.